Hemorragia en uno o ambos HEMISFERIOS CEREBRALES con inclusión de los GANGLIOS BASALES y de la CORTEZA CEREBRAL. Se asocia con frecuencia con HIPERTENSIÓN y TRAUMATISMO CRANEOENCEFÁLICO.
Sangrado que se localiza en el interior del ESPACIO SUBARACNOIDEO, consecuencia fundamentalmente de la rotura de un ANEURISMA INTRACRANEAL. Puede producirse después de lesiones traumáticas (HEMORRAGIA SUBARACNOIDEA TRAUMÁTICA). Las características clínicas incluyen CEFALEA, NAÚSEA, VÓMITOS, rigidez de nuca, déficits neurológicos variables y reducción del estado mental.
Formación de una zona de NECROSIS en el HEMISFERIO CEREBRAL causada por una insuficiencia del flujo de sangre arterial o venoso. Los infartos del cerebro se clasifican generalmente por el hemisferior afectado (es decir, izquierdo o derecho), lóbulos (por ejemplo, infarto del lóbulo frontal), distribución arterial (por ejemplo, INFARTO DE LA ARTERIA CEREBRAL ANTERIOR) y etiología (por ejemplo, infarto embólico).
Sangramiento o escape de sangre de un vaso.
Vasos sanguíneos arteriales que irrigan el CEREBRO.
Grupo heterogéneo de trastornos esporádicos o familiares caracterizados por depósitos de AMILOIDE en las paredes de los vasos sanguíneos de tamaño pequeño y medio de la CORTEZA CEREBRAL y de las MENINGES. Las características clínicas incluyen múltiples pequeñas HEMORRAGIAS DE HEMISFERIOS CEREBRALES, isquemia cerebral (ISQUEMIA ENCEFÁLICA), e INFARTO DE HEMISFERIOS CEREBRALES. La angiopatía amiloide cerebral no guarda relación con la AMILOIDOSIS generalizada. Los péptidos amiloidogénicos en esta afección son casi siempre los que se encuentran en la ENFERMEDAD DE ALZHEIMER. (Kumar: Robbins y Cotran: Pathologic Basis of Disease, 7th ed., 2005)
Espectro de afecciones con trastorno de la irrigación cerebral. Pueden afectar a los vasos (ARTERIAS o VENAS) del CEREBRO, CEREBELO y TRONCO ENCEFÁLICO. Las principales categorías incluyen las MALFORMACIONES ARTERIOVENOSAS INTRACRANEALES, ISQUEMIA ENCEFÁLICA, HEMORRAGIA CEREBRAL y otras.
Sangrado en el interior del CRÁNEO, que incluye hemorragias en el encéfalo y en las tres membranas de las MENINGES. El escape de sangre lleva con frecuencia a la formación de un HEMATOMA en los espacios epidural, subdural y subaracnoideo del cráneo.
Sangrado en el interior del CRÁNEO causada por HIPERTENSIÓN sistémica, por lo general en asociación con ARTERIOSCLEROSIS INTRACRANEAL. Las hemorragias hipertensivas son más frecuentes en los GANGLIOS BASALES, CEREBELO, PROTUBERANCIA y TÁLAMO, pero pueden afectar también a la CORTEZA CEREBRAL, sustancia blanca subcortical y otras estructuras encefálicas.
Susceptibilidad de los CAPILARES a la rotura, bajo condiciones de incremento de la tensión.
Radiografía del sistema vascular del cerebro luego de la inyección de un medio de contraste.
Trastorno familiar caracterizado por depósitos AMILOIDES en las paredes pequeñas y medianas de los vasos sanguíneos de la CORTEZA CEREBRAL y MENINGES.
La mayor y más compleja de las arterias cerebrales. Se divide en tres ramas, temporal, frontal y parietal que proporcionan irrigación a la mayor parte del parénquima de estos lóbulos en la CORTEZA CEREBRAL. Estas son las áreas implicadas en las actividades motoras, sensitivas y del lenguaje.
Circulación de la sangre a través de los VASOS SANGUÍNEOS del ENCÉFALO.
Parte del SISTEMA NERVIOSO CENTRAL contenida dentro del CRÁNEO. Procedente del TUBO NEURAL, el encéfalo embrionario consta de tres partes principales: PROSENCÉFALO (cerebro anterior), MESENCÉFALO (cerebro medio) y ROMBENCÉFALO (cerebro posterior). El encéfalo desarrollado consta de CEREBRO, CEREBELO y otras estructuras del TRONCO ENCEFÁLICO.
Tomografía que utiliza transmisión de rayos x y un algoritmo de computador para reconstruir la imagen.
Grupo de procesos infecciosos degenerativos, esporádicos, familiares y/o hereditarios, caracterizados por la acumulación del plegamiento anormal de proteinas y el depósito de AMILOIDE. La extensión de los depósitos amiloides hace que se desplacen las estructuras tisulares normales, causando una disfunción. Algunos signos y sintomas dependen de la localización y tamaño de los depósitos.
Reducción localizada del flujo sanguíneo al tejido encefálico ocasionada por obstrucción arterial o hipoperfusión sistémica. Se produce frecuentemente junto a HIPOXIA ENCEFÁLICA. La isquemia prolongada se asocia con INFARTO ENCEFÁLICO.
Embolismo o trombosis en la que intervienen vasos sanguíneos que irrigan a las estructuras intracraneales. Los émbolos pueden originarse en sitios extra o intracraneales. Las trombosis pueden ocurrir en estructuras arteriales o venosas.
Grupo de afecciones caracterizadas por una pérdida súbita y sin convulsiones de la función neurológica debido a ISQUEMIA ENCEFÁLICA o HEMORRAGIAS INTRACRANEALES. El accidente cerebrovascular se clasifica según el tipo de NECROSIS tisular, como la localización anatómica, vasculatura afectada, etiología, edad del individuo afecto y naturaleza hemorrágina o no hemorrágica. (Adams et al., Principles of Neurology, 6th ed, pp777-810)
Colección de sange fuera de los VASOS SANGUÍNEOS. El hematoma puede estar localizado en un órgano, un espacio o un tejido.
Sangramiento de los vasos de la retina.
Bolsa externo anormal en la pared de los vasos sanguíneos intracraneales. Los aneurismas saculares son la variante más común y tienden a formarse en los puntos de ramificación arterial en el POLÍGONO DE WILLIS en la base del encéfalo. La rotura vascular da lugar a HEMORRAGIA SUBARACNOIDEA o HEMORRAGIA INTRACRANEAL. Los aneurismas gigantes (mayores que 2,5 cm de diámetro) pueden comprimir las estructuras adyacentes, como el NERVIO OCULOMOTOR. (Adams et al., Principles of Neurology, 6th ed, p841).
Anomalía vascular compuesta por una colección de VENAS grandes, tortuosas, de paredes finas que pueden darse en cualquier parte del sistema nervioso central pero carece de tejido nervioso interpuesto. Es común la ocurrencia familiar y se ha asociado con un número de genes localizados en 7q, 7p y 3q. Las características clínicas incluyen CONVULSIONES, CEFALEA, ACCIDENTE CEREBROVASCULAR y déficit neurológico progresivo.
Hemorragia en el interior de uno o ambos HEMISFERIOS CEREBRALES debida a traumatismo. La hemorragia puede afectar a cualquier parte de la CORTEZA CEREBRAL y a los GANGLIOS BASALES. Dependiendo de la intensidad de la hemorragia, las características clínicas pueden incluir CONVULSIONES, AFASIA, TRASTORNOS VISUALES, TRASTORNOS DEL MOVIMIENTO, PARÁLISIS y COMA.
Enzima proteolítica de la familia de la serina proteinasa, presente en muchos tejidos, que convierte el PLASMINÓGENO en FIBRINOLISINA. Tiene actividad de enlace con la fibrina y es diferente inmunológicamente del ACTIVADOR DE PLASMINÓGENO DE TIPO UROQUINASA. La secuencia primaria, compuesta de 527 aminoácidos, es idéntica tanto en las proteasas naturales como en las sintéticas.
Grupo heterogéneo de enfermedades motoras no progresivas producidas por lesiones cerebrales crónicas que se originan en el período prenatal, perinatal, o en los primeros años de la vida. Los cuatro subtipos principales son espástica, atetoide, atáxica, y parálisis cerebral mixta, con formas espásticas que son las más comunes. El trastorno motor puede ir desde dificultades con el control motor fino a espasticidad severa (ver ESPASTICIDAD MUSCULAR) en las extremidades. La diplegia espástica (enfermedad de Little) es el subtipo más común, y se caracteriza por espasticidad que es más intensa en las piernas que en los brazos. Esta afección puede asociarse a la LEUCOMALACIA, PERIVENTRICULAR. (Traducción libre del original: Dev Med Child Neurol 1998 Aug;40(8):520-7)
Anomalías vasculares congénitas del encéfalo caracterizadas por una comunicación directa entre una arteria y una vena sin paso de la sangre a través de los CAPILARES. Las localizaciones y tamaño de las derivaciones determinan los síntomas, que incluyen CEFALEAS, CONVULSIONES, ACCIDENTE CEREBROVASCULAR, HEMORRAGIAS INTRACRANEALES, efecto de masa y efecto de robo vascular.
Defecto en la comprensión de las palabras habladas y de su significado, tanto habladas como escritas, y del significado que se genera por las relaciones gramaticales en las oraciones. Se origina por lesiones que afectan fundamentalmente al área de Wernicke, la cual se encuentra en la región perisilviana posterior del lóbulo temporal del hemisferio dominante.
Un grupo homólogo de INHIBIDORES DE CISTEINA PROTEINASA endógenos. Las cisteínas inhiben mucho las ENDOPEPTIDASAS DE CISTEINA tales como la PAPAINA, y otras peptidasas que tienen un grupo sulfhidrilo en el sitio activo.
Exceso de pérdida de sangre por sangramiento uterino asociado a TRABAJO DE PARTO o NACIMIENTO. Se define como pérdida de sangre mayor a 500 ml o una cantidad que afecta adversamente a la fisiología materna, como la PRESIÓN SANGUÍNEA y el HEMATÓCRITO. La hemorragia posparto se divide en dos categorías: inmediata (dentro de las primeras 24 horas del nacimiento) o retrasada (después de las 24 horas del posparto).
Desgarro o ruptura de un órgano, vaso u otra parte blanda del cuerpo, que ocurre en ausencia de una fuerza externa.
Episodios breves y reversibles de disfunción focal, no-convulsiva e isquémica del cerebro que tiene una duración menor de 24 horas, y usualmente menor de una hora, que se origina por oclusión o estenosis transitoria trombótica o embólica de los vasos sanguíneos. Los eventos pueden clasificarse por la distribución arterial, el patrón temporal, o la etiología (ejemplo, embólica vs. trombótica).
No puedo proporcionar una definición médica de 'Japón' ya que Japón no es un término médico, sino un país geográfico ubicado en Asia Oriental.
Incremento de los fluídos intra o extracelulares en el tejido encefálico. El edema encefálico citotóxico (hinchazón debido al incremento del líquido intracelular) indica un trastorno del metabolismo celular, y se asocia comúnmente con lesiones hipóxicas o isquémicas (ver HIPOXIA ENCEFÁLICA). El incremento del líquido extracelular puede ser producido por un incremento de la permeabilidad capilar encefálica (edema vasogénico), gradiente osmótico, bloqueo local en las vías de los líquidos intersticiales, o por obstrucción del flujo del LCR (es decir, HIDROCEFALIA obstructiva).
Elementos de intervalos de tiempo limitados, que contribuyen a resultados o situaciones particulares.
Sangrado en cualquier segmento del TRACTO GASTROINTESTINAL, desde el ESÓFAGO hasta el RECTO.
Muerte resultante de la presencia de una enfermedad en un individuo, tal y aparece en un reporte de un solo caso o un número limitado de pacientes. Debe diferenciarse de MUERTE, el cese fisiológico de la vida y de MORTALIDAD, un concepto epidemiológico o estadístico.
Especie de bacteria grampositiva del STREPTOCOCCUS MILLERI (GRUPO). Es la especie de este grupo que se aísla con más frecuencia. Es proclive a formar abscesos y se suele aislar de la sangre, el tubo digestivo y el aparato genitourinario.
Método no invasivo para demostrar la anatomía interna basado en el principio de que los núcleos atómicos bajo un campo magnético fuerte absorben pulsos de energía de radiofrecuencia y la emiten como radioondas que pueden reconstruirse en imágenes computarizadas. El concepto incluye las técnicas tomografía del spin del protón.
PRESIÓN SANGUÍNEA arterial sistémica persistentemente elevada. En base a múltiples lecturas (DETERMINACIÓN DE LA PRESIÓN SANGUÍNEA), habitualmente se considera hipertensión cuando la PRESIÓN SISTÓLICA es mucho mayor a 140 mm Hg o cuando la presión diastólica (PRESIÓN SANGUÍNEA) es de 90 mm Hg o mas.
Fibrinolisina o agentes que convierten el plasminógeno en FIBRINOLISINA.
Hemorragia en el CUERPO VÍTREO.
Hemorragia intraocular de los vasos de diversos tejidos del ojo.
Evaluación que se hace para medir los resultados o consecuencias del manejo y procedimientos utilizados en la lucha contra la enfermedad con el fin de determinar la eficacia, efectividad, seguridad y viabilidad de estas intervenciones en casos individuales o en series.
Enfermedad relativamente grave de corta duración.
Evaluación de las respuestas y reflejos sensoriales y motores que se utiliza para determinar el deterioro del sistema nervioso.
Síndrome asociado con daño de la médula espinal por encima del nivel torácico medio (ver LESIONES DE LA MÉDULA ESPINAL) caracterizado por un acusado aumento de la respuesta simpática a los estímulos pequeños, como son distensión vesical o rectal. Las manifestaciones incluyen HIPERTENSIÓN, TAQUICARDIA (o bradicardia refleja), FIEBRE, RUBEFACCIÓN facial, e HIPERHIDROSIS. La hipertensión extrema puede asociarse con un ACCIDENTE CEREBROVASCULAR. (Traducción libre del original: Adams et al., Principles of Neurology, 6th ed, pp538 and 1232; J Spinal Cord Med 1997;20(3):355-60)
NECROSIS que se produce en el sistema de distribución de la ARTERIA CEREBRAL MEDIA que lleva sangre a la totalidad de las caras laterales de cada uno de los HEMISFERIOS CEREBRALES. Los signos clínicos incluyen trastornos cognitivos, AFASIA, AGRAFIA, debilidad y entumecimiento en la cara y brazos, contralateralmente o bilateralmente dependiendo del infarto.
Oclusión no inflamatoria de carácter progresivo de las ARTERIAS CARÓTIDAS intracraneales y formación de arterias colaterales en forma de malla que se originan del POLÍGONO DE WILLIS. La angiografía cerebral muestra las colaterales en humo de cigarrillo (moyamoya) en la base del cráneo. Se caracteriza por HIPERPLASIA y FIBROSIS endoteliales con engrosamiento de las paredes arteriales. Esta enfermedad afecta principalmente a niños pero puede producirse también en adultos.
Constricción de las arterias del CRÁNEO debida a una contracción súbita, aguda y con frecuencia persistente del músculo liso de los vasos sanguíneos. El vasoespasmo intracraneal da lugar a una reducción de la luz vascular, restricción del flujo de sangre en el cerebro e ISQUEMIA ENCEFÁLICA que puede llevar a lesión cerebral hipóxica-isquémica (HIPOXIA-ISQUEMIA ENCEFÁLICA).
Venas que drenan el cerebro.
Aspecto del comportamiento personal o estilo de vida, exposición medioambiental, o característica innata o heredada que, basándose en la evidencia epidemiológica, se sabe que está asociada con alguna afectación relacionada con la salud, que interesa prevenir.
Estado caracterizado por somnolencia o coma en presencia de una infección aguda por PLASMODIUM FALCIPARUM (y raramente otras especies de Plasmodium). Las manifestaciones clínicas iniciales incluyen CEFALEA, CONVULSIONES y alteraciones mentales, seguidas por una rápida progresión al COMA. Las características patológicas incluyen capilares cerebrales llenos de eritrocitos con parásitos y múltiples focos pequeños de necrosis cortical y subcortical (Adaptación del original: Adams et al., Principles of Neurology, 6th ed, p136).
Péptidos generados de un PRECURSOR DE PEPTIDOS BETA AMILOIDES. Forma fibrilar amiloidea de estos péptidos es el principal componente de placas amiloideas encontradas en individuos con la enfermdad de Alzheimer y en individuos viejos con trisomía 21(SÍNDROME DE DOWN). El péptido se encuentra predominantemente en el sistema nerviosos, pero se ha descrito su presencia en tejido no nervioso.
Agentes que previenen la coagulación.
Uso de infusiones de AGENTES FIBRINOLÍTICOS para destruir o disolver los trombos en los vasos sanguíneos o en injertos.
Un subtipo de cistatina extracelular que es abundantemente expresada en los fluidos corporales. Puede desempeñar un rol en la inhibición de las PROTEASAS DE CISTEÍNA intersticiales.
Un complejo fibro-proteico que se compone de proteínas plegadas en una estructura foliar específica beta-plegada en cruz. Esta estructura fibrilar se ha encontrado como un modelo alternativo plegable para una variedad de proteínas funcionales. Los depósitos de amiloide en forma de PLACA AMILOIDE están asociados con una variedad de enfermedades degenerativas. La estructura amiloidea también se ha encontrado en un número de proteínas funcionales que no están relacionados con enfermedades.
Estudios en los cuales los datos pertenecen a hechos del pasado.
Estudios proyectados para la observación de hechos que todavia no ocurrieron.
PRESIÓN de la sangre sobre las ARTERIAS y otros VASOS SANGUÍNEOS.
Bloqueo de un vaso sanguíneo del CRÁNEO por un ÉMBOLO que puede ser un coágulo de sangre (TROMBO) u otro material no disuelto en el torrente circulatorio. La mayoría de los émbolos se originan en el corazón y se asocian con ENFERMEDADES CARDIACAS. Otros orígenes no cardiacos de émbolos suelen asociarse con ENFERMEDADES VASCULARES.
Cavidades en número de cuatro que se comunican y que se encuentran en el interior de la masa del encéfalo: los ventrículos laterales derecho e izquierdo, el tercer ventrículo (III) y el cuarto ventrículo (IV). Todos ellos contienen líquido cefalorraquídeo y un plexo coroideo que lo produce. (NETTER, F.H. Sistema Nervioso. Anatomía y Fisiología. Barcelona, Salvat, 1991, p. 30)
Enfermedad degenerativa del CEREBRO que se caracteriza por el comienzo insidioso de DEMENCIA. Se dan alteraciones de la MEMORIA y del juicio, falta de atención y problemas en el desempeño de habilidades, seguido por APRAXIAS severas y pérdida global de las capacidades cognitivas. Ocurre sobre todo después de los 60 años de edad y se caracteriza patologicamente por una atrofia cortical severa y por la triada conformada por PLACA AMILOIDE, OVILLOS NEUROFIBRILARES y HILOS DEL NEURÓPILO. (Traducción libre del original: Adams et al., Principles of Neurology, 6th ed, pp1049-57).
Hemorragia en el interior de las regiones subcorticales de los hemisferios cerebrales (GANGLIOS BASALES). Se asocia con frecuencia con HIPERTENSIÓN o MALFORMACIONES ARTERIOVENOSAS. Las manifestaciones clínicas pueden incluir CEFALEA, DISCINESIAS y HEMIPARESIA.
Enfermedades animales que se producen de manera natural o son inducidas experimentalmente, con procesos patológicos bastante similares a los de las enfermedades humanas. Se utilizan como modelos para el estudio de las enfermedades humanas.
Estudios en los que individuos o poblaciones son seguidos para evaluar el resultado de exposiciones, procedimientos, o los efectos de una característica, por ejemplo, la aparición de una enfermedad.
Número de casos nuevos de enfermedades, o de personas enfermas, durante determinado período en una población específica. É também usado para el índice en que nuevos eventos ocurren en una población específica.
Proteína de membrana de tipo I de un solo paso. Se escinde por las SECRETASAS DE LA PROTEÍNA PRECURSORA DEL AMILOIDE para producir péptidos de diferentes longitudes de aminoácidos. Los PÉPTIDOS BETA-AMILOIDES, compuestos de 39 a 42 aminoácidos, son un componente principal del amiloide extracelular en PLACAS SENILES.
Hemorragia que sigue a cualquier procedimiento quirúrgico. Puede ser inmediata o tardía y no se restringe a la herida quirúrgica.
Lactante durante el primer mes después del nacimiento.
Edad como un componente o influencia que contribuye a la producción de un resultado. Puede ser aplicable a causa o efecto de una circunstancia. Es usado con los conceptos humano o animal pero deben ser diferenciados de ENVEJECIMIENTO, un proceso fisiológico, y FACTORES DE TIEMPO que si refiere solamente al transcurso del tiempo.
Regreso de un signo, síntoma o enfermedad luego de una remisión.
La probabilidad de que un evento ocorrirá. El abarca una variedad de medidas de probabilidad de un resultado generalmente no favorable (MeSH/NLM). Número esperado de pérdidas humanas, personas heridas, propiedad dañada e interrupción de actividades económicas debido a fenómenos naturales particulares y por consiguiente, el producto de riesgos específicos y elementos de riesgo (Material II - IDNDR, 1992)
Procesos patológicos que afectan a los pacientes después de un procedimiento quirúrgico. Pueden o no estar relacionados a la enfermedad por la cual se realiza la cirugía y pueden o no ser el resultado directo de la cirugía.
Desgarro o estallido de la pared debilitada de un saco aneurismático, que suele acompañarse de súbito e intensísimo dolor. El mayor riesgo de la rotura de un aneurisma es la gran cantidad de sangre que se vierte en los tejidos y cavidades vecinas, lo que causa SHOCK HEMORRÁGICO.
Arteria formada por la unión de las arterias vertebrales derecha e izquierda; va desde el borde inferior hasta el superior del puente,donde se bifurca en las dos arterias cerebrales posteriores.
Hemorragia de los vasos de la coroides.
Sangramiento provieniente de una ULCERA PEPTICA podiendo estar localizada en cualquier segmento del TRACTO GASTROINTESTINAL.
Presión dentro de la cavidad craneana. Esta influenciada por la masa cerebral, el sistema circulatorio, la dinámica del LCR y la rigidez del cráneo.
Arteria formada por la bifurcación de la arteria carótida interna (ARTERIA CARÓTIDA, INTERNA). Ramas de la arteria cerebral anterior irrigan al NÚCLEO CAUDADO, CÁPSULA INTERNA, PUTAMEN, NÚCLEO SEPTAL, GIRO CINGULI, y las superficies del LÓBULO FRONTAL y PARIETAL.
Predicción de las probables consecuencias de una enfermedad que se basa en las condiciones individuales y en el curso usual de la enfermedad que ha sido visto previamente en situaciones similares.
Arteria formada por la bifurcación de la ARTERIA BASILAR. Las ramas de la arteria cerebral posterior irrigan porciones del LÓBULO OCCIPITAL, LÓBULO PARIETAL, del giro temporal inferior, tronco cerebral, y del PLEXO COROIDE.
Usado cuando el sexo es discutido como un factor en relación a algún asunto o problema específico.
Sangrado intracraneal en el interior del PUTAMEN, un núcleo de los GANGLIOS BASALES. Se asocia con HIPERTENSIÓN y lipohialinosis de los vasos sanguíneos de pequeño tamaño del putamen. Las manifestaciones clínicas varían según el tamaño de la hemorragia, pero incluyen HEMIPARESIA, CEFALEA y alteraciones de la conciencia.
Afecciones que acometen al ENCÉFALO, que está compuesto por los componentes intracraneales del SISTEMA NERVIOSO CENTRAL. Este incluye (pero no está limitado a) la CORTEZA CEREBRAL; sustancia blanca intracraneal; GANGLIOS BASALES; TÁLAMO; HIPOTÁLAMO; TRONCO ENCEFÁLICO; y CEREBELO.
Cualquier cambio detectable y heredable en el material genético que cause un cambio en el GENOTIPO y que se transmite a las células hijas y a las generaciones sucesivas.
Acumulación excesiva de líquido cefalorraquídeo dentro del cráneo el cual puede asociarse a dilatación de los ventrículos cerebrales, HIPERTENSIÓN INTRACRANEAL; CEFALEA; letargia; INCONTINENCIA URINARIA; y ATAXIA.
Valor igual al volumen total del flujo dividido por el área de sección del lecho vascular.
Acumulación de sangre en el ESPACIO SUBDURAL entre la DURAMADRE y la capa aracnoidea de las MENINGES. Esta afección se produce principalmente sobre la superficie de un HEMISFERIOR CEREBRAL, pero puede desarrollarse en el conducto raquídeo (HEMATOMA SUBDURAL RAQUÍDEO). Puede clasificarse el hematoma subdural de forma aguda y de forma crónica, con un comienzo de síntomas inmediato o tardío, respectivamente. Los síntomas pueden incluir pérdida de conciencia, CEFALEA intensa y deterioro del estado mental.
Hemorragia dentro de la cavidad orbital, posterior al globo ocular.
Revascularizaicón microquirúrgica para mejorar la circulación intracraniana. Generalmente implica la unión de la circulación extracraniana a la circulación intracraniana, pero puede incluir la revascularización extracraniana (ejemplo: la derivación de la arteria subclavia-vertebral, derivación de la arteria subclavia-carótida externa). Se realiza mediante la unión de dos arterias (por anastomosis directa o por implante) o por implantación autóloga libre de tejido altamente vascularizado en la superficie del cerebro.
Volumen de la SANGRE circulante. Es la suma del VOLUMEN PLASMÁTICO y el VOLUMEN DE ERITROCITOS.
Método de hemostasia que utiliza diversos agentes como bolitas plásticas o de vidrio, Gel de espuma, silásticas, metálicas, coágulos autólogos, de grasa y músculo como émbolos. Se han utilizado en el tratamiento de MALFORMACIONES ARTERIOVENOSAS INTRACRANEALES y de la médula espinal, fístula arteriovenosa renal, sangramiento gastrointestinal, epístaxis, hiperesplenismo, ciertos tumores muy vascularizados, ruptura traumática de vasos sanguíneos, y en el control de hemorragias en las operaciones.
Cualquier operación sobre el cráneo; incisión de cráneo. (Dorland, 28a ed)
Radiografía del sistema ventricular del cerebro luego de la inyección de aire o de otro medio de contraste directamente en los ventrículos cerebrales. Se utiliza también para tomografía computarizada por rayos x de los ventrículos cerebrales.
Dominancia de un hemisferio cerebral sobre otro en las funciones cerebrales.
Hemorragia en el interior del encéfalo como consecuencia de un TRAUMATISMO CRANEOENCEFÁLICO abierto o cerrado. Las hemorragias traumáticas pueden producirse en algunas áreas del encéfalo, como los HEMISFERIOS CEREBRALES, TRONCO ENCEFÁLICO (ver HEMORRAGIA TRAUMÁTICA DEL TRONCO ENCEFÁLICO) y CEREBELO.
Hemorragia aguda o pérdida excesiva de líquidos resultando en HIPOVOLEMIA.
Cepa de ratas albinas utilizadas ampliamente para fines experimentales debido a que son tranquilas y fáciles de manipular. Fue desarrollada por la Compañía Sprague-Dawley Animal.
Fármacos que se utilizan para impedir que se produzcan lesiones encefálicas o medulares por isquemia, accidentes cerebrovasculares, convulsiones, o traumatismos. Algunos deben administrarse antes de que se produzca el acontecimiento, pero otros pueden ser efectivos por algún tiempo después. Actúan mediante diversos mecanismos, pero a menudo, de forma directa o indirecta, minimizan el daño producido por los aminoácidos excitatodores endógenos.
Formación o presencia de un coágulo de sangre (TROMBO) en un vaso sanguíneo en el interior del CRÁNEO. La trombosis intracraneal puede llevar a oclusiones trombóticas e INFARTO ENCEFÁLICO. La mayoría de las oclusiones trombóticas se asocian con ATEROSCLEROSIS.
Derivado de TELENCÉFALO, el cerebro se compone de un hemisferio derecho e izquierdo. Cada uno contiene una corteza cerebral externa y un ganglio basal subcortical. El cerebro incluye todas las partes dentro del cráneo excepto la MÉDULA OBLONGATA, el PONS y el CEREBELO. Las funciones cerebrales incluyen actividades sensoriomotoras, emocionales, e intelectuales.
CÉLULAS ENDOTELIALES especializadas, no fenestradas y con UNIONES ESTRECHAS que forman una barrera al transporte para ciertas sustancias entre los capilares cerebrales y el tejido del ENCÉFALO.
Presión elevada dentro de la cavidad craneana. Esta puede producirse por varias afecciones, entre las que se incluyen HIDROCEFALIA; EDEMA CEREBRAL; tumores intracraneales; HIPERTENSIÓN sistémica severa; PSEUDOTUMOR CEREBRAL; y otros trastornos.
Reducción del suministro de oxígeno al encéfalo debido a ANOXEMIA (menor cantidad de oxígeno transportado por la HEMOGLOBINA de la sangre), o a una restricción de la circulación de sangre al encéfalo, o ambos. El concepto de hipoxia grave hace referencia a la anoxia, y es una causa relativamente frecuente de lesión en el sistema nervioso central. Una anoxia cerebral prolongada puede llevar a MUERTE CEREBRAL o a un ESTADO VEGETATIVO PERSISTENTE. Histológicamente, esta afección se caracteriza por pérdida neuronal, más prominente en el HIPOCAMPO, GLOBO PÁLIDO, CEREBELO y olivas inferiores.
Escala que evalúa la respuesta a estímulos en pacientes con lesiones cráneocerebrales. Los parámetros son la apertura de los ojos, la respuesta motora y la respuesta verbal.
Método no invasivo de imágenes y determinación de la anatomía interna vascular sin que se inyecte medio de contraste o sin que haya exposición a radiaciones. La técnica se utiliza especialmente en la ANGIOGRAFÍA CEREBRAL al igual que para estudios de otras estructuras vasculares.

