La deshumanización, en el contexto médico y psicológico, se refiere a un proceso o estado en el que un ser humano es tratado como si no tuviera las características o qualidades mentales y emocionales normales de un ser humano. Puede implicar la negación de humanidad o los derechos humanos fundamentales de un individuo. Esta situación puede ocurrir en diversos entornos, como en situaciones de guerra, abuso, tortura, racismo y discriminación, así como en ciertas relaciones interpersonales y en el ámbito de la atención médica.
En el contexto de la atención médica, la deshumanización puede referirse a la falta de consideración o empatía hacia los pacientes, lo que puede resultar en un trato impersonal, falta de comunicación efectiva y disminución del cuidado centrado en el paciente. Esto puede tener consecuencias negativas en la satisfacción del paciente, la adherencia al tratamiento y los resultados clínicos.
La deshumanización también se ha relacionado con la objeción de los profesionales de la salud a ciertos grupos de pacientes, como aquellos que viven con enfermedades mentales graves o trastornos adictivos. La lucha contra la deshumanización en el ámbito médico y sanitario implica promover la educación y la conciencia sobre los prejuicios inconscientes, fomentar la empatía y el respeto por la dignidad humana y mejorar las habilidades de comunicación interpersonal.