La hemorragia cerebral, también conocida como hemorragia intracraneal, es un tipo de accidente cerebrovascular que ocurre cuando se rompe un vaso sanguíneo en el cerebro y causa sangrado en los tejidos circundantes. Esto puede comprimir el tejido cerebral cercano, interrumpiendo su funcionamiento normal y dañándolo.

Hay diferentes tipos de hemorragia cerebral, dependiendo de dónde ocurre el sangrado:

1. Hemorragia intraparenquimatosa: Se produce cuando el sangrado se origina dentro del tejido cerebral mismo.
2. Hemorragia subaracnoidea: Ocurre cuando el sangrado se produce entre las membranas que rodean el cerebro, llamadas meninges, en un espacio conocido como el espacio subaracnoideo.
3. Hemorragia epidural: Se refiere al sangrado que ocurre entre el cráneo y la duramadre, la membrana exterior más dura que rodea el cerebro.
4. Hemorragia subdural: Sucede cuando el sangrado se produce entre la duramadre y la siguiente membrana más interna, llamada aracnoides.

Los síntomas de una hemorragia cerebral pueden variar dependiendo del tipo y la gravedad del sangrado, pero generalmente incluyen dolor de cabeza intenso, convulsiones, debilidad o entumecimiento en un lado del cuerpo, dificultad para hablar o comprender el lenguaje, problemas de visión, pérdida del equilibrio o coordinación, y cambios en el nivel de conciencia o alerta.

El tratamiento de una hemorragia cerebral dependerá de la causa subyacente y puede incluir cirugía para aliviar la presión sobre el tejido cerebral, medicamentos para controlar los síntomas y prevenir complicaciones, rehabilitación para ayudar a recuperar las funciones perdidas, o una combinación de estas opciones.

La hemorragia subaracnoidea (HSA) es un tipo específico de hemorragia intracraneal donde se produce un sangrado en el espacio subaracnoideo, que es el espacio entre las membranas que rodean al cerebro. Este espacio está lleno de líquido cefalorraquídeo (LCR) y normalmente proporciona protección al cerebro.

La causa más común de una HSA es la rotura de un aneurisma cerebral, una dilatación localizada y debilitada en una arteria cerebral. Otras causas menos frecuentes pueden incluir traumatismos craneales graves, malformaciones vasculares, tumores cerebrales o infecciones.

Los síntomas más comunes de una HSA incluyen dolor de cabeza intenso y repentino (conocido como "el peor dolor de cabeza de mi vida"), rigidez en el cuello, vómitos, alteraciones visuales, sensibilidad a la luz, convulsiones, confusión, somnolencia o coma. La HSA es una condición médica grave y potencialmente letal que requiere atención inmediiata y tratamiento en un centro médico especializado. El tratamiento puede incluir cirugía para reparar el aneurisma roto, control de la presión intracraneal, manejo de las convulsiones y prevención de complicaciones como la hidrocefalia o el vasoespasmo cerebral.

Un infarto cerebral, también conocido como un accidente cerebrovascular isquémico, se produce cuando hay una interrupción del suministro de sangre al cerebro, lo que resulta en la muerte de las células cerebrales. Esto generalmente es causado por un coágulo sanguíneo que bloquea una arteria que suministra sangre al cerebro. La falta de oxígeno y nutrientes a las células cerebrales hace que estas mueran, lo que puede dar lugar a déficits neurológicos permanentes. Los síntomas de un infarto cerebral pueden incluir debilidad o parálisis repentina en la cara, brazo o pierna, especialmente en una mitad del cuerpo; dificultad para hablar o comprender el lenguaje; visión doble o pérdida de visión en un ojo; dolor de cabeza intenso y repentino sin causa conocida; mareos o pérdida del equilibrio. Los factores de riesgo para un infarto cerebral incluyen la edad avanzada, presión arterial alta, tabaquismo, diabetes, colesterol alto, obesidad y enfermedades cardiovasculares.

La hemorragia, en términos médicos, se refiere a la pérdida o escape de sangre fuera de los vasos sanguíneos debido a una lesión, rotura o malformación. Puede clasificarse en varios tipos según su localización anatómica:

1. Hemorragia externa: Es la salida de sangre al exterior del cuerpo, visible y fácilmente perceptible. Por ejemplo, una herida cortante que provoca un flujo sanguíneo continuo.

2. Hemorragia interna: Ocurre cuando la sangre se acumula en los órganos o cavidades corporales internas sin salir al exterior. Puede ser oculta y difícil de detectar, a menos que cause síntomas como dolor abdominal severo, hinchazón o shock hipovolémico (disminución del volumen sanguíneo circulante).

Además, la hemorragia también se puede clasificar según su gravedad y velocidad de progresión:

1. Hemorragia leve: Se caracteriza por una pérdida de sangre pequeña que generalmente no representa un riesgo inmediato para la vida del paciente.

2. Hemorragia moderada: Implica una pérdida de sangre significativa que puede provocar anemia y desequilibrios electrolíticos, pero suele ser controlable con tratamiento médico adecuado.

3. Hemorragia grave o masiva: Se refiere a una pérdida de sangre rápida y abundante que puede poner en peligro la vida del paciente si no se trata urgentemente. Puede causar hipovolemia (disminución del volumen sanguíneo), hipotensión (presión arterial baja), shock y, finalmente, fallo orgánico múltiple.

En definitiva, la hemorragia es una afección médica que requiere atención inmediata, especialmente si se trata de una hemorragia grave o masiva. El tratamiento puede incluir medidas de control del sangrado, reposición de líquidos y sangre, y, en algunos casos, cirugía para reparar lesiones vasculares o internas.

Las arterias cerebrales se refieren a un grupo de vasos sanguíneos que suministran sangre oxigenada al cerebro. Hay dos grupos principales de arterias cerebrales: las arterias cerebrales anteriores, medias y posteriores, que se originan en la arteria carótida interna, y las arterias vertebrales y basilar, que se unen para formar la arteria cerebral posterior.

Estas arterias se dividen en ramas más pequeñas que suministran sangre a diferentes partes del cerebro, incluyendo el córtex cerebral, el tálamo, el hipocampo y el cerebelo. La disfunción o daño en estas arterias puede resultar en una variedad de condiciones neurológicas, como accidente cerebrovascular, aneurismas y demencia vascular.

Es importante mantener la salud de las arterias cerebrales a través de hábitos de vida saludables, como una dieta equilibrada, ejercicio regular y el control de factores de riesgo cardiovascular, como la hipertensión arterial y la diabetes.

La angiopatía amiloide cerebral es una afección en la cual se acumulan depósitos anormales de proteínas llamadas betapleiscina o amiloide en los vasos sanguíneos del cerebro. Esta acumulación puede dañar los vasos sanguíneos y provocar hemorragias cerebrales, especialmente en personas mayores de 60 años. La angiopatía amiloide cerebral a menudo no presenta síntomas y se descubre durante estudios de imágenes cerebrales realizados por otras razones.

En algunos casos, la angiopatía amiloide cerebral puede causar problemas cognitivos, demencia o convulsiones. También se asocia con un tipo raro pero grave de hemorragia intracerebral llamada hemorragia lobular no traumática (HLNT). El riesgo de HLNT aumenta con la edad y es más común en personas mayores de 80 años.

No existe un tratamiento específico para la angiopatía amiloide cerebral, pero se pueden tratar los síntomas y las complicaciones asociadas con la afección. La investigación está en curso para encontrar formas de prevenir o revertir la acumulación de proteínas anormales en el cerebro.

Los trastornos cerebrovasculares se refieren a un grupo de condiciones que afectan el suministro de sangre al cerebro. Estos trastornos incluyen una variedad de enfermedades y afecciones, como accidentes cerebrovasculares (ictus), ataques isquémicos transitorios (AIT), aneurismas cerebrales, insuficiencia vascular cerebral y demencia vascular.

El término médico más preciso para esta categoría de condiciones es enfermedades cerebrovasculares (ECV). La ECV se produce cuando el flujo sanguíneo al cerebro se ve afectado, lo que puede resultar en daño celular y tejido cerebral. Esto puede ocurrir como resultado de una obstrucción arterial (como en un accidente cerebrovascular isquémico), ruptura de vasos sanguíneos (como en un accidente cerebrovascular hemorrágico) o una combinación de ambos.

Los síntomas de los trastornos cerebrovasculares pueden variar ampliamente, dependiendo de la gravedad del daño al cerebro y la ubicación específica donde ocurre el problema. Algunos síntomas comunes incluyen debilidad o parálisis repentina en la cara, brazo o pierna, dificultad para hablar o comprender el lenguaje, problemas de visión, dolor de cabeza intenso y repentino, mareos o pérdida del equilibrio.

El tratamiento de los trastornos cerebrovasculares dependerá del tipo y gravedad de la afección. Puede incluir medicamentos para disolver coágulos sanguíneos, cirugía para reparar vasos sanguíneos dañados o aneurismas, y terapias de rehabilitación para ayudar a las personas a recuperar habilidades perdidas. La prevención es clave en la reducción del riesgo de trastornos cerebrovasculares, lo que incluye controlar los factores de riesgo como la hipertensión arterial, el colesterol alto, la diabetes, el tabaquismo y la obesidad.

Las hemorragias intracraneales se refieren a los sangrados que ocurren dentro del cráneo. Estos sangrados pueden producirse en el espacio entre el cerebro y el cráneo (hemorragia subdural), en el espacio entre las membranas que rodean al cerebro (hemorragia epidural), o directamente dentro del tejido cerebral (hemorragia intraparenquimatosa).

La causa más común de estas hemorragias es la rotura de vasos sanguíneos debido a un traumatismo craneal. Sin embargo, también pueden ser causadas por diversas condiciones médicas, como hipertensión arterial no controlada, aneurismas cerebrales, malformaciones vasculares, tumores cerebrales o trastornos de coagulación sanguínea.

Los síntomas pueden variar dependiendo del tipo y la ubicación de la hemorragia, pero generalmente incluyen dolor de cabeza intenso, vómitos, convulsiones, debilidad o entumecimiento en un lado del cuerpo, problemas de visión, dificultad para hablar o tragar, y cambios en el nivel de conciencia o comportamiento.

El tratamiento depende de la causa subyacente y puede incluir cirugía, medicamentos para controlar la presión intracraneal y prevenir convulsiones, y rehabilitación para ayudar a recuperar las funciones perdidas.

La hemorragia intracraneal hipertensiva, también conocida como hemorragia intraparenquimatosa hipertensiva, es un tipo específico de hemorragia cerebral que ocurre en individuos con antecedentes de hipertensión arterial no controlada. Se caracteriza por la ruptura de pequeños vasos sanguíneos (arteriolas y capilares) dentro del tejido cerebral, lo que resulta en la acumulación de sangre en el espacio intraparenquimatoso o dentro del propio tejido cerebral.

Este tipo de hemorragia suele presentarse en forma de pequeñas hemorragias múltiples, llamadas microhemorragias, o como una única lesión más grande. Las áreas afectadas con mayor frecuencia son los ganglios basales, el tronco cerebral y la región subcortical profunda del cerebro.

La hemorragia intracraneal hipertensiva puede causar diversos síntomas clínicos, como dolor de cabeza intenso, vómitos, alteraciones visuales, déficits neurológicos focales (como debilidad o entumecimiento en un lado del cuerpo) y cambios en el nivel de conciencia o confusión. En casos graves, puede llevar a edema cerebral, herniación cerebral e incluso la muerte.

El diagnóstico se realiza mediante estudios de neuroimagen, como tomografía computarizada (TC) o resonancia magnética (RM), que muestran las lesiones hemorrágicas dentro del tejido cerebral. El tratamiento inicial consiste en controlar la presión intracraneal y la hipertensión arterial, seguido de medidas para prevenir complicaciones y reducir el riesgo de recurrencia, como el control estricto de la presión arterial y la administración de antiagregantes o anticoagulantes en función de los factores de riesgo individuales.

La fragilidad capilar, en términos médicos, se refiere a un estado o condición en la que los vasos sanguíneos pequeños (capilares) se vuelven extremadamente frágiles y propensos a romperse. Esta afección puede ser consecuencia de diversos factores, como trastornos genéticos, envejecimiento, exposición a ciertos productos químicos o medicamentos, radiación, deficiencias nutricionales (especialmente falta de vitamina C), y algunas enfermedades como la anemia severa.

La fragilidad capilar puede manifestarse en forma de hematomas o moretones fáciles e inexplicables, sangrado nasal frecuente, petequias (pequeñas manchas rojas causadas por hemorragias debajo de la piel), y telangiectasia (dilatación permanente de los pequeños vasos sanguíneos, formando redes visibles en la piel).

Es importante mencionar que si una persona experimenta síntomas graves o persistentes relacionados con fragilidad capilar, se recomienda buscar atención médica para determinar la causa subyacente y recibir un tratamiento adecuado.

La angiografía cerebral es un procedimiento diagnóstico que utiliza rayos X y una sustancia de contraste para producir imágenes detalladas de los vasos sanguíneos en el cerebro. Durante el procedimiento, un agente de contraste se inyecta en la arteria principal del cuello, lo que permite que los vasos sanguíneos del cerebro se visualicen claramente en las radiografías.

Este procedimiento se utiliza a menudo para identificar anomalías en los vasos sanguíneos del cerebro, como aneurismas, estenosis (estrechamiento), oclusión (obstrucción) y malformaciones vasculares. También se puede usar para planificar tratamientos endovasculares, como la colocación de stents o la embolización de aneurismas.

La angiografía cerebral generalmente se realiza en un hospital o centro médico especializado y requiere la administración de anestesia local. Después del procedimiento, es posible que sea necesario permanecer en observación durante unas horas para asegurarse de que no haya complicaciones. Las complicaciones graves son poco frecuentes pero pueden incluir reacciones al agente de contraste, sangrado excesivo, infección o daño a los vasos sanguíneos.

La angiopatía amiloide cerebral familiar (FACT, por sus siglas en inglés) es una afección neurológica rara y hereditaria que se caracteriza por la acumulación anormal de una proteína anormal llamada "amiloide" en los vasos sanguíneos cerebrales. Esta proteína se deposita en las paredes de los vasos sanguíneos, lo que puede causar su endurecimiento y estrechamiento (esto es, una condición conocida como "estenosis"), así como el sangrado y la ruptura de los vasos sanguíneos.

La FACT es causada por mutaciones en genes específicos que son responsables de producir proteínas anormales que se acumulan en el cerebro. Existen varios tipos diferentes de FACT, cada uno asociado con una mutación genética distinta. Los síntomas de la FACT pueden variar ampliamente, dependiendo del tipo y la gravedad de la afección.

Los síntomas más comunes de la FACT incluyen dolores de cabeza, convulsiones, problemas de visión, trastornos del habla y del lenguaje, deterioro cognitivo y demencia. La enfermedad suele manifestarse en la edad adulta y puede empeorar progresivamente con el tiempo. El diagnóstico de FACT se realiza mediante una combinación de estudios de imagen cerebral, análisis genéticos y pruebas neurológicas.

No existe cura conocida para la FACT, y el tratamiento suele estar dirigido a aliviar los síntomas y prevenir complicaciones. Los medicamentos antiepilépticos pueden utilizarse para controlar las convulsiones, mientras que los analgésicos pueden ayudar a aliviar los dolores de cabeza. En algunos casos, la cirugía puede ser necesaria para tratar el sangrado cerebral o la hemorragia subaracnoidea. La fisioterapia y la terapia del habla también pueden ser útiles para ayudar a los pacientes a mantener su nivel de funcionamiento y mejorar su calidad de vida.

La arteria cerebral media es una arteria grande y importante en el cerebro que se origina en la porción interior de la carótida interna. Es responsable de suministrar sangre oxigenada a gran parte del cerebro, incluyendo los lóbulos frontales, temporales y parietales, así como partes del lóbal occipital. También suministra sangre a estructuras profundas en el cerebro, como el cuerpo calloso, el tálamo y el hipocampo. La arteria cerebral media se divide en varias ramas que proporcionan irrigación sanguínea a diferentes partes del cerebro. La obstrucción o el daño de esta arteria pueden causar accidentes cerebrovasculares y otros trastornos neurológicos graves.

La circulación cerebrovascular se refiere al sistema de vasos sanguíneos que abastecen de sangre al cerebro. Está compuesto por arterias, venas y capilares que transportan oxígeno, nutrientes y otras sustancias esenciales a las células cerebrales y eliminan los desechos metabólicos.

Las principales arterias que irrigan el cerebro son las arterias carótidas internas y las vertebrales, que se unen para formar la circulación posterior o basilar. Estas arterias se dividen en ramas más pequeñas que suministran sangre a diferentes regiones del cerebro.

La interrupción del flujo sanguíneo cerebral puede causar daño celular y conducir a una variedad de trastornos neurológicos, como accidente cerebrovascular o ataque isquémico transitorio (AIT). Por lo tanto, la circulación cerebrovascular es fundamental para el mantenimiento de las funciones cerebrales normales y la salud general del cuerpo.

El encéfalo, en términos médicos, se refiere a la estructura más grande y complexa del sistema nervioso central. Consiste en el cerebro, el cerebelo y el tronco del encéfalo. El encéfalo es responsable de procesar las señales nerviosas, controlar las funciones vitales como la respiración y el latido del corazón, y gestionar las respuestas emocionales, el pensamiento, la memoria y el aprendizaje. Está protegido por el cráneo y recubierto por tres membranas llamadas meninges. El encéfalo está compuesto por billones de neuronas interconectadas y células gliales, que together forman los tejidos grises y blancos del encéfalo. La sangre suministra oxígeno y nutrientes a través de una red de vasos sanguíneos intrincados. Cualquier daño o trastorno en el encéfalo puede afectar significativamente la salud y el bienestar general de un individuo.

La tomografía computarizada por rayos X, también conocida como TC o CAT (por sus siglas en inglés: Computerized Axial Tomography), es una técnica de diagnóstico por imágenes que utiliza radiación para obtener detalladas vistas tridimensionales de las estructuras internas del cuerpo. Durante el procedimiento, el paciente se coloca sobre una mesa que se desliza dentro de un anillo hueco (túnel) donde se encuentran los emisores y receptores de rayos X. El equipo gira alrededor del paciente, tomando varias radiografías en diferentes ángulos.

Las imágenes obtenidas son procesadas por un ordenador, el cual las combina para crear "rebanadas" transversales del cuerpo, mostrando secciones del tejido blando, huesos y vasos sanguíneos en diferentes grados de claridad. Estas imágenes pueden ser visualizadas como rebanadas individuales o combinadas para formar una representación tridimensional completa del área escaneada.

La TC es particularmente útil para detectar tumores, sangrado interno, fracturas y otras lesiones; así como también para guiar procedimientos quirúrgicos o biopsias. Sin embargo, su uso está limitado en pacientes embarazadas debido al potencial riesgo de daño fetal asociado con la exposición a la radiación.

La amiloidosis es una enfermedad rara pero grave que ocurre cuando se acumulan proteínas anormales llamadas amiloide en diferentes órganos y tejidos del cuerpo. Estas proteínas se pliegan incorrectamente y forman fibrillas, lo que lleva a la formación de depósitos de amiloide.

Existen varios tipos de amiloidosis, cada uno causado por un tipo diferente de proteína amiloide. Los más comunes son:

1. Amiloidosis AL (inmunoglobulina ligada a la leve): Esta forma es causada por la producción excesiva de una proteína inmunoglobulina anormal por células plasmáticas malignas o benignas en la médula ósea.
2. Amiloidosis AA (proteína serica asociada a la amiloidosis secundaria): Esta forma es causada por una respuesta inflamatoria crónica, como la que se observa en enfermedades como la artritis reumatoide o la tuberculosis.
3. Amiloidosis ATTR (transtirretina relacionada con la amiloidosis hereditaria y senil): Esta forma es causada por mutaciones genéticas en el gen de la transtirretina, una proteína producida principalmente en el hígado.

Los síntomas y signos de la amiloidosis dependen del tipo y del órgano o tejido afectados. Los depósitos de amiloide pueden dañar los órganos y tejidos, lo que lleva a disfunción orgánica e insuficiencia orgánica progresiva. Las manifestaciones clínicas comunes incluyen:

- Insuficiencia cardíaca congestiva
- Arritmias cardíacas
- Neuropatía periférica (entumecimiento, hormigueo y debilidad en las extremidades)
- Hiperplasia de la lengua
- Síndrome del túnel carpiano
- Insuficiencia renal
- Disfunción hepática
- Infiltración vascular (pérdida de la visión, piel engrosada y frágil)

El diagnóstico de la amiloidosis se realiza mediante una biopsia del tejido afectado, seguida de un examen histopatológico para confirmar la presencia de depósitos de amiloide. Se pueden utilizar tinciones especiales, como la tinción de rojo congo, y técnicas inmunohistoquímicas o inmunofluorescencia para identificar el tipo de proteína de amiloide presente.

El tratamiento de la amiloidosis depende del tipo y del grado de afectación orgánica. El objetivo principal es eliminar o reducir la producción de la proteína precursora de amiloide y estabilizar o reemplazar los órganos afectados. Los tratamientos disponibles incluyen:

- Quimioterapia con agentes alquilantes, como melphalan, y esteroides
- Terapias dirigidas contra la proteína precursora de amiloide, como bortezomib o lenalidomida
- Trasplante de células madre autólogo o alogénico
- Diálisis o trasplante renal en casos de insuficiencia renal grave
- Trasplante hepático en casos de infiltración vascular grave
- Terapias de soporte, como la administración de fluidos y el control de los síntomas

La supervivencia varía según el tipo y el grado de afectación orgánica. Los pacientes con amiloidosis AL tienen una supervivencia media de 1 a 2 años, mientras que aquellos con amiloidosis AA o TTR tienen una supervivencia media de 5 a 10 años. El pronóstico ha mejorado en los últimos años gracias al desarrollo de nuevas terapias dirigidas contra la proteína precursora de amiloide y al trasplante de células madre.

La isquemia encefálica se refiere a la restricción del flujo sanguíneo al cerebro, lo que resulta en un suministro inadecuado de oxígeno y nutrientes. Esta condición puede causar daño celular y disfunción en las áreas afectadas del cerebro. La isquemia encefálica puede ser transitoria o permanente, dependiendo de la duración e intensidad de la interrupción del flujo sanguíneo. Puede conducir a diversos síntomas neurológicos, como debilidad o parálisis en un lado del cuerpo, dificultad para hablar o comprender el lenguaje, pérdida de visión en parte del campo visual, mareos, confusión y, en casos graves, coma o muerte. La isquemia encefálica puede ser causada por diversas afecciones, como la enfermedad arterial coronaria, la fibrilación auricular, la embolia, la trombosis y la estenosis de las arterias carótidas o vertebrales. El tratamiento temprano es crucial para prevenir daños graves al cerebro.

Embolia intracraneal: La embolia intracraneal es una afección médica grave en la que un coágulo de sangre o material trombótico (un émbolo) se desprende y viaja a través del torrente sanguíneo hasta los vasos sanguíneos cerebrales, bloqueándolos. Esto puede provocar una interrupción repentina y grave del flujo sanguíneo al cerebro, lo que lleva a la isquemia (falta de oxígeno) y potencialmente a la muerte de las células cerebrales. Los síntomas pueden incluir debilidad o parálisis repentina en una parte del cuerpo, pérdida de equilibrio, dificultad para hablar o comprender el lenguaje, cambios en la visión, dolor de cabeza intenso y repentino, mareos, convulsiones e incluso coma. Las causas más comunes de émbolos cerebrales son coágulos de sangre provenientes del corazón (como en la fibrilación auricular o después de un ataque cardíaco), grandes vasos sanguíneos extracraneales o procedimientos médicos invasivos.

Trombosis intracraneal: La trombosis intracraneal es una afección en la que se forma un coágulo de sangre (trombo) dentro de los vasos sanguíneos cerebrales, lo que lleva a la obstrucción del flujo sanguíneo y la isquemia subsiguiente del tejido cerebral. La formación de trombos en el cerebro puede deberse a diversas causas, como ateroesclerosis (endurecimiento y engrosamiento de las paredes arteriales), fibrilación auricular, lesiones cerebrales, infecciones, cáncer o uso de catéteres intravasculares. Los síntomas de la trombosis intracraneal pueden ser similares a los de un émbolo cerebral y dependen de la ubicación y el tamaño del trombo. Pueden incluir debilidad o entumecimiento en un lado del cuerpo, dificultad para hablar o comprender el lenguaje, visión doble o borrosa, dolor de cabeza intenso, mareos y convulsiones. En casos graves, la trombosis intracraneal puede causar accidentes cerebrovasculares isquémicos e incluso la muerte si no se trata a tiempo.

Un accidente cerebrovascular, también conocido como stroke, es una emergencia médica que ocurre cuando el flujo sanguíneo a una parte del cerebro se interrumpe o se reduce, lo que puede dañar o destruir las células cerebrales. Esto puede suceder debido a un coágulo sanguíneo que bloquea una arteria (accidente cerebrovascular isquémico) o cuando una arteria se rompe o se revienta, causando hemorragia en el cerebro (accidente cerebrovascular hemorrágico).

Los síntomas de un accidente cerebrovascular pueden incluir debilidad o entumecimiento repentino en la cara, brazo o pierna, especialmente en un solo lado del cuerpo; confusión, dificultad para hablar o comprender el lenguaje; problemas visuales en uno o ambos ojos; dificultad para caminar, mareo, vértigo o pérdida del equilibrio o coordinación; y dolor de cabeza intenso y repentino sin causa conocida.

El tratamiento temprano es crucial para minimizar los daños al cerebro y mejorar las posibilidades de recuperación. Si se sospecha un accidente cerebrovascular, es importante buscar atención médica inmediata en un centro médico de emergencia. La evaluación y el tratamiento oportunos pueden salvar vidas y reducir el riesgo de discapacidad a largo plazo.

Un hematoma es un colección localizada de sangre fuera de los vasos sanguíneos, que ocurre como resultado de una lesión o trauma en los tejidos blandos. Esto puede causar inflamación, sensibilidad y moretones en la zona afectada. Los hematomas pueden variar en tamaño y gravedad, dependiendo de la cantidad de sangre que se haya filtrado y del área del cuerpo donde haya ocurrido la hemorragia. En casos más graves, los hematomas pueden comprimir estructuras adyacentes, como nervios y vasos sanguíneos, lo que podría causar dolor, pérdida de función o incluso necrosis tisular. El tratamiento de un hematoma dependerá de su localización, tamaño y severidad, e incluye medidas de control del dolor, compresión, elevación y, en algunos casos, intervenciones quirúrgicas.

La hemorragia retiniana es un término médico que se refiere a la presencia de sangre en la parte interna del ojo, específicamente en el tejido sensible a la luz llamado retina. La retina contiene células fotorreceptoras que captan la luz y envían señales al cerebro, permitiéndonos ver imágenes.

La hemorragia retiniana puede ocurrir por varias razones, como la diabetes no controlada, el glaucoma, la degeneración macular relacionada con la edad, lesiones oculares, desprendimiento de retina o incluso por actividades físicas vigorosas, entre otras causas.

Cuando se produce una hemorragia retiniana, los vasos sanguíneos que suministran oxígeno y nutrientes a la retina se dañan o rompen, lo que hace que la sangre se acumule en el espacio entre las capas de la retina. Esto puede interferir con la visión normal y, en casos graves, incluso provocar la pérdida permanente de la visión.

Los síntomas de la hemorragia retiniana pueden incluir manchas flotantes, visión borrosa o distorsionada, destellos de luz, sombras en el campo visual o incluso una disminución repentina de la visión. Si experimenta alguno de estos síntomas, es importante buscar atención médica inmediata para determinar la causa subyacente y recibir un tratamiento adecuado.

Un aneurisma intracraneal es una dilatación localizada y focal de un vaso sanguíneo en el cerebro, que se produce como consecuencia de una debilidad en la pared del vaso. Esta dilatación puede ir aumentando de tamaño con el paso del tiempo, lo que incrementa el riesgo de rotura y hemorragia cerebral. Los aneurismas intracraneales suelen presentarse en las arterias cerebrales situadas en la base del cerebro.

La ruptura de un aneurisma intracraneal puede dar lugar a una hemorragia subaracnoidea, que es una acumulación de sangre en el espacio entre las membranas que rodean el cerebro. Esta situación representa una emergencia médica y requiere tratamiento inmediato, ya que puede provocar graves daños cerebrales o incluso la muerte.

Los factores de riesgo asociados con el desarrollo de aneurismas intracraneales incluyen la hipertensión arterial, el tabaquismo, las enfermedades cardiovasculares, las lesiones craneanas y los antecedentes familiares de aneurismas. Algunos aneurismas pueden no presentar síntomas hasta que se rompen, mientras que otros pueden causar dolores de cabeza, visión doble o alteraciones en la consciencia. El diagnóstico se realiza mediante técnicas de imagen como la angiografía por resonancia magnética (ARM) o la angiografía por catéter.

El tratamiento de los aneurismas intracraneales puede incluir cirugía abierta para clipar el aneurisma y evitar que se rompa, o endovascular, mediante la colocación de un stent o espiral metálico dentro del vaso sanguíneo para reforzar su pared. La elección del tratamiento dependerá del tamaño, la localización y la forma del aneurisma, así como de las condiciones médicas generales del paciente.

Un hemangioma cavernoso del sistema nervioso central (SNC) es un tipo raro de tumor vascular benigno que se encuentra en el cerebro o la médula espinal. Está compuesto por una masa anormal de vasos sanguíneos dilatados y agrupados, llamados senos cavernosos.

Estos tumores suelen crecer lentamente y pueden no causar síntomas durante mucho tiempo, especialmente si están ubicados en áreas que no ejercen presión sobre el tejido circundante. Sin embargo, a medida que crecen, pueden provocar diversos síntomas dependiendo de su tamaño y ubicación.

Los síntomas más comunes incluyen dolores de cabeza, convulsiones, problemas de visión, déficits neurológicos focales (como debilidad o entumecimiento en un lado del cuerpo), cambios cognitivos y trastornos del equilibrio o la coordinación.

El diagnóstico generalmente se realiza mediante resonancia magnética (RM) o angiografía por RM, que pueden mostrar la presencia de una lesión vascular anormal en el cerebro o la médula espinal. El tratamiento puede variar desde la observación cuidadosa hasta la cirugía o la radioterapia, dependiendo del tamaño, la ubicación y los síntomas del tumor.

La hemorragia cerebral traumática, también conocida como hemorragia intracraneal, es un tipo de lesión cerebral traumática (LCT) que ocurre cuando hay una ruptura de vasos sanguíneos en el cerebro, lo que provoca la acumulación de sangre en los tejidos cerebrales o en el espacio entre las membranas que rodean el cerebro.

Esta condición puede ser causada por diversos mecanismos traumáticos, como accidentes automovilísticos, caídas, lesiones deportivas o cualquier otro tipo de trauma craneal. La gravedad de la hemorragia cerebral traumática varía desde lesiones leves hasta graves, que pueden ser fatales.

Los síntomas más comunes incluyen dolor de cabeza intenso, vómitos, mareos, visión borrosa, debilidad o entumecimiento en extremidades, dificultad para hablar, confusión, somnolencia extrema y pérdida del conocimiento. El tratamiento temprano es crucial para prevenir complicaciones y reducir el riesgo de daño cerebral permanente. La evaluación y el manejo adecuados de la hemorragia cerebral traumática requieren la intervención de profesionales médicos especializados en neurología y neurocirugía.

El activador de tejido plasminógeno, también conocido como t-PA, es una enzima proteolítica que convierte el plasminógeno inactivo en plasmina activa. La plasmina es una enzima que descompone los coágulos de sangre y los fibrinos por lo que el activador de tejido plasminógeno juega un papel importante en la fibrinólisis, el proceso mediante el cual el cuerpo disuelve los coágulos de sangre.

El t-PA se produce naturalmente en el cuerpo y se encuentra en altos niveles en los endotelios vasculares, donde desempeña un papel importante en la prevención de la formación de coágulos de sangre dentro de los vasos sanguíneos. También se utiliza como medicamento para tratar la trombosis venosa profunda y el embolismo pulmonar, así como para disolver los coágulos de sangre en el cerebro después de un accidente cerebrovascular isquémico.

El uso del activador de tejido plasminógeno como medicamento conlleva riesgos, ya que puede aumentar el riesgo de hemorragia. Por lo tanto, se utiliza cuidadosamente y solo en situaciones específicas donde los beneficios superan los riesgos potenciales.

La parálisis cerebral se define en medicina como un grupo de trastornos del movimiento y la postura, debidos a daños en el cerebro que ocurren antes, durante o después del nacimiento. La lesión cerebral afecta los músculos, haciendo que se tensen y endurezcan (espasticidad) o que se muevan de manera involuntaria. También puede afectar la capacidad para hablar, comer, respirar y aprender.

Los síntomas varían ampliamente, desde casos leves donde una persona tiene dificultad con movimientos precisos hasta casos graves en los que una persona no puede caminar y necesita cuidados intensivos durante toda su vida. Aunque la parálisis cerebral es un trastorno de por vida, la mayoría de las personas con esta afección pueden vivir largas y productivas vidas si reciben un tratamiento médico y terapéutico apropiado.

La causa principal suele ser una lesión en el cerebro o un problema durante el desarrollo del cerebro antes del nacimiento, durante el parto o después de nacer. Los factores de riesgo incluyen infecciones durante el embarazo, complicaciones durante el parto que privan al bebé de oxígeno, lesiones en la cabeza y enfermedades que afectan la circulación sanguínea al cerebro. A veces, la causa es desconocida. No se considera una enfermedad progresiva, lo que significa que no empeora con el tiempo, aunque los síntomas y la discapacidad pueden cambiar a medida que el niño crece y se desarrolla.

Las malformaciones arteriovenosas intracraneales (MAVs) son anomalías vasculares congénitas en las que los vasos sanguíneos cerebrales se desarrollan incorrectamente, creando una comunicación directa entre las arterias y las venas sin la presencia de capilares normales intermedios. Esto puede resultar en un flujo sanguíneo anormal y aumentado a través del MAV, lo que puede provocar diversas complicaciones clínicas, como hemorragias cerebrales, convulsiones, déficits neurológicos o incluso la muerte en casos graves.

Las MAVs intracraneales se clasifican como lesiones vasculares congénitas, lo que significa que están presentes desde el nacimiento, aunque los síntomas pueden no aparecer hasta más tarde en la vida. Se desconoce la causa exacta de su desarrollo, pero se cree que involucran una combinación de factores genéticos y ambientales.

El tratamiento de las MAVs intracraneales depende de varios factores, como la ubicación, el tamaño y los síntomas asociados. Las opciones de tratamiento incluyen cirugía, radioterapia estereotáctica o embolización endovascular. El objetivo del tratamiento es eliminar o reducir significativamente el MAV para prevenir complicaciones futuras y mejorar los resultados clínicos.

La afasia de Wernicke, también conocida como afasia sensorial o receptiva, es un tipo de trastorno del lenguaje adquirido que afecta la comprensión y producción de habla. Se debe a una lesión en el área de Wernicke, situada en la corteza cerebral temporal posterior del hemisferio cerebral izquierdo, que es responsable del procesamiento del lenguaje auditivo y de la comprensión del significado de las palabras.

Las personas con afasia de Wernicke tienen dificultades para entender el habla y el lenguaje escrito, aunque su capacidad para producir sonidos y palabras puede estar intacta o solo ligeramente afectada. Su habla suele ser fluida y bien articulada, pero puede carecer de sentido o contener palabras inventadas o sin sentido (parafasias).

La afasia de Wernicke puede causar dificultades en la comprensión de las instrucciones, el diálogo social y la lectura. Las personas con este tipo de afasia también pueden tener dificultades para nombrar objetos y reconocer palabras escritas (alexia).

El tratamiento de la afasia de Wernicke generalmente implica terapia del lenguaje para ayudar a mejorar la comprensión y la producción del lenguaje. La rehabilitación puede incluir ejercicios de entrenamiento auditivo, trabajo con pictogramas y otras estrategias de comunicación alternativa y aumentativa.

Las cistatinas son un tipo de proteínas inhibidoras de las enzimas proteolíticas, específicamente aquellas que dividen las cadenas de proteínas en aminoácidos más pequeños. La forma más común y estudiada de cistatina es la cistatina C, que se encuentra en todos los tejidos corporales y fluidos biológicos, y se utiliza como un indicador de función renal en la práctica clínica.

La función principal de las cistatinas es regular la actividad de las proteasas, que son enzimas que descomponen las proteínas en péptidos más pequeños y aminoácidos individuales. Las cistatinas se unen a las proteasas y evitan que éstas se unan a sus sustratos, inhibiendo así su actividad.

Las cistatinas también tienen propiedades anti-inflamatorias y antimicrobianas, lo que sugiere que desempeñan un papel importante en la protección del cuerpo contra las infecciones y la inflamación excesiva. Además, se ha demostrado que las cistatinas tienen actividad anticancerígena, ya que pueden inhibir el crecimiento y la proliferación de células cancerosas.

En resumen, las cistatinas son un tipo importante de proteínas inhibidoras de enzimas que desempeñan una variedad de funciones importantes en el cuerpo humano, incluyendo la regulación de la actividad de las proteasas, la protección contra infecciones y la inflamación excesiva, y la prevención del crecimiento y la proliferación de células cancerosas.

La hemorragia posparto es un sangrado vaginal abundante que ocurre dentro de las primeras 24 horas después del parto y se define médicamente como la pérdida de 500 ml o más de sangre durante el primer día posterior al parto. También puede haber hemorragias posparto tardías, definidas como aquellas que ocurren entre las 24 horas y las 6 semanas posteriores al parto.

La hemorragia posparto puede ser causada por varios factores, incluyendo:

1. Retención de tejido placentario en el útero.
2. Trauma vaginal o cervical durante el parto.
3. Coagulopatías (trastornos de la coagulación sanguínea).
4. Infecciones del tracto genital.
5. Atonía uterina, que es una condición en la que el útero no se contrae adecuadamente después del parto.

La hemorragia posparto puede ser una emergencia médica y requiere atención inmediata para prevenir complicaciones graves, como shock hipovolémico o insuficiencia cardíaca. El tratamiento puede incluir medicamentos para contraer el útero, reemplazo de líquidos y sangre, y en algunos casos, cirugía.

La rotura espontánea, también conocida como ruptura espontánea de tendón o ligamento, se refiere a la condición médica en la cual un tendón o ligamento se rompe sin una lesión traumática previa. Esto puede ocurrir cuando el tejido se ha debilitado significativamente, ya sea por enfermedad, edad avanzada, uso excesivo o deficiencia nutricional. Los tendones más comúnmente afectados son los de la pantorrilla (tendón de Aquiles) y el manguito rotador del hombro. La rotura espontánea es una condición grave que puede causar dolor intenso, inflamación, moretones y dificultad para mover la articulación afectada. El tratamiento generalmente requiere de reposo, inmovilización, fisioterapia y en algunos casos, cirugía.

Un Ataque Isquémico Transitorio (AIT), también conocido como "mini-derrame cerebral" o "transitorio isquémico agudo", es un trastorno cerebrovascular breve e inofensivo que generalmente dura menos de una hora y no causa daño permanente en el cerebro.

Un AIT ocurre cuando se reduce temporalmente el flujo sanguíneo al cerebro, lo que priva a las células cerebrales del oxígeno y los nutrientes necesarios para su correcto funcionamiento. Esto puede deberse a la formación de un coágulo sanguíneo o a una disminución temporal del suministro de sangre al cerebro.

Los síntomas de un AIT pueden ser similares a los de un derrame cerebral y pueden incluir debilidad o entumecimiento repentinos en el rostro, brazo o pierna, especialmente en un lado del cuerpo; confusión, dificultad para hablar o comprender el lenguaje; problemas de visión en uno o ambos ojos; dolor de cabeza intenso y repentino sin causa conocida; pérdida de equilibrio o coordinación; y mareo o desmayo.

Aunque los síntomas de un AIT suelen desaparecer por completo en unas horas, es importante buscar atención médica inmediata si se experimentan algunos de ellos, ya que pueden ser una señal de advertencia de un derrame cerebral futuro. Un médico puede realizar pruebas para determinar la causa del AIT y recomendar tratamientos preventivos, como medicamentos para controlar los factores de riesgo cardiovascular o procedimientos quirúrgicos para eliminar los coágulos sanguíneos.

Lo siento, hay un pequeño error en su solicitud. "Japón" no es un término médico. Japón se refiere al país insular en el Pacífico occidental. Es conocido oficialmente como el Estado de Japón y consta de cuatro islas principales: Honshu, Hokkaido, Kyushu y Shikoku, junto con miles de pequeñas islas. Si está buscando un término médico, por favor verifique la ortografía o proporcione más detalles para que pueda ayudarlo mejor.

El edema encefálico, también conocido como hinchazón cerebral, es una afección médica grave en la que se acumula líquido en los tejidos del cerebro. Esto hace que el volumen del cerebro aumente y provoque un aumento de la presión intracraneal. El edema encefálico puede ocurrir como resultado de una lesión cerebral traumática, infección, tumor cerebral, convulsiones, intoxicación por monóxido de carbono, falta de oxígeno, aumento rápido de la presión arterial y algunos otros trastornos.

Los síntomas del edema encefálico pueden variar dependiendo de su gravedad y la causa subyacente. Pueden incluir dolores de cabeza, vómitos, confusión, somnolencia, convulsiones, pérdida de la visión o del habla, problemas para caminar, debilidad en un lado del cuerpo y coma. El edema encefálico es una afección médica grave que requiere atención inmediata. El tratamiento generalmente implica el control de la presión intracraneal y el tratamiento de la causa subyacente.

En realidad, "factores de tiempo" no es un término médico específico. Sin embargo, en un contexto más general o relacionado con la salud y el bienestar, los "factores de tiempo" podrían referirse a diversos aspectos temporales que pueden influir en la salud, las intervenciones terapéuticas o los resultados de los pacientes. Algunos ejemplos de estos factores de tiempo incluyen:

1. Duración del tratamiento: La duración óptima de un tratamiento específico puede influir en su eficacia y seguridad. Un tratamiento demasiado corto o excesivamente largo podría no producir los mejores resultados o incluso causar efectos adversos.

2. Momento de la intervención: El momento adecuado para iniciar un tratamiento o procedimiento puede ser crucial para garantizar una mejoría en el estado del paciente. Por ejemplo, tratar una enfermedad aguda lo antes posible puede ayudar a prevenir complicaciones y reducir la probabilidad de secuelas permanentes.

3. Intervalos entre dosis: La frecuencia y el momento en que se administran los medicamentos o tratamientos pueden influir en su eficacia y seguridad. Algunos medicamentos necesitan ser administrados a intervalos regulares para mantener niveles terapéuticos en el cuerpo, mientras que otros requieren un tiempo específico entre dosis para minimizar los efectos adversos.

4. Cronobiología: Se trata del estudio de los ritmos biológicos y su influencia en diversos procesos fisiológicos y patológicos. La cronobiología puede ayudar a determinar el momento óptimo para administrar tratamientos o realizar procedimientos médicos, teniendo en cuenta los patrones circadianos y ultradianos del cuerpo humano.

5. Historia natural de la enfermedad: La evolución temporal de una enfermedad sin intervención terapéutica puede proporcionar información valiosa sobre su pronóstico, así como sobre los mejores momentos para iniciar o modificar un tratamiento.

En definitiva, la dimensión temporal es fundamental en el campo de la medicina y la salud, ya que influye en diversos aspectos, desde la fisiología normal hasta la patogénesis y el tratamiento de las enfermedades.

La hemorragia gastrointestinal (GI) se refiere a cualquier sangrado que ocurre en el tracto gastrointestinal, que abarca desde la boca hasta el recto. Esta condición puede variar en gravedad, desde una pequeña cantidad de sangrado que produce síntomas leves, hasta un sangrado extenso que puede ser potencialmente mortal.

Los síntomas más comunes de una hemorragia GI incluyen:

1. Vomitar sangre o material que se ve como café molido.
2. Heces negras y alquitranadas (melena).
3. Dolor abdominal.
4. Mareos o desmayos.
5. Debilidad o fatiga.
6. Taquicardia (latidos cardíacos rápidos).
7. Hipotensión (presión arterial baja).

La causa de la hemorragia GI puede ser benigna o grave, y puede incluir úlceras pépticas, varices esofágicas, gastritis, diverticulosis, enfermedad inflamatoria intestinal, infecciones, tumores malignos o traumatismos. El diagnóstico generalmente se realiza mediante una endoscopia, que permite al médico visualizar el interior del tracto GI y identificar la fuente del sangrado. El tratamiento dependerá de la causa subyacente y puede incluir medicamentos, endoscopia terapéutica, cirugía o intervenciones radiológicas.

En términos médicos, un "resultado fatal" se refiere a un desenlace desfavorable de un diagnóstico, condición de salud, procedimiento o tratamiento que resulta en la muerte del paciente. Es un término formal y objetivo utilizado para describir una situación en la cual los esfuerzos terapéuticos no han podido revertir el curso de una enfermedad grave o lesión, y desafortunadamente conduce al fallecimiento del individuo.

Es importante mencionar que este término se utiliza con precaución y respeto, dada la naturaleza delicada y sensible de la situación. La comunicación de un resultado fatal a los familiares o cuidadores del paciente suele ser una parte difícil del trabajo médico, y se realiza siempre con empatía y compasión.

'Streptococcus anginosus' es una especie de bacterias gram positivas que pertenecen al género Streptococcus. Estas bacterias son parte de la flora normal de la boca, garganta y sistema digestivo en humanos. Sin embargo, bajo ciertas condiciones, pueden causar infecciones, especialmente en el tejido blando, pulmones, hígado, centro nervioso y sistemas cardiovascular y urinario.

Las infecciones causadas por 'Streptococcus anginosus' a menudo se caracterizan por la formación de abscesos. Aunque generalmente no es una bacteria invasiva, puede causar serias complicaciones en individuos con sistemas inmunológicos debilitados.

Es importante diferenciar 'Streptococcus anginosus' de otros streptococos patógenos como el Grupo A Streptococcus ('Streptococcus pyogenes'), que causa enfermedades como la faringitis estreptocócica y la escarlatina.

La Imagen por Resonancia Magnética (IRM) es una técnica de diagnóstico médico no invasiva que utiliza un campo magnético potente, radiaciones ionizantes no dañinas y ondas de radio para crear imágenes detalladas de las estructuras internas del cuerpo. Este procedimiento médico permite obtener vistas en diferentes planos y con excelente contraste entre los tejidos blandos, lo que facilita la identificación de tumores y otras lesiones.

Durante un examen de IRM, el paciente se introduce en un túnel o tubo grande y estrecho donde se encuentra con un potente campo magnético. Las ondas de radio se envían a través del cuerpo, provocando que los átomos de hidrógeno presentes en las células humanas emitan señales de radiofrecuencia. Estas señales son captadas por antenas especializadas y procesadas por un ordenador para generar imágenes detalladas de los tejidos internos.

La IRM se utiliza ampliamente en la práctica clínica para evaluar diversas condiciones médicas, como enfermedades del cerebro y la columna vertebral, trastornos musculoesqueléticos, enfermedades cardiovasculares, tumores y cánceres, entre otras afecciones. Es una herramienta valiosa para el diagnóstico, planificación del tratamiento y seguimiento de la evolución de las enfermedades.

La hipertensión, también conocida como presión arterial alta, es una afección médica en la que las fuerzas contra las paredes de las arterias son consistentemente más altas que lo normal. La presión arterial se mide en milímetros de mercurio (mmHg) y consta de dos números:

1. La presión arterial sistólica, que es la fuerza a la que tu corazón bombea sangre hacia tus arterias. Normalmente, este valor se encuentra en el rango de 120 mmHg o por debajo.
2. La presión arterial diastólica, que es la resistencia de las arterias a la circulación de la sangre cuando tu corazón está en reposo entre latidos. Normalmente, este valor se encuentra en el rango de 80 mmHg o por debajo.

La hipertensión se define como una presión arterial sistólica igual o superior a 130 mmHg y/o una presión arterial diastólica igual o superior a 80 mmHg, de acuerdo con los Lineamientos de la Sociedad Americana de Hipertensión (ASH), la Asociación Americana del Corazón (AHA) y el Colegio Americano de Cardiología (ACC) en 2017.

Existen diferentes grados o categorías de hipertensión, como:

- Etapa 1: Presión arterial sistólica entre 130-139 mmHg o presión arterial diastólica entre 80-89 mmHg.
- Etapa 2: Presión arterial sistólica de 140 mmHg o más alta o presión arterial diastólica de 90 mmHg o más alta.
- Hipertensión de emergencia: Presión arterial sistólica mayor o igual a 180 mmHg y/o presión arterial diastólica mayor o igual a 120 mmHg, que requiere atención médica inmediata.

La hipertensión es un factor de riesgo importante para enfermedades cardiovasculares, como infartos y accidentes cerebrovasculares, por lo que su detección temprana y control adecuado son cruciales para prevenir complicaciones graves.

Los fibrinolíticos son un grupo de medicamentos que disuelven los coágulos sanguíneos al activar la plasminógeno, una enzima presente en la sangre, para convertirse en plasmina. La plasmina descompone el tejido de fibrina, el componente principal de un coágulo sanguíneo, lo que resulta en la disolución del coágulo y la restauración del flujo sanguíneo normal.

Estos medicamentos se utilizan en el tratamiento de diversas afecciones médicas, como ataques cardíacos, accidentes cerebrovasculares e trombosis venosa profunda (TVP), donde la formación de coágulos sanguíneos puede ser peligrosa o potencialmente letal. Algunos ejemplos comunes de fibrinolíticos incluyen alteplasa, reteplasa y tenecteplasa.

Es importante tener en cuenta que los fibrinolíticos también pueden aumentar el riesgo de sangrado, por lo que se deben administrar con precaución y bajo la supervisión de un profesional médico capacitado.

La hemorragia vítrea, también conocida como sangrado vítreo, se refiere a la presencia de sangre en el humor vítreo del ojo. El humor vítreo es un gel transparente que llena el espacio entre el cristalino y la retina en el interior del ojo.

Este tipo de hemorragia suele ser el resultado de una ruptura de los vasos sanguíneos en la retina, que puede ocurrir debido a diversas causas, como la diabetes, la hipertensión arterial, la degeneración macular relacionada con la edad, un traumatismo ocular o una complicación durante una cirugía ocular.

Los síntomas de la hemorragia vítrea pueden variar dependiendo de la cantidad de sangre presente en el humor vítreo y de la rapidez con que se disipe. Algunos pacientes pueden experimentar visión borrosa, manchas flotantes, destellos de luz o pérdida de visión parcial o total.

El tratamiento de la hemorragia vítrea dependerá de la causa subyacente y puede incluir observación, medicamentos para reducir la presión intraocular o cirugía para eliminar el sangrado y reparar los vasos sanguíneos dañados.

La hemorragia ocular, también conocida como hipema o sangrado intraocular, se refiere a la presencia de sangre en el humor acuoso dentro del ojo. Este espacio generalmente es transparente y permite que la luz viaje a través del ojo para llegar a la retina. Sin embargo, cuando hay una hemorragia, la luz se bloquea parcial o completamente, resultando en una visión borrosa o totalmente ausente.

La causa más común de una hemorragia ocular es trauma directo al ojo. Otras posibles causas pueden incluir complicaciones quirúrgicas, desprendimiento de retina, tumores oculares, inflamación intraocular severa (uveítis), diabetes avanzada con daño vascular en la retina (retinopatía diabética), y trastornos de coagulación sanguínea.

El tratamiento depende de la causa subyacente. En casos leves, el sangrado puede reabsorberse por sí solo sin necesidad de intervención médica. Sin embargo, en casos graves o si hay complicaciones asociadas, como desprendimiento de retina, puede ser necesaria una cirugía para eliminar la sangre y corregir el problema subyacente.

Es importante buscar atención médica inmediata si se experimenta cualquier síntoma de hemorragia ocular, como visión borrosa repentina, manchas flotantes, halos alrededor de las luces o pérdida de visión parcial o total. La detección y el tratamiento tempranos pueden ayudar a prevenir daños permanentes en la vista.

El término 'Resultado del Tratamiento' se refiere al desenlace o consecuencia que experimenta un paciente luego de recibir algún tipo de intervención médica, cirugía o terapia. Puede ser medido en términos de mejoras clínicas, reducción de síntomas, ausencia de efectos adversos, necesidad de nuevas intervenciones o fallecimiento. Es un concepto fundamental en la evaluación de la eficacia y calidad de los cuidados de salud provistos a los pacientes. La medición de los resultados del tratamiento puede involucrar diversos parámetros como la supervivencia, la calidad de vida relacionada con la salud, la función física o mental, y la satisfacción del paciente. Estos resultados pueden ser evaluados a corto, mediano o largo plazo.

La enfermedad aguda se refiere a un proceso de enfermedad que comienza repentinamente, evoluciona rápidamente y generalmente dura relativamente poco tiempo. Puede causar síntomas graves o molestias, pero tiende a desaparecer una vez que el cuerpo ha combatido la infección o se ha recuperado del daño tisular. La enfermedad aguda puede ser causada por una variedad de factores, como infecciones virales o bacterianas, lesiones traumáticas o reacciones alérgicas. A diferencia de las enfermedades crónicas, que pueden durar meses o años y requerir un tratamiento a largo plazo, la mayoría de las enfermedades agudas se resuelven con el tiempo y solo necesitan atención médica a corto plazo.

Un examen neurológico es un procedimiento clínico realizado por un profesional médico, como un neurólogo o un médico de atención primaria, para evaluar la integridad y el funcionamiento del sistema nervioso central (cerebro y médula espinal) y periférico (nervios y músculos). El objetivo principal de este examen es identificar cualquier daño, enfermedad o disfunción en el sistema nervioso.

El examen neurológico generalmente consta de varias partes:

1. Historia clínica: El médico recopilará información sobre los síntomas del paciente, su historial médico y cualquier factor de riesgo conocido para enfermedades neurológicas.

2. Evaluación de la conciencia y cognición: Se evalúa el nivel de alerta y orientación del paciente, así como su memoria, atención, lenguaje y capacidad de resolución de problemas.

3. Examen de los reflejos: El médico comprobará la respuesta de los músculos a estímulos específicos, como el golpear un tendón con un martillo de reflejos.

4. Evaluación de la fuerza muscular: Se examinará la fuerza y la simetría de los músculos en todo el cuerpo.

5. Examen sensorial: El médico evaluará la capacidad del paciente para percibir diferentes tipos de estimulación, como tacto, temperatura, vibración y dolor.

6. Evaluación de la coordinación y equilibrio: Se realizarán pruebas para determinar la capacidad del paciente para mantener el equilibrio y realizar movimientos precisos.

7. Examen ocular: Se evaluará la función visual, incluidos los movimientos oculares, la agudeza visual y la respuesta pupilar a la luz.

8. Examen de la marcha y postura: El médico observará cómo el paciente se mueve y mantiene una postura erguida.

Los resultados de este examen ayudarán al médico a determinar si hay signos de enfermedad neurológica o lesión y, si es así, qué tipo de tratamiento podría ser beneficioso.

La disautonomía es un trastorno del sistema nervioso autónomo, que regula las funciones involuntarias del cuerpo como la frecuencia cardíaca, presión arterial, sudoración, digestión y temperatura corporal. La disautonomía autonómica, también conocida como síndrome de disautonomía, se refiere a un grupo de enfermedades donde el sistema nervioso autónomo no funciona correctamente.

Este trastorno puede afectar a diferentes órganos y sistemas del cuerpo, causando una variedad de síntomas que pueden incluir:

1. Taquicardia o bradicardia (ritmo cardíaco rápido o lento)
2. Hipotensión ortostática (presión arterial baja al estar de pie)
3. Sudoración excesiva o anormal
4. Pupilas dilatadas o contraídas
5. Problemas gastrointestinales, como náuseas, vómitos, diarrea o estreñimiento
6. Dificultad para respirar o dolor torácico
7. Mareos, aturdimiento o desmayos
8. Ansiedad, irritabilidad o depresión
9. Problemas de sueño
10. Piel seca o enrojecida

La disautonomía autonómica puede ser causada por diversas afecciones, como enfermedades degenerativas del sistema nervioso, lesiones de la médula espinal, infecciones virales, trastornos autoinmunes, exposición a tóxicos o deficiencias nutricionales. En algunos casos, la causa puede ser desconocida.

El tratamiento de la disautonomía autonómica depende de la causa subyacente y puede incluir medicamentos para controlar los síntomas, terapia física, cambios en el estilo de vida y dieta, y técnicas de manejo del estrés. En algunos casos, la terapia con dispositivos médicos, como un estimulador nervioso, puede ser útil.

El infarto de la arteria cerebral media (IAMC), también conocido como accidente cerebrovascular isquémico, es un tipo específico de accidente cerebrovasculares (ACV) que ocurre cuando el flujo sanguíneo hacia una parte del cerebro se interrumpe o reduce drásticamente. Esta interrupción generalmente está causada por la oclusión de una arteria, en este caso, la arteria cerebral media, una de las principales encargadas de abastecer de sangre al hemisferio cerebral correspondiente.

La arteria cerebral media se origina en el tronco del encéfalo y se divide en dos ramas: la rama anterior y la rama posterior. Cada una de estas ramas suministra sangre a diferentes regiones del cerebro, incluyendo áreas responsables del movimiento, sensibilidad, lenguaje, cognición y memoria. Cuando se produce un infarto en esta arteria, las células nerviosas en las áreas afectadas pueden dañarse o morir, lo que puede dar lugar a diversos déficits neurológicos, dependiendo de la gravedad del daño y la localización precisa del infarto.

Los síntomas más comunes del IAMC incluyen:

1. Debilidad o parálisis repentina en un lado del cuerpo (hemiplejia)
2. Pérdida de sensibilidad en un lado del cuerpo
3. Dificultad para hablar, comprender el lenguaje o dificultades con la expresión verbal (afasia)
4. Visión doble o pérdida de visión en un ojo (pérdida del campo visual)
5. Mareos, desequilibrio o pérdida del control muscular
6. Confusión, cambios en el estado mental o comportamiento inexplicables
7. Dolor de cabeza intenso y repentino sin causa conocida

El tratamiento del IAMC dependerá de la gravedad y la evolución de los síntomas. Los fármacos trombolíticos, como la activasa alteplase (Activase), pueden administrarse en las primeras horas tras el inicio de los síntomas para disolver los coágulos sanguíneos y mejorar el flujo sanguíneo a las áreas dañadas del cerebro. La terapia de rehabilitación, como la fisioterapia, la logopedia y la terapia ocupacional, también desempeña un papel importante en la recuperación funcional después de un IAMC.

La prevención del IAMC se centra en el control de los factores de riesgo cardiovasculares modificables, como el tabaquismo, la hipertensión arterial, la diabetes mellitus, la dislipidemia y la obesidad. El seguimiento médico regular y el tratamiento adecuado de las enfermedades cardiovasculares subyacentes también son cruciales para reducir el riesgo de sufrir un IAMC.

La Enfermedad de Moyamoya es un trastorno cerebrovascular raro y progresivo, caracterizado por el estrechamiento y eventual bloqueo de los vasos sanguíneos principales que suministran sangre al cerebro (arterias carótidas internas y sus ramas). Este proceso conduce a la formación de nuevos vasos sanguíneos anormales y delicados en respuesta a la disminución del flujo sanguíneo, los cuales se ven como una nube nebulosa en las imágenes radiológicas, similar a un humo o "moyamoya" en japonés.

La enfermedad puede causar diversos síntomas, incluyendo dolores de cabeza, convulsiones, dificultades para hablar, pérdida de coordinación y debilidad o parálisis en un lado del cuerpo. En casos graves, la privación de sangre al cerebro puede llevar a accidentes cerebrovasculares (ictus) o ataques isquémicos transitorios (AIT).

La causa exacta de la enfermedad de Moyamoya es desconocida, aunque se cree que factores genéticos y ambientales pueden contribuir a su desarrollo. El diagnóstico generalmente se realiza mediante estudios de imagenología avanzada, como angiografía por resonancia magnética (ARM) o angiografía cerebral invasiva. El tratamiento puede incluir medicamentos para controlar los síntomas y procedimientos quirúrgicos para mejorar el flujo sanguíneo al cerebro, como la revascularización cerebral.

El vasoespasmo intracraneal es una complicación que puede ocurrir después de un procedimiento de clipado de aneurisma o después de un accidente cerebrovascular hemorrágico. Se caracteriza por el espasmo y la estrechamiento de los vasos sanguíneos en el cerebro, lo que puede disminuir el flujo sanguíneo y causar isquemia o infarto cerebral. Los síntomas pueden incluir dolor de cabeza, convulsiones, déficits neurológicos focales y, en casos graves, coma o muerte. El tratamiento puede incluir medicamentos para dilatar los vasos sanguíneos, como la nimodipina, y, en algunos casos, intervenciones quirúrgicas para aliviar el espasmo.

Las venas cerebrales son vasos sanguíneos que se encargan de drenar la sangre desoxigenada desde los tejidos del cerebro hacia el corazón. Existen diferentes sistemas de venas cerebrales, incluyendo las venas cerebrales internas, externas y las grandes venas cerebrales.

Las venas cerebrales internas drenan la sangre desde los lóbulos occipital, parietal, temporal y parte del lóbulo frontal del cerebro. Se unen con la vena basal de Rosenthal para formar el seno sagital superior, que corre a lo largo de la línea media del cráneo.

Las venas cerebrales externas drenan la sangre desde los tejidos supratentoriales exteriores y desembocan en el seno sagital superior o en el seno transverso.

Las grandes venas cerebrales incluyen el seno sagital superior, el seno transverso, el seno sigmoideo y la vena yugular interna. Estos vasos sanguíneos se unen para formar el sistema de drenaje venoso extracraneal.

Las venas cerebrales son importantes en el diagnóstico y tratamiento de diversas afecciones neurológicas, como la trombosis venosa cerebral, los accidentes cerebrovasculares y los tumores cerebrales.

En medicina, un factor de riesgo se refiere a cualquier atributo, característica o exposición que incrementa la probabilidad de desarrollar una enfermedad o condición médica. Puede ser un aspecto inherente a la persona, como su edad, sexo o genética, o algo externo sobre lo que la persona tiene cierto control, como el tabaquismo, la dieta inadecuada o la falta de ejercicio.

Es importante notar que un factor de riesgo no garantiza que una persona contraerá la enfermedad en cuestión, solo aumenta las posibilidades. Del mismo modo, la ausencia de factores de iesgo no significa inmunidad a la enfermedad.

Es común hablar de factores de riesgo en relación con enfermedades cardiovasculares, cáncer y diabetes, entre otras. Por ejemplo, el tabaquismo es un importante factor de riesgo para las enfermedades pulmonares y cardiovasculares; la obesidad y la inactividad física son factores de riesgo para la diabetes y diversos tipos de cáncer.

La malaria cerebral, también conocida como cerebral malaria, es una complicación grave y potencialmente mortal de la malaria, una enfermedad causada por parásitos que se transmiten a través de las picaduras de mosquitos infectados. La forma más común de malaria que conduce a la enfermedad cerebral es Plasmodium falciparum.

La malaria cerebral ocurre cuando los parásitos de la malaria invaden y se multiplican en los glóbulos rojos, bloqueando los vasos sanguíneos que suministran sangre al cerebro. Esto puede provocar inflamación del tejido cerebral y alteraciones en el nivel de conciencia, convulsiones, coma e incluso la muerte si no se trata a tiempo.

Los síntomas de la malaria cerebral incluyen fiebre alta, dolor de cabeza intenso, vómitos repetidos, rigidez en el cuello, confusión, desorientación, convulsiones y coma. El diagnóstico se realiza mediante análisis de sangre para detectar la presencia de parásitos de la malaria.

El tratamiento de la malaria cerebral requiere hospitalización y consiste en administrar medicamentos antipalúdicos, especialmente aquellos que son eficaces contra los parásitos de P. falciparum, como la artemisinina y la cloroquina. Además, se pueden proporcionar cuidados de soporte, como oxígeno suplementario, fluidos intravenosos y control de convulsiones.

La prevención de la malaria cerebral implica evitar las picaduras de mosquitos mediante el uso de repelentes de insectos, ropa protectora, mosquiteras tratadas con insecticidas y la fumigación de espacios interiores. También se recomienda tomar medicamentos profilácticos antes y después de viajar a áreas donde la malaria es común.

Los péptidos beta-amiloides son pequeñas proteínas que desempeñan un papel importante en el desarrollo de la enfermedad de Alzheimer. Se forman cuando una proteína más grande llamada amiloide precursora se divide incorrectamente en fragmentos más cortos. Uno de estos fragmentos, conocido como péptido beta-amiloide o simplemente "beta-amiloide", tiene la tendencia a agruparse y formar depósitos duros llamados placas amiloides.

Estas placas se acumulan en el cerebro y dañan las células nerviosas (neuronas), interfiriendo con su funcionamiento normal y contribuyendo a la pérdida de memoria, el deterioro cognitivo y otros síntomas característicos de la enfermedad de Alzheimer. La acumulación excesiva de beta-amiloides se considera un marcador clave de la progresión de la enfermedad.

Aunque los péptidos beta-amiloides se asocian más comúnmente con el Alzheimer, también pueden desempeñar un papel en otras afecciones, como la enfermedad de Parkinson y la diabetes tipo 2.

Los anticoagulantes son medicamentos que se utilizan para prevenir la formación de coágulos sanguíneos o para evitar que los coágulos existentes aumenten de tamaño. Los coágulos sanguíneos pueden obstruir los vasos sanguíneos y bloquear el flujo de sangre, lo que puede causar daños graves en los tejidos y órganos del cuerpo.

Existen diferentes tipos de anticoagulantes, entre ellos:

1. Heparina y derivados: La heparina es un anticoagulante natural que se administra por vía intravenosa o subcutánea. Se utiliza en el tratamiento a corto plazo de la trombosis venosa profunda, la embolia pulmonar y otras condiciones en las que existe un riesgo elevado de formación de coágulos sanguíneos.
2. Warfarina: Es un anticoagulante oral que se utiliza para prevenir la formación de coágulos sanguíneos en personas con fibrilación auricular, válvulas cardíacas protésicas o antecedentes de trombosis venosa profunda o embolia pulmonar. La warfarina inhibe la acción de la vitamina K, necesaria para la coagulación sanguínea.
3. Dabigatrán, rivaroxabán y apixabán: Son anticoagulantes orales directos que inhiben la trombina o el factor Xa, dos enzimas clave en la cascada de coagulación sanguínea. Se utilizan para prevenir la formación de coágulos sanguíneos en personas con fibrilación auricular, trombosis venosa profunda o embolia pulmonar.

Es importante recordar que los anticoagulantes pueden aumentar el riesgo de hemorragias y su uso requiere un estricto control médico. Antes de iniciar un tratamiento con anticoagulantes, es necesario evaluar los beneficios y riesgos del tratamiento en cada caso particular.

La terapia trombolítica, también conocida como tratamiento trombólisis, es un procedimiento médico en el que se utilizan fármacos trombolíticos para disolver los coágulos sanguíneos (trombos) existentes en los vasos sanguíneos. Estos medicamentos actúan imitando la acción de la enzima natural plasminógeno, que descompone las fibrinas, una proteína importante en la formación de coágulos. La terapia trombolítica se utiliza a menudo para tratar emergencias vasculares agudas, como el infarto de miocardio (ataque al corazón), accidente cerebrovascular isquémico (derrame cerebral) y embolia pulmonar. El objetivo es restaurar rápidamente el flujo sanguíneo en la zona afectada, minimizando así daños adicionales a los tejidos y órganos. Sin embargo, este tratamiento conlleva ciertos riesgos, como un mayor riesgo de hemorragia, por lo que se debe considerar cuidadosamente en cada caso individual.

La cistatina C es una proteína pequeña y estable que se produce constantemente en todas las células del cuerpo. Es producida a un ritmo constante y su concentración en sangre es relativamente estable, lo que la convierte en una buena medida de la función renal. La cistatina C es eliminada principalmente por filtración glomerular y no es reabsorbida ni secretada por el túbulo renal. Por lo tanto, su concentración en sangre puede utilizarse como un indicador sensible de la disfunción renal.

La medición de los niveles de cistatina C en sangre se ha vuelto cada vez más importante en la evaluación de la función renal, especialmente en situaciones clínicas en las que otros marcadores de función renal, como la creatinina, pueden estar influenciados por factores no renales. Por ejemplo, los niveles de cistatina C pueden ser más precisos que los de creatinina en personas mayores, obesas o con enfermedades musculares.

La determinación de la concentración sérica de cistatina C puede utilizarse como un indicador sensible y específico de la disfunción renal temprana, incluso antes de que se presenten cambios clínicos o de laboratorio significativos en otros marcadores de función renal. Además, los niveles de cistatina C también pueden utilizarse para estimar la velocidad de filtración glomerular (VFG) y predecir el pronóstico de enfermedades renales crónicas.

En resumen, la cistatina C es una proteína producida constantemente por todas las células del cuerpo que se elimina principalmente por filtración glomerular. Su concentración en sangre puede utilizarse como un indicador sensible y específico de la función renal, especialmente en situaciones clínicas en las que otros marcadores pueden estar influenciados por factores no renales.

En la medicina, el término "amiloide" se refiere a un tipo anormal de proteína que puede acumularse en los tejidos y órganos del cuerpo. Esta acumulación se conoce como amiloidosis. Existen diferentes tipos de proteínas amiloides, y cada uno tiene su propio nombre y síntomas asociados. Algunos de los tipos más comunes incluyen:

* Amiloide A: Se produce en personas con trastornos crónicos del hígado y se acumula principalmente en el bazo, el hígado y la médula ósea.
* Amiloide TTR (transtiretina): Puede depositarse en varios órganos y tejidos, incluyendo el corazón, los riñones, el sistema nervioso periférico y los ojos. Existen dos formas hereditarias de amiloidosis TTR: la ATTR familial amiodarona cardiomiopatía y neuropatía y la ATTR V30M familiarla polineuropatía, ambos causados por mutaciones en el gen TTR. También existe una forma adquirida de amiloidosis TTR llamada ATTR senil, que se produce espontáneamente en personas mayores de 60 años y afecta principalmente al corazón.
* Amiloide AL (inmunoglobulina ligera kappa o lambda): Se produce en personas con trastornos de las células plasmáticas, como el mieloma múltiple y los tumores de células B, y se acumula principalmente en el corazón, los riñones, el hígado y los tejidos blandos.
* Amiloide Aβ (beta-amiloide): Se produce en personas con la enfermedad de Alzheimer y se acumula en forma de placas en el cerebro.

La acumulación de amiloide puede causar diversos síntomas, dependiendo del tipo y la ubicación de la acumulación. Los síntomas pueden incluir hinchazón, dolor e insensibilidad en las manos y los pies; problemas cardíacos, como latidos irregulares o insuficiencia cardíaca congestiva; problemas renales, como proteinuria y hematuria; y problemas neurológicos, como demencia, confusión y pérdida de memoria. El diagnóstico de la amiloidosis puede ser difícil y requiere una combinación de pruebas clínicas, de laboratorio e histopatológicas. El tratamiento depende del tipo y la gravedad de la enfermedad y puede incluir terapias dirigidas a reducir la producción o acelerar la eliminación del amiloide, como quimioterapia, trasplante de células madre y terapia con anticuerpos monoclonales.

Los estudios retrospectivos, también conocidos como estudios de cohortes retrospectivas o estudios de casos y controles, son un tipo de investigación médica o epidemiológica en la que se examina y analiza información previamente recopilada para investigar una hipótesis específica. En estos estudios, los investigadores revisan registros médicos, historiales clínicos, datos de laboratorio o cualquier otra fuente de información disponible para identificar y comparar grupos de pacientes que han experimentado un resultado de salud particular (cohorte de casos) con aquellos que no lo han hecho (cohorte de controles).

La diferencia entre los dos grupos se analiza en relación con diversas variables de exposición o factores de riesgo previamente identificados, con el objetivo de determinar si existe una asociación estadísticamente significativa entre esos factores y el resultado de salud en estudio. Los estudios retrospectivos pueden ser útiles para investigar eventos raros o poco frecuentes, evaluar la efectividad de intervenciones terapéuticas o preventivas y analizar tendencias temporales en la prevalencia y distribución de enfermedades.

Sin embargo, los estudios retrospectivos también presentan limitaciones inherentes, como la posibilidad de sesgos de selección, información y recuerdo, así como la dificultad para establecer causalidad debido a la naturaleza observacional de este tipo de investigación. Por lo tanto, los resultados de estudios retrospectivos suelen requerir validación adicional mediante estudios prospectivos adicionales antes de que se puedan extraer conclusiones firmes y definitivas sobre las relaciones causales entre los factores de riesgo y los resultados de salud en estudio.

Los estudios prospectivos, también conocidos como estudios de cohortes, son un tipo de diseño de investigación epidemiológica en el que se selecciona una población en riesgo y se sigue durante un período de tiempo para observar la aparición de un resultado o evento de interés. A diferencia de los estudios retrospectivos, donde los datos se recopilan de registros existentes o por medio de entrevistas sobre eventos pasados, en los estudios prospectivos, los datos se recopilan proactivamente a medida que ocurren los eventos.

Este tipo de estudio permite la recogida de datos estandarizados y actualizados, minimiza los problemas de rememoración y mejora la precisión en la medición de variables de exposición e intermedias. Además, los estudios prospectivos pueden permitir la evaluación de múltiples factores de riesgo simultáneamente y proporcionar una mejor comprensión de la relación causal entre la exposición y el resultado. Sin embargo, requieren un seguimiento prolongado y costoso, y pueden estar sujetos a sesgos de selección y pérdida a follow-up.

La presión sanguínea se define como la fuerza que ejerce la sangre al fluir a través de los vasos sanguíneos, especialmente las arterias. Se mide en milímetros de mercurio (mmHg) y se expresa normalmente como dos números. El número superior o superior es la presión sistólica, que representa la fuerza máxima con la que la sangre se empuja contra las paredes arteriales cuando el corazón late. El número inferior o inferior es la presión diastólica, que refleja la presión en las arterias entre latidos cardíacos, cuando el corazón se relaja y se llena de sangre.

Una lectura típica de presión arterial podría ser, por ejemplo, 120/80 mmHg, donde 120 mmHg corresponde a la presión sistólica y 80 mmHg a la presión diastólica. La presión sanguínea normal varía según la edad, el estado de salud general y otros factores, pero en general, un valor inferior a 120/80 mmHg se considera una presión sanguínea normal y saludable.

La embolia intracraneal es un tipo específico de accidente cerebrovascular (ACV) o ataque isquémico transitorio (AIT) que ocurre cuando un coágulo de sangre o una embolia (un sólido, líquido o gas que viaja a través del torrente sanguíneo y bloquea un vaso sanguíneo) se origina en otra parte del cuerpo y viaja al cerebro, donde obstruye un vaso sanguíneo y causa la interrupción del flujo sanguíneo cerebral. Estos coágulos suelen originarse en el corazón o en las grandes arterias del cuello.

Los síntomas de una embolia intracraneal pueden variar dependiendo de la ubicación y el tamaño del vaso sanguíneo afectado, pero generalmente incluyen debilidad o parálisis repentina en la cara, brazo o pierna, especialmente en un solo lado del cuerpo; confusión o dificultad para hablar y comprender el lenguaje; problemas de visión en uno o ambos ojos; dificultad para caminar, mareo, pérdida del equilibrio o coordinación; y dolor de cabeza intenso, repentino y sin causa conocida.

El tratamiento de la embolia intracraneal generalmente implica la administración de fármacos anticoagulantes o trombolíticos para disolver el coágulo sanguíneo y restaurar el flujo sanguíneo cerebral. En algunos casos, se puede considerar la realización de una intervención quirúrgica, como la extracción mecánica del coágulo o la colocación de un stent para mantener abierto el vaso sanguíneo afectado. La prevención es fundamental en el manejo de este tipo de eventos y puede incluir el control de factores de riesgo cardiovasculares, como la hipertensión arterial, la diabetes mellitus, la dislipidemia y el tabaquismo.

Los ventrículos cerebrales son cavidades o espacios llenos de líquido dentro del cerebro. Hay cuatro ventrículos en total: dos ventrículos laterales en cada hemisferio cerebral, el tercer ventrículo en el centro del cerebro y el cuarto ventrículo más cercano al tronco encefálico.

Estos ventrículos están conectados entre sí por pequeños conductos y contienen líquido cefalorraquídeo (LCR), que protege al cerebro y la médula espinal de lesiones y infecciones, mantiene la estabilidad del entorno neurológico y proporciona nutrientes a las células nerviosas.

El líquido cefalorraquídeo se produce en los ventrículos laterales, fluye hacia el tercer ventrículo a través del foramen de Monro, llena el cuarto ventrículo después de pasar por el acueducto cerebral y finalmente sale al espacio subaracnoides que rodea el cerebro y la médula espinal a través de los conductos de Luschka y Magendie.

La alteración en el tamaño o forma de los ventrículos cerebrales puede ser un signo de diversas condiciones neurológicas, como hidrocefalia, tumores cerebrales o enfermedades neurodegenerativas.

La Enfermedad de Alzheimer es un tipo de demencia progresiva que afecta principalmente a personas mayores de 65 años, aunque también puede presentarse en individuos más jóvenes. Es el trastorno neurodegenerativo más común y constituye entre el 60% y el 80% de los casos de demencia.

La patología se caracteriza por la acumulación anormal de proteínas en el cerebro, principalmente beta-amiloides (que forman placas amiloides) y tau (que forma ovillos neurofibrilares), lo que lleva a la muerte de las células nerviosas (neuronas). Esta degeneración neuronal provoca una pérdida gradual de memoria, cognición, capacidad de razonamiento, comportamiento y funcionalidad.

La enfermedad avanza en etapas, iniciando con ligeros problemas de memoria y dificultades para realizar tareas cotidianas hasta llegar a una fase severa donde la persona afectada pierde la capacidad de comunicarse e interactuar con su entorno.

Aunque aún no existe cura para la Enfermedad de Alzheimer, existen tratamientos que pueden ayudar a mejorar los síntomas y retrasar el avance de la enfermedad. Además, investigaciones continuas buscan nuevas formas de prevenir o detener su progresión.

La hemorragia de los ganglios basales es un tipo específico de hemorragia intracraneal que se produce en las estructuras profundas del cerebro conocidas como ganglios basales. Los ganglios basales desempeñan un papel crucial en el control de los movimientos musculares y también contribuyen a varias funciones cognitivas.

La hemorragia en esta región puede ocurrir como resultado de una variedad de factores, que incluyen:

1. Hipertensión arterial no controlada (presión arterial alta)
2. Traumatismos craneoencefálicos
3. Malformaciones vasculares, como aneurismas o angiomas
4. Enfermedades cerebrovasculares, como la enfermedad de las arterias cerebrales pequeñas
5. Uso de drogas que afectan la coagulación sanguínea, como la warfarina o el coumadin

Los síntomas de una hemorragia de los ganglios basales pueden variar ampliamente y dependen de la gravedad y la ubicación exacta de la hemorragia. Algunos síntomas comunes incluyen:

1. Dolor de cabeza intenso y repentino
2. Náuseas y vómitos
3. Debilidad o parálisis en un lado del cuerpo
4. Confusión o alteración del nivel de conciencia
5. Visión doble o pérdida de visión
6. Problemas para hablar o tragar
7. Pérdida del equilibrio o coordinación
8. Cambios en el comportamiento o la personalidad

El diagnóstico de una hemorragia de los ganglios basales generalmente se realiza mediante estudios de imagenología, como tomografías computarizadas (TC) o resonancias magnéticas (RM). El tratamiento puede incluir medicamentos para controlar la presión arterial y reducir el riesgo de más sangrado, cirugía para drenar el hematoma y reparar vasos sanguíneos dañados, o terapia de rehabilitación para ayudar a recuperar las funciones perdidas. La tasa de supervivencia y la recuperación dependen de la gravedad de la hemorragia y la rapidez con que se reciba el tratamiento.

Los Modelos Animales de Enfermedad son organismos no humanos, generalmente mamíferos o invertebrados, que han sido manipulados genéticamente o experimentalmente para desarrollar una afección o enfermedad específica, con el fin de investigar los mecanismos patofisiológicos subyacentes, probar nuevos tratamientos, evaluar la eficacia y seguridad de fármacos o procedimientos terapéuticos, estudiar la interacción gen-ambiente en el desarrollo de enfermedades complejas y entender los procesos básicos de biología de la enfermedad. Estos modelos son esenciales en la investigación médica y biológica, ya que permiten recrear condiciones clínicas controladas y realizar experimentos invasivos e in vivo que no serían éticamente posibles en humanos. Algunos ejemplos comunes incluyen ratones transgénicos con mutaciones específicas para modelar enfermedades neurodegenerativas, cánceres o trastornos metabólicos; y Drosophila melanogaster (moscas de la fruta) utilizadas en estudios genéticos de enfermedades humanas complejas.

Los estudios de seguimiento en el contexto médico se refieren a los procedimientos continuos y regulares para monitorear la salud, el progreso o la evolución de una condición médica, un tratamiento o una intervención en un paciente después de un período determinado. Estos estudios pueden incluir exámenes físicos, análisis de laboratorio, pruebas de diagnóstico por imágenes y cuestionarios de salud, entre otros, con el fin de evaluar la eficacia del tratamiento, detectar complicaciones tempranas, controlar los síntomas y mejorar la calidad de vida del paciente. La frecuencia y el alcance de estos estudios varían dependiendo de la afección médica y las recomendaciones del proveedor de atención médica. El objetivo principal es garantizar una atención médica continua, personalizada y oportuna para mejorar los resultados del paciente y promover la salud general.

La incidencia, en términos médicos, se refiere al número de nuevos casos de una enfermedad o acontecimiento clínico específico que ocurren dentro de una población determinada durante un período de tiempo específico. Se calcula como el cociente entre el número de nuevos casos y el tamaño de la población en riesgo, multiplicado por el factor de tiempo correspondiente (por ejemplo, 1000 o 100.000) para obtener una medida más fácilmente interpretable. La incidencia proporciona información sobre la frecuencia con que se produce un evento en una población y puede utilizarse como indicador del riesgo de contraer una enfermedad en un período de tiempo dado. Es especialmente útil en estudios epidemiológicos y de salud pública para evaluar la aparición y propagación de enfermedades infecciosas o el impacto de intervenciones preventivas o terapéuticas sobre su incidencia.

El precursor de proteína beta-amiloide, también conocido como APP (del inglés Amyloid Precursor Protein), es una proteína transmembrana integral que desempeña un papel importante en el desarrollo y la plasticidad del sistema nervioso. La proteína APP puede experimentar diversos procesos de escisión, dando como resultado la formación de diferentes fragmentos. Uno de estos fragmentos es el péptido beta-amiloide (Aβ), que se acumula y forma depósitos insolubles conocidos como placas amiloides en el cerebro de los pacientes con enfermedad de Alzheimer. Las mutaciones en el gen APP están asociadas con formas familiares raras de la enfermedad de Alzheimer. Por lo tanto, el equilibrio entre las diferentes vías de procesamiento de APP y la acumulación de fragmentos tóxicos como Aβ son cruciales para mantener la homeostasis celular y prevenir el desarrollo de enfermedades neurodegenerativas.

La hemorragia posoperatoria se refiere a un sangrado que ocurre después de una cirugía. Puede variar en gravedad, desde un ligero sangrado que solo impregna los vendajes hasta un sangrado abundante que puede llevar a una disminución peligrosa de la presión arterial y shock hipovolémico.

El sangrado puede provenir de diferentes fuentes, como vasos sanguíneos dañados durante la cirugía, o por la ruptura de coágulos sanguíneos formados después de la operación. También puede ser el resultado de un problema de coagulación en el paciente.

El manejo de la hemorragia posoperatoria depende de su causa y gravedad. Puede incluir medidas conservadoras, como reposo y presión sobre el sitio de la herida, hasta intervenciones más agresivas, como una nueva cirugía para controlar el sangrado o transfusiones de sangre para reemplazar los líquidos y células sanguíneas perdidas.

De acuerdo con la definición médica establecida por la Organización Mundial de la Salud (OMS), un recién nacido es un individuo que tiene hasta 28 días de vida. Este período comprende los primeros siete días después del nacimiento, que se conocen como "neonatos tempranos", y los siguientes 21 días, denominados "neonatos tardíos". Es una etapa crucial en el desarrollo humano, ya que durante este tiempo el bebé está adaptándose a la vida fuera del útero y es especialmente vulnerable a diversas condiciones de salud.

En medicina, los "factores de edad" se refieren a los cambios fisiológicos y patológicos que ocurren normalmente con el envejecimiento, así como a los factores relacionados con la edad que pueden aumentar la susceptibilidad de una persona a enfermedades o influir en la respuesta al tratamiento médico. Estos factores pueden incluir:

1. Cambios fisiológicos relacionados con la edad: Como el declive de las funciones cognitivas, la disminución de la densidad ósea, la pérdida de masa muscular y la reducción de la capacidad pulmonar y cardiovascular.

2. Enfermedades crónicas relacionadas con la edad: Como la enfermedad cardiovascular, la diabetes, el cáncer, las enfermedades neurológicas y los trastornos mentales, que son más comunes en personas mayores.

3. Factores sociales y ambientales relacionados con la edad: Como el aislamiento social, la pobreza, la falta de acceso a la atención médica y los hábitos de vida poco saludables (como el tabaquismo, el consumo excesivo de alcohol y la inactividad física), que pueden aumentar el riesgo de enfermedades y disminuir la esperanza de vida.

4. Predisposición genética: Algunas personas pueden ser más susceptibles a ciertas enfermedades relacionadas con la edad debido a su composición genética.

5. Factores hormonales: Los cambios hormonales que ocurren con la edad también pueden influir en la salud y el bienestar general de una persona. Por ejemplo, los niveles decrecientes de estrógeno en las mujeres durante la menopausia se han relacionado con un mayor riesgo de osteoporosis y enfermedades cardiovasculares.

En general, es importante tener en cuenta todos estos factores al evaluar el riesgo de enfermedades relacionadas con la edad y desarrollar estrategias preventivas y terapéuticas efectivas para promover la salud y el bienestar en todas las etapas de la vida.

La recurrencia, en el contexto médico, se refiere al retorno o reaparición de síntomas, signos clínicos o una enfermedad después de un periodo de mejoría o remisión. Esto sugiere que el tratamiento previamente administrado no logró eliminar por completo la afección y ésta ha vuelto a manifestarse. La recurrencia puede ocurrir en diversas condiciones médicas, especialmente en enfermedades crónicas o aquellas que tienen tendencia a reaparecer, como el cáncer. El término también se utiliza para describir la aparición de nuevos episodios en trastornos episódicos, como la migraña o la epilepsia. Es importante monitorizar y controlar a los pacientes con alto riesgo de recurrencia para garantizar un tratamiento oportuno y evitar complicaciones adicionales.

En el contexto médico, el término 'riesgo' se refiere a la probabilidad o posibilidad de que un evento adverso ocurra. Se utiliza para evaluar la probabilidad de que una persona desarrolle una enfermedad, sufra complicaciones durante un tratamiento o experimente efectos secundarios indeseables.

El nivel de riesgo a menudo se clasifica como bajo, medio o alto, dependiendo de diversos factores como la edad, el historial médico, los hábitos de vida y los resultados de pruebas diagnósticas. La evaluación del riesgo ayuda a los profesionales médicos a tomar decisiones informadas sobre el manejo clínico de un paciente, como si es necesario realizar más pruebas, recomendar cambios en el estilo de vida o prescribir medicamentos preventivos.

También se utiliza en la investigación médica para evaluar los posibles beneficios y riesgos asociados con diferentes intervenciones terapéuticas o preventivas, lo que ayuda a los investigadores a diseñar estudios clínicos más seguros y eficaces.

Las complicaciones posoperatorias se refieren a problemas o eventos adversos que surgen después de una cirugía y pueden estar relacionados con el procedimiento quirúrgico, la anestesia o los cuidados posoperatorios. Estas complicaciones pueden variar en gravedad y pueden incluir infecciones, reacciones a la anestesia, hemorragias, coágulos sanguíneos, neumonía, insuficiencia orgánica o incluso la muerte.

Las complicaciones posoperatorias pueden ser el resultado de una serie de factores, incluyendo la salud general del paciente antes de la cirugía, el tipo y la complejidad del procedimiento quirúrgico, la habilidad y experiencia del equipo quirúrgico, y los cuidados posoperatorios adecuados.

Algunas complicaciones posoperatorias pueden ser prevenidas o minimizadas mediante una evaluación preoperatoria exhaustiva, una técnica quirúrgica meticulosa, el uso apropiado de antibióticos y otros medicamentos, y la atención cuidadosa durante el período posoperatorio. Los pacientes también pueden tomar medidas para reducir su riesgo de complicaciones posoperatorias, como dejar de fumar, mantener una dieta saludable y hacer ejercicio regular antes de la cirugía.

Un aneurisma roto, también conocido como ruptura de aneurisma, es una situación médica de emergencia en la cual un aneurisma (una dilatación localizada y focal de una arteria) se ha roto o agrietado, lo que causa una hemorragia interna. La mayoría de los aneurismas rotos ocurren en el cerebro (aneurisma de la circulación cerebral), pero también pueden ocurrir en otras partes del cuerpo.

La ruptura de un aneurisma puede provocar una hemorragia masiva y una rápida disminución de la presión arterial, lo que puede llevar a un shock hipovolémico y potencialmente a la muerte si no se trata de inmediato. Los síntomas más comunes de un aneurisma roto incluyen dolor de cabeza intenso y repentino (conocido como "dolor de cabeza del peor momento de tu vida"), rigidez de cuello, vómitos, sensibilidad a la luz, convulsiones y pérdida de conocimiento.

El tratamiento de un aneurisma roto puede incluir cirugía para reparar o bloquear el vaso sanguíneo dañado, endovascular (un procedimiento mínimamente invasivo que utiliza catéteres y stents para bloquear el aneurisma), medicamentos para controlar la presión arterial y prevenir la formación de coágulos sanguíneos, y cuidados intensivos en un hospital. La tasa de mortalidad asociada con los aneurismas rotos es alta, especialmente si no se detectan y tratan a tiempo.

La arteria basilar es una arteria importante en el cerebro. Se forma por la fusión de las dos arterias vertebrales y recorre la parte inferior del tronco encefálico, un área de conexiones nerviosas cruciales entre el cerebro y la médula espinal. La arteria basilar suministra sangre a la protuberancia y el bulbo raquídeo, así como al lóbulo occipital y a partes del cerebelo. También da lugar a varias arterias cerebrales pequeñas que irrigan diferentes áreas del cerebro. La disfunción o bloqueo de la arteria basilar puede resultar en graves consecuencias neurológicas, como accidentes cerebrovasculares (ACV) o trastornos de la conciencia.

La hemorragia de la coroide es un tipo específico de hemorragia ocular que se produce dentro de la capa vasculatura llamada coroide, ubicada detrás de la retina en el ojo. La coroide contiene una densa red de vasos sanguíneos que suministran oxígeno y nutrientes a los tejidos externos de la retina.

La hemorragia de la coroide puede ser causada por diversas condiciones, como la diabetes avanzada, hipertensión arterial no controlada, envejecimiento, degeneración macular asociada a la edad (DMAE), traumatismos oculares, desprendimiento de retina y algunas formas raras de tumores oculares.

Los síntomas más comunes de la hemorragia de la coroide incluyen visión borrosa o disminuida, aparición repentina de manchas flotantes (puntos, líneas u ondas negras) en el campo visual y, en casos graves, pérdida total de la visión. El tratamiento dependerá de la causa subyacente y puede incluir medicamentos para controlar la presión arterial o la diabetes, terapia con láser o cirugía para reparar desprendimientos de retina o eliminar tejido cicatricial.

Una úlcera péptica hemorrágica es una complicación de una úlcera péptica, que son lesiones abiertas en la mucosa del estómago o duodeno. Estas úlceras se desarrollan generalmente como resultado de una infección por la bacteria Helicobacter pylori o como efecto secundario del uso prolongado de antiinflamatorios no esteroides (AINEs).

Una úlcera péptica hemorrágica se caracteriza por el sangrado en o alrededor de la úlcera. Puede variar desde un sangrado lento y crónico, que causa anemia ferropénica, hasta un sangrado agudo severo, que puede conducir a una hemorragia digestiva alta y shock hipovolémico. Los síntomas pueden incluir vómitos con sangre (hematemesis) o deposiciones negras y alquitranadas (melena), debilidad, mareos y desmayos.

El tratamiento de una úlcera péptica hemorrágica generalmente implica medidas para controlar el sangrado, como la administración de medicamentos que reduzcan la acidez gástrica, inyecciones de epinefrina o cauterización mediante procedimientos endoscópicos. En casos graves, puede ser necesaria una cirugía para reparar el daño vascular y detener el sangrado.

La presión intracraneal (PIC) es la presión que existe dentro del cráneo en el espacio que contiene el cerebro, el líquido cefalorraquídeo (LCR) y los vasos sanguíneos. Bajo condiciones normales, esta presión se mantiene relativamente constante gracias a un sofisticado sistema de mecanismos reguladores. La PIC fisiológica normal varía con la edad, pero generalmente se considera que está entre 5-15 mmHg en reposo.

La PIC puede verse afectada por diversas condiciones médicas. Un aumento patológico de la PIC (llamado hipertensión intracraneal) puede ser causado por edema cerebral, hemorragia intracraneal, tumores cerebrales, infecciones como meningitis o abscesos cerebrales, hidrocefalia y otros trastornos. Los síntomas de una PIC alta pueden incluir dolores de cabeza, vómitos, alteraciones visuales, confusión, letargia e incluso coma en casos graves.

Por otro lado, una presión intracraneal baja (hipotensión intracraneal) también puede ser problemática y puede deberse a deshidratación, hemorragia subaracnoidea severa o por una disminución del volumen de líquido cefalorraquídeo. Los síntomas de una PIC baja pueden incluir letargia, rigidez de nuca, falta de coordinación, pupilas dilatadas e irreactivas y, en casos graves, parálisis o muerte.

El monitoreo de la PIC se realiza mediante diferentes métodos, como catéteres intraventriculares o sensores de fibra óptica, y es especialmente útil en el manejo de pacientes con traumatismos craneales graves, hemorragias subaracnoideas, meningitis, encefalitis, tumores cerebrales y otras afecciones neurológicas.

La arteria cerebral anterior es una arteria importante en el sistema de circulación cerebral. Se origina en la circunflexión de Willis, que es un círculo arterial formado por la unión de varias arterias en la base del cerebro. La arteria cerebral anterior se divide en dos ramas: la rama frontal y la rama anterior cerebral.

La rama frontal se dirige hacia adelante y lateralmente para suministrar sangre a la parte frontal del cerebro, incluyendo el lóbulo frontal y la corteza prefrontal. La rama anterior cerebral se dirige medialmente y hacia arriba para suministrar sangre al área de la corteza motora primaria y la corteza sensorial primaria del cerebro.

La arteria cerebral anterior también proporciona sangre a estructuras profundas del cerebro, como el uncus del lóbulo temporal y el giro cingulado anterior. La oclusión o el bloqueo de la arteria cerebral anterior pueden causar una variedad de síntomas neurológicos, dependiendo de la ubicación y la gravedad del daño.

Los síntomas pueden incluir debilidad o parálisis en los brazos o las piernas, dificultad para hablar o comprender el lenguaje, pérdida de memoria o confusión, y cambios en la personalidad o el comportamiento. El tratamiento puede incluir medicamentos para disolver los coágulos sanguíneos o cirugía para reabrir las arterias bloqueadas.

El término 'pronóstico' se utiliza en el ámbito médico para describir la previsión o expectativa sobre el curso probable de una enfermedad, su respuesta al tratamiento y la posibilidad de recuperación o supervivencia del paciente. Es una evaluación clínica que tiene en cuenta diversos factores como el tipo y gravedad de la enfermedad, la respuesta previa a los tratamientos, los factores genéticos y ambientales, la salud general del paciente y su edad, entre otros. El pronóstico puede ayudar a los médicos a tomar decisiones informadas sobre el plan de tratamiento más adecuado y a los pacientes a comprender mejor su estado de salud y a prepararse para lo que pueda venir. Es importante señalar que un pronóstico no es una garantía, sino una estimación basada en la probabilidad y las estadísticas médicas disponibles.

La arteria cerebral posterior es una arteria paired que se origina en la circulación vertebrobasilar y es responsable de suministrar sangre a la corteza cerebral, el lóbulo occipital, el lóbulo temporal, la región inferior del lóbulo parietal y el brainstem. Se divide en dos ramas, la rama cortical y la rama callosa, que suministran sangre a diferentes regiones del cerebro. La arteria cerebral posterior desempeña un papel crucial en el suministro de oxígeno y nutrientes al cerebro y cualquier disfunción o daño en esta arteria puede resultar en diversos síndromes neurológicos, como la hemiparesia, los déficits visuales y los trastornos del habla.

En la medicina y la psicología clínica, los "factores sexuales" se refieren a diversos aspectos que influyen en la respuesta sexual y la conducta sexual de un individuo. Estos factores pueden ser biológicos, psicológicos o sociales.

1. Factores Biológicos: Estos incluyen las características físicas y hormonales. La producción de hormonas sexuales como los andrógenos en los hombres y estrógenos en las mujeres desempeñan un papel crucial en la libido y la función sexual. Las condiciones médicas también pueden afectar la respuesta sexual, como la disfunción eréctil en los hombres o el dolor durante las relaciones sexuales en las mujeres.

2. Factores Psicológicos: Estos incluyen aspectos emocionales y cognitivos que pueden influir en el deseo sexual, la excitación y el orgasmo. Los factores psicológicos pueden incluir estrés, ansiedad, depresión, problemas de relación, experiencias pasadas negativas o traumáticas, y baja autoestima.

3. Factores Sociales: Estos incluyen las normas culturales, las actitudes sociales hacia la sexualidad, los roles de género y las expectativas sociales sobre el comportamiento sexual. También pueden incluir factores como la educación sexual, la disponibilidad de pareja y los factores ambientales.

Es importante tener en cuenta que la sexualidad es un proceso complejo e individual que puede verse afectado por una combinación de estos factores. Si una persona experimenta problemas sexuales, es recomendable buscar asesoramiento médico o terapéutico para identificar y abordar los factores subyacentes.

La hemorragia putaminal es un tipo específico de hemorragia intracraneal, que se refiere a un sangrado en el interior del cráneo. Más concretamente, la hemorragia putaminal se produce en la región putamen del cerebro, que es parte del núcleo lenticular y está ubicada en los ganglios basales.

Este tipo de hemorragia suele ser el resultado de una ruptura de vasos sanguíneos anómalos (como malformaciones vasculares) o debilitados (por ejemplo, como consecuencia de la hipertensión arterial no controlada), y puede causar diversos síntomas neurológicos, dependiendo de su localización y magnitud. Entre los síntomas más comunes se encuentran: debilidad o parálisis de un lado del cuerpo, dificultad para el habla (disartria), confusión, déficits cognitivos, cambios en la visión y dolor de cabeza intenso.

El tratamiento de una hemorragia putaminal dependerá de su causa subyacente, gravedad y evolución. Puede incluir medidas de soporte, control de los síntomas, cirugía para evacuar el hematoma y anticoagulantes o antiplaquetarios en caso de ser necesario. La rehabilitación también desempeña un papel fundamental en la recuperación de las funciones neurológicas afectadas.

Las encefalopatías se definen como condiciones o trastornos que involucran cambios generalizados y globales en la estructura y función cerebrales. Estos cambios a menudo son reversibles si se tratan las causas subyacentes, pero en algunos casos pueden ser permanentes o incluso letales.

Las encefalopatías pueden resultar de diversas causas, que incluyen infecciones, falta de oxígeno (anoxia), trastornos metabólicos, exposición a toxinas y determinadas condiciones médicas subyacentes. Algunos ejemplos comunes de encefalopatías incluyen la encefalopatía hipóxica-isquémica (que puede ocurrir después de un paro cardíaco o ahogamiento), la encefalopatía hepática (asociada con enfermedad hepática grave), la encefalopatía hipertensiva (que puede ocurrir cuando la presión arterial se eleva drásticamente) y la encefalopatía Wernicke-Korsakoff (que está relacionada con el alcoholismo crónico).

Los síntomas de las encefalopatías varían ampliamente, dependiendo de la causa subyacente y la gravedad del daño cerebral. Pueden incluir confusión, desorientación, pérdida de memoria, cambios de personalidad, dificultad para hablar o tragar, movimientos musculares anormales e incluso coma. El tratamiento implica abordar la causa subyacente de la encefalopatía y proporcionar apoyo de soporte para mantener las funciones corporales mientras el cerebro se recupera.

En términos médicos, una mutación se refiere a un cambio permanente y hereditable en la secuencia de nucleótidos del ADN (ácido desoxirribonucleico) que puede ocurrir de forma natural o inducida. Esta alteración puede afectar a uno o más pares de bases, segmentos de DNA o incluso intercambios cromosómicos completos.

Las mutaciones pueden tener diversos efectos sobre la función y expresión de los genes, dependiendo de dónde se localicen y cómo afecten a las secuencias reguladoras o codificantes. Algunas mutaciones no producen ningún cambio fenotípico visible (silenciosas), mientras que otras pueden conducir a alteraciones en el desarrollo, enfermedades genéticas o incluso cancer.

Es importante destacar que existen diferentes tipos de mutaciones, como por ejemplo: puntuales (sustituciones de una base por otra), deletérreas (pérdida de parte del DNA), insercionales (adición de nuevas bases al DNA) o estructurales (reordenamientos más complejos del DNA). Todas ellas desempeñan un papel fundamental en la evolución y diversidad biológica.

La hidrocefalia es una afección médica en la cual se acumula un exceso de líquido cefalorraquídeo (LCR) en los espacios (ventrículos) dentro del cerebro. Este aumento de presión puede comprimir el tejido cerebral y dañar el cerebro.

El LCR es un líquido claro que circula alrededor del cerebro y la médula espinal, proporcionando protección y manteniendo en equilibrio la presión dentro de estas áreas. Cualquier condición que cause un bloqueo en el flujo normal del LCR o un aumento en la producción de este líquido puede resultar en hidrocefalia.

Los síntomas varían dependiendo de la edad del paciente y la causa subyacente, pero pueden incluir agrandamiento de la cabeza (en bebés), vómitos, irritabilidad, falta de apetito, ojos mirando hacia abajo (signo de "solenoide"), alteraciones en el crecimiento y desarrollo, dolores de cabeza, dificultad para caminar, convulsiones y cambios en el comportamiento o personalidad.

El tratamiento generalmente involucra la derivación quirúrgica del exceso de líquido cerebral Spencer a otro lugar del cuerpo donde pueda ser absorbido, como por ejemplo, los ventrículos peritoneales (derivación ventriculoperitoneal). En algunos casos, se pueden utilizar dispositivos endoscópicos para crear nuevos caminos para el flujo del LCR. El pronóstico depende de la causa subyacente y la gravedad de los daños cerebrales.

La velocidad del flujo sanguíneo se refiere a la rapidez con que la sangre fluye a través de los vasos sanguíneos, generalmente medida en unidades de distancia por tiempo, como centímetros por segundo (cm/s). La velocidad del flujo sanguíneo está determinada por varios factores, incluyendo el volumen cardíaco (el volumen de sangre bombeado por el corazón con cada latido), la resistencia vascular (la resistencia al flujo sanguíneo en los vasos sanguíneos) y la viscosidad sanguínea (la resistencia interna de la sangre a fluir).

La velocidad del flujo sanguíneo es un parámetro hemodinámico importante que puede influir en la oxigenación y nutrición de los tejidos, así como en la eliminación de desechos metabólicos. La velocidad del flujo sanguíneo también puede afectar la distribución y el transporte de fármacos en el cuerpo.

La medición directa de la velocidad del flujo sanguíneo puede ser difícil y requiere técnicas especializadas, como ultrasonido Doppler o resonancia magnética. Sin embargo, se pueden estimar indirectamente a partir de otras medidas hemodinámicas, como el volumen cardíaco y la resistencia vascular.

Un hematoma subdural es una acumulación de sangre entre la duramadre, que es la membrana externa más interna del cráneo, y la superficie del cerebro. Este espacio se denomina espacio subdural. Los hematomas subdurales suelen ser el resultado de lesiones en la cabeza que causan roturas en los vasos sanguíneos. La sangre se acumula lentamente y puede comprimir el cerebro, lo que provoca diversos síntomas neurológicos, como dolor de cabeza, confusión, convulsiones o incluso coma e incluso la muerte en casos graves. El tratamiento puede incluir cirugía para aliviar la presión sobre el cerebro y detener la hemorragia.

La hemorragia retrobulbar es un tipo específico de hemorragia ocular que se produce dentro del espacio retrobulbar, que está situado entre la capa más externa del globo ocular (esclerótica) y el revestimiento fibroso que rodea los músculos extraoculares (la cápsula de Tenón). Esta área contiene tejidos blandos, vasos sanguíneos, nervios y grasa.

La hemorragia retrobulbar puede ocurrir como resultado de traumatismos o lesiones en el ojo, cirugías oculares complicadas, especialmente durante la cirugía de cataratas, o condiciones médicas subyacentes que afectan la coagulación sanguínea. Los síntomas más comunes incluyen pérdida repentina e indolora de la visión, dolor ocular, protuberancia del globo ocular y enrojecimiento conjuntival. La gravedad de los síntomas depende de la cantidad de sangrado y la presión que ejerce sobre el nervio óptico y los tejidos circundantes.

El tratamiento de la hemorragia retrobulbar generalmente implica monitoreo y control de los síntomas, ya que la mayoría de estos episodios se resuelven por sí solos con el tiempo. Sin embargo, en algunos casos graves o persistentes, puede ser necesaria una intervención quirúrgica para drenar la sangre acumulada y aliviar la presión sobre los tejidos oculares. La prevención de futuras hemorragias retrobulbares puede involucrar el control de factores de riesgo, como la hipertensión arterial y la diabetes mellitus, así como una evaluación cuidadosa de los medicamentos anticoagulantes o antiplaquetarios antes de realizar procedimientos quirúrgicos.

La revascularización cerebral es un procedimiento quirúrgico o endovascular que se realiza para restaurar el flujo sanguíneo a las áreas del cerebro que han sido privadas de oxígeno y nutrientes como resultado de la oclusión o estenosis (apretamiento) de las arterias cerebrales. Esto puede deberse a diversas condiciones, como la enfermedad arterial coronaria, la disección arterial o la enfermedad cerebrovascular.

Existen varios tipos de procedimientos de revascularización cerebral, que incluyen:

1. Angioplastia y stenting: Se introduce un catéter delgado a través de una arteria en el brazo o la pierna hasta llegar a la arteria cerebral afectada. Luego, se infla un pequeño balón en la arteria para abrirla y colocar un stent (un tubo metálico flexible) para mantenerla abierta.

2. Cirugía de bypass cerebral: Se crea una nueva ruta para el flujo sanguíneo alrededor del bloqueo arterial. Esto implica conectar una arteria sana a una vena o arteria más pequeña que alimente la zona del cerebro privada de sangre.

3. Endarterectomía: Se realiza una incisión en la arteria afectada para eliminar la placa y los depósitos grasos que bloquean el flujo sanguíneo.

4. Trasplante de células madre: Aunque aún se encuentra en fases de investigación, este procedimiento implica inyectar células madre en el cerebro con la esperanza de que estas células puedan regenerarse y formar nuevos vasos sanguíneos.

La revascularización cerebral puede ayudar a prevenir daños adicionales al cerebro, mejorar los síntomas y aumentar la calidad de vida de los pacientes con enfermedades cerebrovasculares como la enfermedad de Alzheimer, la demencia vascular o la enfermedad de Parkinson. Sin embargo, estos procedimientos conllevan riesgos y complicaciones potenciales, por lo que es importante evaluar cuidadosamente los beneficios y riesgos antes de tomar una decisión.

El volumen sanguíneo es la cantidad total de sangre presente en el sistema circulatorio de un individuo. Se mide generalmente en mililitros (ml) o litros (L). Es un parámetro hemodinámico importante que puede ser utilizado para evaluar el estado de hidratación, las condiciones cardiovasculares y renales, así como la respuesta al tratamiento en diversas patologías.

El volumen sanguíneo se distribuye desigualmente entre los diferentes compartimentos corporales: aproximadamente el 80% se encuentra dentro del espacio intravascular (compartimento sanguíneo), mientras que el restante 20% se localiza en el espacio extravascular (compartimento intersticial y compartimento intracelular).

Existen diferentes métodos para medir el volumen sanguíneo, incluyendo la determinación de la concentración de un marcador sanguíneo antes y después de su introducción en el torrente circulatorio, o el uso de técnicas de imagen médica como la gammagrafía o la resonancia magnética nuclear.

La embolización terapéutica es un procedimiento médico intervencionista que involucra la oclusión intencional de los vasos sanguíneos o las vías linfáticas para tratar una variedad de condiciones patológicas. Este proceso implica inyectar deliberadamente un agente bloqueador, como microcoils, partículas, pegamentos líquidos o espumas, a través de un catéter fino hasta el sitio objetivo dentro del sistema vascular.

El propósito de la embolización terapéutica puede ser:

1. Controlar el sangrado: en casos de hemorragia aguda o crónica, como resultado de traumatismos, cirugías, tumores o malformaciones vasculares, la embolización puede ayudar a detener el flujo sanguíneo hacia el sitio lesionado.

2. Reducir el tamaño del tumor: antes o después de la radioterapia o quimioterapia, la embolización se utiliza para reducir el suministro de sangre a los tumores sólidos, lo que puede provocar su necrosis y disminución.

3. Tratar las malformaciones vasculares: en pacientes con malformaciones arteriovenosas (MAV), la embolización se utiliza para bloquear el flujo sanguíneo anormal y prevenir complicaciones hemorrágicas o síntomas relacionados con la isquemia.

4. Controlar las fugas de líquido: en pacientes con derrame pleural o ascitis refractarios al tratamiento médico, la embolización del conducto torácico o el sistema linfático peritoneal puede ayudar a controlar la acumulación excesiva de líquido.

5. Tratar las aneurismas: en algunos casos, la embolización se utiliza para excluir aneurismas cerebrales o viscerales del flujo sanguíneo y prevenir el riesgo de ruptura.

La embolización es una técnica mínimamente invasiva que requiere la inserción de un catéter a través de una arteria femoral, seguida por la navegación hasta el sitio objetivo bajo fluoroscopia o angiografía. Una vez allí, se administra un agente embolizante (como microesferas, coils, líquidos) para bloquear el vaso sanguíneo y lograr el objetivo terapéutico deseado.

Craneotomía es un procedimiento quirúrgico en el cual se realiza un abertura o hueco en el cráneo para acceder al cerebro. Este procedimiento se lleva a cabo por diversas razones, como por ejemplo: aliviar la presión intracraneal, extraer tumores cerebrales, reparar vasos sanguíneos rotos o lesionados en el cerebro, o colocar dispositivos para monitorear o estimular el cerebro.

La cirugía comienza con una incisión en el cuero cabelludo y la separación de los tejidos blandos del cráneo. Después, se realiza un agujero en el hueso craneal utilizando herramientas especiales, como taladros o sierras. El hueso se retira y se coloca a un lado, formando una "tapa" que puede volver a colocarse después de la cirugía.

La craneotomía requiere una planificación cuidadosa y precisión quirúrgica para minimizar el riesgo de complicaciones, como infección, sangrado o daño al cerebro. Después de la cirugía, es posible que se necesiten medicamentos para controlar el dolor y prevenir la infección. La recuperación puede variar dependiendo del tipo y la extensión de la cirugía, pero generalmente requiere un tiempo de reposo en cama y limitar las actividades durante varias semanas o meses.

La ventriculografía cerebral es un procedimiento de diagnóstico por imágenes que involucra la introducción de un medio de contraste en los ventrículos cerebrales, los espacios llenos de líquido dentro del cerebro. Esto permite obtener imágenes detalladas de estas estructuras y detectar cualquier anomalía o enfermedad asociada, como tumores, hidrocefalia o hemorragias.

El procedimiento generalmente se realiza mediante una punción lumbar, en la cual se inserta una aguja especial en el espacio entre las vértebras lumbares para acceder a los ventrículos cerebrales. Una vez que se introduce el medio de contraste, se toman radiografías o imágenes de resonancia magnética para observar su trayecto y la anatomía de los ventrículos.

Es importante señalar que este procedimiento se utiliza con menor frecuencia en la actualidad, ya que existen técnicas de imagenología menos invasivas y más seguras, como la tomografía computarizada y la resonancia magnética, que pueden proporcionar imágenes similares sin la necesidad de introducir un medio de contraste.

La dominancia cerebral, en términos médicos, se refiere al funcionamiento lateralizado del cerebro, donde un lado del cerebro es más activo o especializado en ciertas funciones cognitivas que el otro. Aunque ambos hemisferios cerebrales trabajan juntos para coordinar la mayoría de las actividades mentales y físicas, generalmente se observa que un lado es predominante en determinadas habilidades.

La dominancia cerebral izquierda está asociada típicamente con habilidades analíticas, lógicas, verbales y secuenciales. Las personas con esta dominancia suelen ser más fuertes en el procesamiento del lenguaje, la comprensión de reglas y la resolución de problemas matemáticos. Por otro lado, la dominancia cerebral derecha se relaciona a menudo con habilidades creativas, espaciales, intuitivas y holísticas. Estas personas suelen ser más talentosas en tareas visuales, artísticas y de pensamiento conceptual.

Es importante destacar que la dominancia cerebral no es un rasgo fijo y rígido; ambos hemisferios pueden contribuir a diversas funciones cognitivas y adaptarse según las demandas cambiantes del entorno. Además, algunas personas pueden ser mixtas o mostrar una dominancia cerebral lateralizada en función de la tarea específica que estén realizando.

En resumen, la dominancia cerebral es un concepto médico que describe el sesgo funcional del cerebro hacia un hemisferio u otro en el procesamiento de información y habilidades cognitivas específicas.

La Hemorragia Encefálica Traumática (HET), también conocida como Contusión Intracraneal, es un tipo de lesión cerebral traumática que ocurre cuando los vasos sanguíneos dentro del cerebro se dañan y comienzan a sangrar como resultado directo de una lesión traumática en la cabeza. Esto puede suceder cuando el cerebro se sacude violentamente dentro del cráneo, lo que hace que los vasos sanguíneos se estiren más allá de su límite y se rompan.

La sangre se acumula entonces en los espacios entre las células cerebrales (espacio subaracnoideo) o dentro del tejido cerebral mismo, formando coágulos sanguíneos que aumentan la presión intracraneal y comprimen el tejido cerebral circundante. Esto puede dañar gravemente las células cerebrales y provocar diversas consecuencias neurológicas, según la gravedad de la hemorragia y la ubicación de la lesión.

Los síntomas más comunes de una HET incluyen dolores de cabeza intensos, náuseas y vómitos, mareos, visión borrosa, problemas de equilibrio, dificultad para hablar o comprender el lenguaje, confusión, somnolencia extrema, convulsiones e incluso coma en casos graves. El tratamiento inmediato y especializado es crucial para minimizar los daños y promover la recuperación.

El choque hemorrágico es una situación médica potencialmente mortal que ocurre cuando se pierde una gran cantidad de sangre en un período de tiempo corto. Esto puede deberse a traumatismos graves, cirugía extensa o trastornos de la coagulación. La pérdida de sangre hace que el volumen sanguíneo disminuya rápidamente, lo que reduce el suministro de oxígeno a los órganos vitales.

Los síntomas del choque hemorrágico incluyen presión arterial baja, pulso rápido y débil, respiración rápida y superficial, piel fría y húmeda, confusión o pérdida del conocimiento. El tratamiento inmediato implica reponer el volumen sanguíneo con líquidos intravenosos y transfusiones de sangre, controlar la hemorragia y tratar cualquier causa subyacente. Si no se trata a tiempo, el choque hemorrágico puede llevar a la falla orgánica múltiple y la muerte.

La cepa de rata Sprague-Dawley es una variedad comúnmente utilizada en la investigación médica y biológica. Fue desarrollada por los criadores de animales de laboratorio Sprague y Dawley en la década de 1920. Se trata de un tipo de rata albina, originaria de una cepa de Wistar, que se caracteriza por su crecimiento relativamente rápido, tamaño grande y longevidad moderada.

Las ratas Sprague-Dawley son conocidas por ser genéticamente diversas y relativamente libres de mutaciones espontáneas, lo que las hace adecuadas para un amplio espectro de estudios. Se utilizan en una variedad de campos, incluyendo la toxicología, farmacología, fisiología, nutrición y oncología, entre otros.

Es importante mencionar que, aunque sean comúnmente empleadas en investigación, las ratas Sprague-Dawley no son representativas de todas las ratas o de los seres humanos, por lo que los resultados obtenidos con ellas pueden no ser directamente aplicables a otras especies.

Los fármacos neuroprotectores son agentes terapéuticos que se utilizan para defender, preservar o salvaguardar las neuronas y la integridad de su función frente a diversas lesiones o enfermedades del sistema nervioso. Estos fármacos actúan mediante diversos mecanismos, como la reducción de la excitotoxicidad (por ejemplo, inhibiendo los receptores de glutamato), la neutralización de especies reactivas de oxígeno y nitrógeno, la modulación de las vías antiapoptóticas o la estabilización de las membranas neuronales.

El objetivo principal de los fármacos neuroprotectores es minimizar los daños celulares y promover la supervivencia de las neuronas, lo que puede resultar en una menor discapacidad y un mejor pronóstico funcional para los pacientes con diversas afecciones neurológicas y psiquiátricas, como lesiones cerebrales traumáticas, accidentes cerebrovasculares, enfermedad de Parkinson, esclerosis múltiple, Alzheimer y depresión.

Aunque hay varios fármacos neuroprotectores en ensayos clínicos y algunos se utilizan de forma rutinaria en la práctica clínica, su eficacia sigue siendo objeto de debate y estudio. La identificación y validación de nuevos objetivos moleculares y el desarrollo de fármacos más específicos y eficaces seguirán siendo áreas importantes de investigación en el campo de la neuroprotección.

La trombosis intracraneal se refiere a la formación de un coágulo sanguíneo (trombos) dentro de los vasos sanguíneos del cerebro. Este evento puede ocurrir en cualquier parte del sistema vascular cerebral, y la gravedad de la afección depende generalmente de la ubicación y el tamaño del coágulo.

La formación de un trombo puede ser el resultado de una variedad de factores, incluyendo enfermedades que causan un estado de hipercoagulabilidad (aumento de la tendencia a la formación de coágulos), lesiones en el revestimiento interno de los vasos sanguíneos (endotelio), lentitud o alteraciones en el flujo sanguíneo, o daño al endotelio debido a diversas causas.

La trombosis intracraneal puede conducir a una variedad de complicaciones, dependiendo de la ubicación y el tamaño del coágulo. Si el coágulo ocurre en una arteria, puede dar lugar a un accidente cerebrovascular isquémico (ictus), que se caracteriza por la interrupción del suministro de sangre y oxígeno al tejido cerebral, lo que provoca daño cerebral o muerte celular. Por otro lado, si el trombo se forma en una vena, puede dar lugar a una trombosis sinusal o trombosis venosa cerebral (TVC), que pueden causar edema cerebral (hinchazón del tejido cerebral) y aumento de la presión intracraneal.

El tratamiento de la trombosis intracraneal depende de la causa subyacente, la ubicación y el tamaño del coágulo, y la gravedad de los síntomas. Puede incluir medicamentos anticoagulantes o trombolíticos (que disuelven los coágulos), procedimientos endovasculares (como la trombectomía mecánica) o cirugías. En algunos casos, el tratamiento puede requerir un enfoque multidisciplinario que involucre a especialistas en neurología, neurorradiología, neurocirugía y cuidados intensivos.

El cerebro es el órgano más grande y complejo del sistema nervioso central en los humanos y la mayoría de los animales. Se encuentra protegido dentro de la cavidad craneal y es responsable de controlar una variedad de funciones corporales importantes, incluyendo la conciencia, el pensamiento, la memoria, la percepción, el lenguaje, la emoción, el movimiento, la regulación de la respiración y la circulación, y la respuesta al estrés.

El cerebro se divide en tres partes principales: el tronco encefálico, el cerebelo y el cerebro cortical o telencefalon. El tronco encefálico es la parte más baja del cerebro y conecta el cerebro con la médula espinal. Es responsable de controlar las funciones vitales como la respiración, la frecuencia cardíaca y la presión arterial.

El cerebelo se encuentra por encima del tronco encefálico y es responsable del control del movimiento y la coordinación. El cerebro cortical o telencefalon es la parte más grande del cerebro y está dividido en dos hemisferios cerebrales derecho e izquierdo. Cada hemisferio se subdivide en cuatro lóbulos: el lóbulo frontal, el lóbulo parietal, el lóbulo temporal y el lóbulo occipital.

El cerebro está compuesto por células nerviosas llamadas neuronas y células de soporte llamadas glía. Las neuronas transmiten señales eléctricas y químicas entre sí, lo que permite la comunicación y la integración de información en todo el cerebro. La glía proporciona soporte estructural y nutricional a las neuronas y participa en la protección del cerebro contra lesiones y enfermedades.

El cerebro es un órgano altamente plástico, lo que significa que puede cambiar y adaptarse a lo largo de la vida en respuesta a diferentes experiencias y entornos. La plasticidad cerebral permite al cerebro aprender nuevas habilidades, formar recuerdos y adaptarse a lesiones o enfermedades. Sin embargo, el cerebro también es vulnerable a lesiones y enfermedades, como los traumatismos craneoencefálicos, las enfermedades neurodegenerativas y los trastornos mentales.

La barrera hematoencefálica es una interfaz selectivamente permeable que separa la sangre del sistema circulatorio y el líquido cefalorraquídeo (LCR) en el sistema nervioso central (SNC). Está compuesta principalmente por células endoteliales especializadas que forman los vasos sanguíneos del cerebro, junto con otras células como astrocitos y pericitos.

Su función principal es proteger el cerebro de toxinas y patógenos presentes en la sangre, así como regular el intercambio de nutrientes, gases y otros solutos necesarios para el correcto funcionamiento del tejido nervioso. La barrera hematoencefálica regula estrictamente la entrada de sustancias al SNC, permitiendo el paso de moléculas pequeñas e hidrofílicas, mientras que restringe el acceso a moléculas más grandes, lipofílicas o cargadas.

Esta selectividad es crucial para mantener un entorno homeostático dentro del SNC y preservar su integridad funcional. Sin embargo, también puede dificultar la administración de fármacos al cerebro, ya que muchos compuestos terapéuticos no pueden cruzar la barrera hematoencefálica en concentraciones suficientes para ejercer sus efectos deseados. Esto representa un desafío importante en el desarrollo de nuevas estrategias y fármacos dirigidos al tratamiento de diversas enfermedades neurológicas y psiquiátricas.

La hipertensión intracraneal (HIC) se refiere a un aumento persistente o continuamente alto en la presión dentro del cráneo. La presión normal generalmente está por debajo de 15-20 mmHg. La HIC se diagnostica cuando la presión intracraneal (PIC) es superior a 20 mmHg y se mantiene alta durante al menos 5 minutos.

La HIC puede ser clasificada como:

1. Hipertensión Intracraneal Idiopática o Primaria: Esta es la forma más común de hipertensión intracraneal y se diagnostica después de excluir otras causas conocidas. Por lo general, afecta a personas jóvenes, especialmente mujeres en edad fértil.

2. Hipertensión Intracraneal Secundaria: Esta forma es menos común y ocurre como resultado directo de una lesión cerebral, infección, tumor, inflamación u otras afecciones médicas subyacentes.

Los síntomas más comunes de la hipertensión intracraneal incluyen dolores de cabeza severos y recurrentes, especialmente en la mañana; visión borrosa o doble; zumbido en los oídos (tinnitus); mareos; náuseas y vómitos; dificultad para concentrarse; pérdida de memoria a corto plazo; cambios de personalidad e irritabilidad.

El tratamiento depende de la causa subyacente. En casos de hipertensión intracraneal idiopática, el objetivo es reducir la presión cerebral y proteger la visión. Se pueden recetar medicamentos para disminuir la producción de líquido cefalorraquídeo o para ayudar a drenarlo. En algunos casos, se puede considerar una derivación lumbar permanente o un stent cerebral. La cirugía también puede ser necesaria si hay un tumor o una lesión que cause el aumento de la presión intracraneal.

La hipoxia encefálica se refiere a una condición médica en la cual el cerebro no recibe suficiente oxígeno para funcionar normalmente. La privación de oxígeno al cerebro puede ser causada por varios factores, como una baja concentración de oxígeno en la sangre (hipoxemia), un flujo sanguíneo insuficiente al cerebro (isquemia) o una combinación de ambos.

La hipoxia encefálica puede provocar una variedad de síntomas, desde leves (como confusión y dificultad para concentrarse) hasta graves (como convulsiones, coma e incluso la muerte). El daño cerebral causado por la hipoxia encefálica puede ser reversible o irreversible, dependiendo de la duración y la gravedad de la privación de oxígeno.

La hipoxia encefálica puede ser el resultado de una variedad de afecciones médicas, como asfixia, ahogamiento, paro cardíaco, anemia grave, intoxicación por monóxido de carbono, insuficiencia respiratoria aguda y algunas enfermedades neurológicas. El tratamiento de la hipoxia encefálica generalmente implica restaurar el flujo de oxígeno al cerebro lo antes posible, mediante técnicas de reanimación cardiopulmonar (RCP) y/o ventilación mecánica asistida. En algunos casos, se pueden requerir medicamentos o cirugía para tratar la causa subyacente de la hipoxia encefálica.

La Escala de Coma de Glasgow (GCS, por sus siglas en inglés) es un sistema ampliamente utilizado en la medicina de emergencia y cuidados intensivos para evaluar el nivel de consciencia y la gravedad de una lesión cerebral. Fue desarrollada en 1974 por los neurocirujanos británicos Graham Teasdale y Bryan J. Jennett.

La escala consta de tres parámetros principales:

1. Respuesta a los estímulos verbales (V): evaluando la capacidad del paciente para obedecer comandos, orientación, confusión y palabras incoherentes o ausencia total de respuesta verbal. Se puntúa de 1 a 5, donde 1 indica ninguna respuesta y 5 indica una conversación coherente.

2. Respuesta a los estímulos motrices (M): evaluando la capacidad del paciente para seguir órdenes o retirar miembros en respuesta a un estímulo doloroso. Se puntúa de 1 a 6, donde 1 indica ninguna respuesta y 6 indica que el movimiento es normal.

3. Estado de los ojos (E): evaluando la apertura espontánea o en respuesta a un estímulo verbal o doloroso. Se puntúa de 1 a 4, donde 1 indica ausencia total de apertura y 4 indica apertura espontánea.

La puntuación total se obtiene sumando los valores de V, M y E, con un rango entre 3 y 15. Cuanto menor es la puntuación, más grave es el estado de coma del paciente. Una puntuación inferior a 8 generalmente indica un estado de coma profundo o inconsciencia.

La GCS se ha convertido en una herramienta importante para los profesionales médicos al evaluar y monitorizar la gravedad de las lesiones cerebrales, así como para tomar decisiones sobre el tratamiento y el pronóstico del paciente.

La angiografía por resonancia magnética (ARM) es una técnica de imagenología que combina el uso de la resonancia magnética (RM) y las propiedades vasculares del contraste para producir imágenes detalladas de los vasos sanguíneos en el cuerpo. Durante un procedimiento de ARM, se administra un agente de contraste intravenoso al paciente y luego se utilizan ondas de radio y campos magnéticos para detectar los cambios en el campo magnético que ocurren cuando las protones del agente de contraste se alinean con el campo magnético. Estos cambios se convierten en señales electrónicas, que se procesan para producir imágenes detalladas de los vasos sanguíneos.

La ARM es una técnica no invasiva y no utiliza radiación como la angiografía convencional. Es particularmente útil en la evaluación de lesiones vasculares cerebrales, aneurismas, estenosis (estrechamiento) de las arterias y tumores vasculares. También se puede usar para planificar procedimientos terapéuticos, como la endovascular o la cirugía vascular abierta.

En resumen, la angiografía por resonancia magnética es una técnica de imagenología no invasiva que utiliza campos magnéticos y ondas de radio para producir imágenes detalladas de los vasos sanguíneos en el cuerpo. Es útil en la evaluación y planificación del tratamiento de diversas afecciones vasculares.

Una hemorragia cerebral (también, hemorragia intracerebral, ICH) es un subtipo de hemorragia intracraneal producida en el ... producida especialmente por la hemorragia cerebral y por la embolia cerebral, que es el accidente que ocurre cuando un vaso ... Se trata de una hemorragia intra-axial, es decir, una que se produce dentro del tejido cerebral[1]​ y no fuera de él. La otra ... Información de hemorragia cerebral en Headway Wikimedia Commons alberga una categoría multimedia sobre Neurotrauma. Datos: ...
El término hemorragia cerebral hereditaria con amiloidosis (HCHA o HCHWA) alude a un grupo de trastornos neurológicos raros ... lo que ocasiona hemorragia intracraneana, alteraciones neurovasculares no hemorrágicas (ictus), deficiencias neurológicas ... Hereditary cerebral hemorrhage with amyloidosis. http://www.orpha.net/consor/cgi-bin/OC_Exp.php?Expert=85458 Hereditary ... https://ghr.nlm.nih.gov/condition/hereditary-cerebral-amyloid-angiopathy Datos: Q10992004 (Wikipedia:Fusionar, Wikipedia: ...
Hemorragia cerebral. Embolia cerebral. Accidente isquémico transitorio. Tumor cerebral. Meningitis. Esclerosis múltiple. Lesión ... Algunas de las más habituales son:[2]​ Parálisis cerebral. ...
Kuba Moczyk (22), boxeador polaco; hemorragia cerebral.[296]​ Ángel Limeres, dirigente deportivo español; cáncer.[297]​ Juanita ... derrame cerebral y paro respiratorio (n. 1962).[102]​ Miguel Ángel Pérez López, periodista y ejecutivo de medios mexicano.[103 ... derrame cerebral (n. 1967).[386]​ Personas relevantes que fallecieron en el accidente del Vuelo 2933 de LaMia:[387]​ Renan ... tumor cerebral (n. 1974).[6]​ Juan Javier Salazar (61), artista plástico peruano; infarto (n. 1955).[7]​ Jorge von Horoch (75 ...
... hemorragia cerebral.[137]​ Diego Rísquez Cupello (68), comunicólogo y cineasta venezolano; tumor cerebral (n. 1949).[138]​ ... complicaciones de hemorragia cerebral.[160]​ Edwin Hawkins (74), cantante, pianista y compositor estadounidense; cáncer de ... tumor cerebral.[37]​ Rob Picciolo (64), entrenador estadounidense de béisbol (n. 1953).[38]​ Paco Pons Capó (88), periodista ... complicaciones de derrame cerebral (n. 1953).[186]​ Javiera Muñoz (40), cantante sueca (n. 1977).[187]​ Luis Beltrán Pérez ...
... hemorragia cerebral.[408]​ Francis Walmsley (91), obispo católico británico.[409]​ Ruzan Alaverdyan (71), arquitecta armenia.[ ... Fallece un futbolista brasileño de 20 años por un tumor cerebral. Muere Bruce McCandless, primer astronauta en flotar sin ... tumor cerebral (n. 1997).[324]​ Bruce McCandless II (80), aviador, oficial del ejército y astronauta estadounidense (n. 1937).[ ... tumor cerebral (n. 1936).[199]​ André Haddad (en) (87), patriarca emérito grecomelquita libanés (n. 1930).[200]​ Dan Johnson ( ...
... hemorragia cerebral.[182]​ José Antonio Alcacer Garmedia (41), dibujante e ilustrador español (n. 1977)[183]​ Antonio César ... tumor cerebral (n. 1935).[195]​ Teresa Auserón (55), música y activista social española (n. 1962)[196]​ José Enrique Ayarra (80 ... edema cerebral.[188]​ Benny Fredriksson (58), actor y director de teatro sueco; suicidio (n. 1959).[189]​ Carlos García ... derrame cerebral.[31]​ Billy Herrington (48), actor pornográfico estadounidense; accidente de tráfico (n. 1969).[32]​ Robert ...
... hemorragia cerebral (n. 1939).[60]​ Rubén Santiago (78), gastrónomo venezolano; infarto (n. 1943).[61]​ Armando Scannone (99), ... el jugador español de rugby que sufrió graves lesiones cerebrales al caer desde varios metros de altura». El Mundo. Consultado ... derrame cerebral (n. 1989).[26]​ Manuel Jiménez Rodríguez (79), futbolista español (n. 1941).[27]​ Sławomir Majusiak (57), ...
... hemorragia cerebral (n. 1959).[412]​ Valentín Jorge Sánchez (72), futbolista español (n. 1951).[413]​ Bud Shuster (91), ... derrame cerebral (n. 1930).[557]​ Wee Willie Harris (90), cantante de rock británico (n. 1933).[558]​ Liss Hernández (29), ... cáncer cerebral (n. 1966).[243]​ Hervé Temime (65), abogado francés (n. 1957).[244]​ Rick Wolff (71), escritor, editor, locutor ... y beisbolista estadounidense; cáncer cerebral (n. 1951).[245]​ Henri-Jean Arnaud (94), político francés (n. 1928).[246]​ Ilias ...
... hemorragia cerebral (n. 1936).[26]​ Namdeo Dhondo Mahanor (80), poeta indio (n. 1942).[27]​ Mark Margolis (83), actor ... ganador del Bafta famoso por el tema de la Copa del Mundo de 2006 muere a los 86 años después de una hemorragia cerebral». ... cáncer cerebral (n. 2001).[141]​ Bobby Baun (86), jugador y entrenador de hockey sobre hielo canadiense (n. 1936).[142]​ ... derrame cerebral (n. 1933).[272]​ Bob Barker (99), actor y presentador de televisión estadounidense (n. 1923).[273]​ Carl Cohen ...
... hemorragia cerebral (n. 1926).[382]​ José López Lengo (89), abogado, cronista y periodista español (n. 1927).[383]​ Ignacio ... hemorragia cerebral (n. 1931).[411]​ Eliezer Spiegel (95), futbolista israelí (n. 1922).[412]​ Zdeněk Šreiner (en) (63), ... cáncer cerebral (n. 1962).[331]​ Juan Luis Maurás Novella (95), político y empresario chileno (n. 1922).[332]​ Blanca Rosita ... edema cerebral.[346]​ Dimitri Sjöberg (37), cantante de tango finlandés.[347]​ Miguel Suárez (65), beisbolista mexicano.[348]​ ...
... aneurisma cerebral (n. 1978).[50]​ Sardar Buta Singh (86), político indio; hemorragia cerebral (n. 1934).[51]​ Subiakto ... hemorragia cerebral (n. 1936).[28]​ Jean Panisse (92), actor francés; coronavirus (n. 1928).[29]​ Sun Qiaolu (25), actriz china ... derrame cerebral (n. 1941).[136]​ Miguel Ángel Puppo (70), futbolista y entrenador uruguayo (n. 1950).[137]​ Gordon Renwick (85 ... tumor cerebral (n. 1967).[697]​ Andrej Hryc (71), actor eslovaco; leucemia (n. 1949).[698]​ Abdul Hamid Mahmud (79), militar ...
... hemorragia cerebral (n. 1942).[10]​ Nick Gordon, pareja de Bobbi Kristina Brown (n. 1990). John Baldessari (88), artista ... cáncer cerebral (n. 1973).[48]​ Marcel Catinca (56), futbolista rumano (n. 1963).[49]​ Elena Cruz (93), actriz y política ... cáncer cerebral (n. 1952).[55]​ Domingo Pellicer (70), arquitecto y catedrático universitario español (n. 1949).[56]​ Ana ...
... hemorragia cerebral (n. 1930).[339]​ Dimitris Psarianos (72), cantante griego (n. 1948).[340]​ José Ramón Pérez de Lama (93), ... hemorragia cerebral (n. 1933).[152]​ Richard Neely (79), juez estadounidense; cáncer (n. 1941).[153]​ Raúl Pastor (66), torero ... tumor cerebral (n. 1948).[566]​ Humberto Biondi (80), periodista deportivo argentino; cáncer renal (n. 1940).[567]​ Betty ... aneurisma cerebral (n. 1978).[15]​ Jorge Núñez Sánchez (73), escritor, historiador y docente universitario ecuatoriano; cáncer ...
... hemorragia cerebral (n. 1945).[427]​ Travis Roy (45), jugador de hockey sobre hielo, autor y filántropo estadounidense (n. 1975 ... cáncer cerebral (n. 1929).[217]​ Joan Barnett (74), directora de casting y productora ejecutiva de televisión estadounidense (n ... derrame cerebral (n. 1963).[251]​ Henri Noël (83), futbolista y entrenador francés (n. 1936).[252]​ Pollycarpus Priyanto (59), ... derrame cerebral (n. 1939).[395]​ Trevor Adair (59), entrenador de fútbol norirlandés (n. 1961).[396]​ Bobby Ball (76), ...
... hemorragia cerebral (n. 1937).[471]​ Alessandro Alessandroni (en) (92), músico y compositor italiano (n. 1925).[472]​ Jorge ... isquemia cerebral (n. 1940).[83]​ Ángel Matanzo, consejero político español.[84]​ Kurt Moll (78), cantante de ópera alemán (n. ... muerte cerebral.[554]​ Ken Sparks (en) (73), jugador y entrenador de fútbol americano estadounidense; cáncer de próstata (n. ... derrame cerebral (n. 1955).[126]​ Óscar Asiáin Ruiz (en) (68), baloncestista mexicano; cáncer de esófago (n. 1949).[127]​ ...
... hemorragia cerebral (n. 1930).[720]​ Vincent Reffet (36), piloto aéreo y paracaidista francés; accidente durante entrenamiento ...
... hemorragia cerebral (n. 1941).[632]​ Joaquín Farnós Gauchía (86), médico y político español (n. 1935).[633]​ Alan Gel Cordova ( ... aneurisma cerebral (n. 1940).[394]​ Piet van Eijsden (85), tenista neerlandés (n. 1936).[395]​ Lee Evans (74), velocista y ... derrame cerebral (n. 1934).[36]​ Lolly Debattista (91), futbolista maltés (n. 1929).[37]​ Rita Di Giovacchino (74), periodista ... malaria cerebral (n. 1976).[461]​ Joe Beckwith (66), beisbolista estadounidense; cáncer de colon (n. 1955).[462]​ Enrique ...
... hemorragia cerebral (n. 1983).[105]​ José Barea Tejeiro (91), economista y catedrático español (n. 1923).[106]​ Vasu Chanchlani ...
Sufrió una hemorragia cerebral. Murió al día siguiente, el 26 de febrero. Tenía cuatro años. Enrique falleció en parecidas ...
... hemorragia cerebral (n. 1943).[719]​ Myriam Ullens (70), empresaria y coleccionista de arte alemana-belga; asesinato (n. 1952 ... hemorragia cerebral (n. 1938).[347]​ Edward Leavy (93), juez estadounidense (n. 1929).[348]​ Mario Masini (84), cineasta y ... hemorragia cerebral (n. 1947).[265]​ Renán López (83), futbolista y periodista deportivo boliviano (n. 1939).[266]​ Oribe ... hemorragia cerebral (n. 1963).[578]​ Juan Torre (93), dirigente deportivo español (n. 1929).[579]​ Jeffrey Vandergrift (55), ...
... hemorragia cerebral (n. 1927).[238]​ Alejandro Muñoz-Alonso (82), abogado, politólogo, académico y político español (n. 1934).[ ... hemorragia cerebral (n. 1962).[185]​ Sherron Mills (44), baloncestista estadounidense; esclerosis lateral amiotrófica (n. 1971 ... embolia cerebral (n. 1970).[2]​ George Alexandru (ro) (58), actor de cine y teatro rumano (n. 1957).[3]​ Fazu Alieva (83), ... tumor cerebral (n. 1944).[14]​ Daniel Marín (51), actor y músico argentino, neumonía (n. 1964).[15]​ Gilberto Mendes (93), ...
... hemorragia cerebral (n. 1939).[76]​ Raúl Iragorri Montoya (85), político y empresario mexicano; coronavirus (n. 1935).[77]​ ... complicaciones de derrame cerebral (n. 1934).[38]​ Frank Kramer (73), futbolista y presentador de televisión neerlandés (n. ... linfoma cerebral (n. 1941).[154]​ Aleksandr Vitalevich Gordon (88), director, guionista y actor ruso (n. 1931).[155]​ Howard ... cáncer cerebral (n. 1955).[175]​ Siraj Kassam Teli (67), empresario industrial paquistaní (n. 1953).[176]​ Roberto Ulloa (96), ...
Hemorragia cerebral 2.08 % 9.- Enfermedad vascular cerebral 2.01 % 10.- Insuficiencia cardíaca congestiva 1.70 % [61]​ La ...
... hemorragia cerebral (n. 1958).[73]​ María Rostworowski (100), historiadora peruana (n. 1915).[74]​ Alfredo Villalobos Silva, ... tumor cerebral (n. 1938).[202]​ Larry Drake (66), actor estadounidense (n. 1950).[203]​ José María González de la Cruz (72), ... derrame cerebral (n. 1970).[286]​ Johan Cruyff (68), jugador y entrenador neerlandés de fútbol; cáncer de pulmón (n. 1947).[287 ... tumor cerebral (n. 1971).[162]​ Julita Astaburuaga (96), celebridad chilena, cáncer de páncreas (n. 1919).[163]​ John W. Cahn ( ...
... cáncer cerebral (n. 1990).[45]​ Lise Vidal (43), windsurfista olímpica francesa; hemorragia cerebral (n. 1977).[46]​ Giuliano ... Luto en México: murió un futbolista por un derrame cerebral». Ole. Redacción. «Fallece a los 92 años el empresario ... cáncer cerebral (n. 1959).[135]​ Michael Horovitz (85), poeta, editor y traductor británico (n. 1935).[136]​ Smaïn Ibrir (89), ... tumor cerebral (n. 1953).[184]​ George Rhoads (95), pintor, escultor y origamista estadounidense (n. 1926).[185]​ Jehan Sadat ( ...
... leucemia y hemorragia cerebral (n. 1993).[110]​ Julio Miranda (74), político, sindicalista y dirigente deportivo argentino (n. ... hemorragia cerebral (n. 1961).[336]​ Mamady Keïta (70), percusionista guineano (n. 1950).[337]​ Tom Kurvers (58), jugador y ... isquemia cerebral (n. 1932).[284]​ Giacomo Zani (89), director de orquesta y musicólogo italiano; accidente vial (n. 1932).[285 ...
... hemorragia cerebral (n. 1945).[113]​ Benjamin Keough (27), hijo de Lisa Marie Presley (n. 1992). Luis Arias Graziani (94), ... cáncer cerebral (n. 1945).[146]​ Ron Tauranac (95), diseñador de automóviles de competición australiano (n. 1925).[147]​ C. T. ... derrame cerebral (n. 1940).[3]​ José Itamar de Freitas (85), periodista brasileño; coronavirus (n. 1934).[4]​ Beate Grimsrud ( ... aneurisma cerebral (n. 1970).[116]​ Camilo Lorenzo Iglesias (79), obispo católico y químico español (n. 1940).[117]​ Zindzi ...
... derrame cerebral (n. 1974).[469]​ Shahram Abdoli (46), actor iraní; hemorragia cerebral (n. 1976).[470]​ Victor Babiuc (84), ... derrame cerebral (n. 1939).[205]​ Vadim Abdrachitov (78), cineasta ruso; cáncer (n. 1945).[206]​ Yousef Al-Salem (37), ...
... hemorragia cerebral (n. 1967).[134]​ Gonzalo Vega (69), actor mexicano; síndrome mielodisplástico (n. 1946).[135]​ Jaber al- ... tumor cerebral (n. 1969).[125]​ Fernando Alcón (84), empresario e industrial español. Issa Bagayogo (55), músico maliense (n. ... aneurisma cerebral (n. 1975).[68]​ Félix Trigo (84), jurista argentino. Harsh Vardhan (en) (68), político hindú (n. 1947).[69 ... derrame cerebral (n. 1927).[285]​ Benjamin Creme (93), esoterista y editor británico.[286]​ Herón Escobar García (62), político ...
Una hemorragia cerebral (también, hemorragia intracerebral, ICH) es un subtipo de hemorragia intracraneal producida en el ... producida especialmente por la hemorragia cerebral y por la embolia cerebral, que es el accidente que ocurre cuando un vaso ... Se trata de una hemorragia intra-axial, es decir, una que se produce dentro del tejido cerebral[1]​ y no fuera de él. La otra ... Información de hemorragia cerebral en Headway Wikimedia Commons alberga una categoría multimedia sobre Neurotrauma. Datos: ...
Un estudio de la Universidad de Helsinki revela que se puede prevenir la hemorragia subaracnoidea con esta sencilla actividad ... Qué es una hemorragia cerebral?. "La mayoría de las hemorragias de SAH son el resultado de la rotura de aneurismas cerebrales, ... Conoce cómo prevenir una hemorragia cerebral Publicado: - Jun 26, 2019 Comparte este artículo. ... Este tipo de hemorragia puede matar a quien la padece en tan solo tres meses; además, la tasa de mortalidad es del 50%. Entre ...
Cuál es el riesgo de hemorragia cerebral de la warfarina?. Un estudio de veteranos con arritmia cardiaca encontró que un tercio ... La warfarina, un anticoagulante de uso común que también se conoce como Coumadin, podría elevar el riesgo de hemorragia grave ... El estudio encontró que las tasas de hemorragia intracraneal traumática en las personas mayores con fibrilación auricular eran ... Casi un tercio de los pacientes experimentaron más de un episodio de hemorragia intracraneal traumática, apuntó Dodson, y ...
Inicio » Un accidente de terror a 110 km/h me dejó con una hemorragia cerebral y con dificultades para rapear; ahora he vuelto ... Un accidente de terror a 110 km/h me dejó con una hemorragia cerebral y con dificultades para rapear; ahora he vuelto, dice ...
Pequeñas hemorragias, , 10cm o mínimo déficit neurológico tto médico. GCS score ≤ 4 tratar médicamente (Si hemorragia ... No en ptes HTA añosos y hemorragias en ganglios basales, tálamo, cerebelo o tallo cerebral. ... Hemorragia. Infarto. Presentación progresiva 50-60% (35% máximo déficit al inicio) se correlaciona con el aumento y extensión ... Hemorragias cerebelosas , 3 cm. Φ (diámetro) con deterioro neurológico y compresión de tallo, hidrocefalia x obst. ventricular. ...
Torre 1, San José, Costa Rica.. Tel: (506) 2208 1215. Clínica EVA. 100 metros al sur de la Purdy Motor, Paseo Colón, San José, Costa Rica.. Tel: (506) 2221-4498. Email: [email protected]. ...
... lo que daña el tejido cerebral adyacente. Esta condición médica también se le conoce ... Una hemorragia cerebral se refiere a sangrado dentro del cerebro, ... hemorragia cerebral, hemorragia cerebral causas, causas de hemorragia cerebral, sintomas de hemorragia cerebral, hemoragia ... Hemorragia epidural - hemorragia entre el cráneo y el cerebro. Diagnosticar una hemorragia cerebral puede ser difícil porque ...
Lista de Encabezamientos de materia para las Bibliotecas Públicas ...
Los familiares de Carmen Salinas compartieron que esperan a que la hemorragia ya no exista en un mes o un poco más, esto, ...
Volver a los detalles del artículo Hemorragia cerebral secundaria a trombocitopenia por varicela Descargar Descargar PDF ...
Hemorragia subaracnoidea - Aprenda acerca de las causas, los síntomas, el diagnóstico y el tratamiento de los Manuales MSD, ... hemorragia intracerebral) y hemorragia entre las capas interna y externa del tejido que recubre el cerebro (hemorragia... ... se produce hemorragia en el interior del cerebro, como una hemorragia intracerebral. También puede haber hemorragia entre las ... Causas de la hemorragia subaracnoidea La hemorragia subaracnoidea suele ser el resultado de un traumatismo craneal Introducción ...
Sociedad Peruana de Medicina Interna. Dirección: Av. José Pardo 138 Of. 401. Miraflores Lima-Perú Telf. (511) 445-1954 Telefax : (511) 445-5396.. ...
Hemocultivos Hemodinámica Hemoperfusión Hemorragia Hemorragia cerebral Hemorragia digestiva alta Hemorragia grave Hemorragia ... INTRODUCCIÓN: Los enfermos con hemorragia cerebral (HC) representan un porcentaje importante de los pacientes neurocríticos, ... coli ECDC ECG ECMO Ecocardiografía Ecografía Edad Edad avanzada Edema cerebral Editor de textos Educación EEG Efectos adversos ... Recuperación neurológica Redes sociales Regionalización Registros Reingresos Reintubación Remdesivir REMI Reperfusión cerebral ...
Sangrado anormal (hemorragia). *Una estructura anormal en el cerebro (como un tumor cerebral) ... Monitorear el cerebro durante una cirugía cerebral El EEG puede realizarse para mostrar que el cerebro no tiene ninguna ... Por ejemplo, las ondas cerebrales son más rápidas cuando uno está despierto y más lentas en ciertas etapas del sueño. ... Si el proveedor necesita monitorear la actividad cerebral durante un período largo, se ordenará un EEG ambulatorio. Además de ...
El incremento de la tasa de ictus se debe a un incremento de las hemorragias cerebrales.. A la espera de que otros estudios ...
Breijo Puentes A. Hemorragia cerebral y tromboembolismo pulmonar. A propósito de un caso. . Rev Arg de Ter Int. [Internet]. 29 ... Hemorragia cerebral y tromboembolismo pulmonar. A propósito de un caso. Notas Clínicas / Reporte de casos ... Objetivo: Describir evolución, complicaciones y tratamiento en una paciente con hemorragia cerebral y tromboembolismo pulmonar. ... Factores asociados a la mortalidad de la Hemorragia Cerebral Intraparenquimatosa espontánea en pacientes mayores de 50 Años de ...
Ricardo Calvo murió el 13 de junio de 1966 en Madrid debido a una hemorragia cerebral y su capilla ardiente fue instalada en el ...
Médicos israelíes tratan hemorragia cerebral con innovador procedimiento de «enfriamiento del cerebro». Posted at 20:37h in ... Una mujer de 46 años que sufría de una hemorragia cerebral potencialmente mortal fue tratada por médicos israelíes quienes ... "Nurila acudió a nosotros aquejada de un aneurisma cerebral espontáneo con hemorragia subaracnoidea", explicó el Dr. Stefan ... Después de consultar con expertos en el sistema cerebral, los médicos decidieron probar el enfriamiento cerebral, que ...
La muerte de un anciano por una hemorragia cerebral masiva después de una caída trivial sugiere que las complicaciones ... El caso de un anciano fallecido por hemorragia cerebral pone de manifiesto las limitaciones del nuevo anticoagulante Pradaxa. ... La muerte de un anciano por una hemorragia cerebral masiva después de una caída trivial sugiere que las complicaciones ... nuevas exploraciones habían mostrado progresión de la hemorragia cerebral.. Los intentos de detener el sangrado, incluida la ...
... evaluación del compromiso cerebral en el servicio de emergencias, Instituto de Ciencias Neurológicas de febrero - mayo 2013. ... Determina el valor diagnóstico de la tomografía computada en pacientes hipertensos con sospecha de hemorragia intracraneal: ... Valor diagnóstico de la tomografía computada en pacientes hipertensos con sospecha de hemorragia intracraneal: ... Evaluación del compromiso cerebral en el servicio de Emergencias del Instituto de Ciencias Neurológicas de febrero - mayo 2013 ...
Edwin van der Sar, exarquero del Manchester United, es hospitalizado por una hemorragia cerebral. ...
Apoplejías o hemorragia cerebral *Presión incrementada en el cerebro. *Miastenia grave. * Problemas hormonales, como: *Diabetes ...
Justo ese mismo año, falleció por una hemorragia cerebral en Lawrence. Está enterrado junto a su primera esposa, en esa ciudad ...
DeCS: HEMORRAGIA CEREBRAL; INFARTO CEREBRAL; EQUIPOS Y SUMINISTROS; ESTUDIOS DE SEGUIMIENTO; PROGRAMAS NACIONALES DE SALUD; ... Subject headings: CEREBRAL HEMORRHAGE; CEREBRAL INFARCTION; EQUIPMENT AND SUPPLIES; FOLLOW-UP STUDIES; NATIONAL HEALTH PROGRAMS ... hemorragia intraparenquimatosa (HTP), hemorragia subaracnoidea (HSA), complicación edema, cardiopatía isquémica, diabetes ... La TAC de perfusión trifásica se plantea como muy buena en el diagnóstico de la oclusión de la arteria cerebral media según ...
... trabaja para avanzar en el diagnóstico y atención precoz del accidente cerebrovascular y otros problemas vasculares cerebrales. ... Infarto cerebral.. *Hemorragia cerebral.. *Accidente isquémico transitorio.. *Malformaciones vasculares cerebrales y medulares. ...
... derrames cerebrales o ictus hemorrágicos) - Aprenda acerca de las causas, los síntomas, el diagnóstico y el tratamiento de los ... Hemorragia subaracnoidea Hemorragia subaracnoidea Una hemorragia subaracnoidea es una hemorragia repentina dentro del espacio ( ... Hemorragia intracerebral Hemorragia intracerebral Una hemorragia intracerebral es un derrame de sangre dentro del cerebro. La ... Los accidentes cerebrovasculares hemorrágicos incluyen hemorragia en el cerebro (hemorragia intracerebral) y hemorragia entre ...
Su mayor ilusión era venir a visitarnos, pero murió de una hemorragia cerebral. ...
La parálisis cerebral se refiere a un grupo de trastornos neurológicos que aparecen en la infancia o en la primera infancia y ... Sangrado en el cerebro (hemorragia intracraneal). A menudo, el sangrado dentro del cerebro debido a vasos sanguíneos bloqueados ... Cómo se diagnostica y se trata la parálisis cerebral?. Diagnóstico. La mayoría de los niños con parálisis cerebral se ... Hay cuatro tipos principales de parálisis cerebral:. 1. Parálisis cerebral espástica. Esta es la forma más frecuente. Las ...
  • Una hemorragia cerebral (también, hemorragia intracerebral, ICH) es un subtipo de hemorragia intracraneal producida en el cerebro. (wikipedia.org)
  • La angiopatía amiloide cerebral se caracteriza por el depósito de proteína amiloide en el cerebro. (medscape.com)
  • Introducción a los accidentes cerebrovasculares El accidente cerebrovascular (ictus) ocurre cuando una arteria que va al cerebro se obstruye o se rompe, produciendo la muerte de un área del tejido cerebral provocada por la pérdida de irrigación. (msdmanuals.com)
  • Introducción a los accidentes cerebrovasculares hemorrágicos (derrames cerebrales o ictus hemorrágicos) Los accidentes cerebrovasculares hemorrágicos incluyen hemorragia en el cerebro (hemorragia intracerebral) y hemorragia entre las capas interna y externa del tejido que recubre el cerebro (hemorragia. (msdmanuals.com)
  • En este tipo de accidentes cerebrovasculares, se produce hemorragia en el interior del cerebro, como una hemorragia intracerebral. (msdmanuals.com)
  • Los aneurismas que se producen en las arterias del cerebro (arterias cerebrales) se denominan aneurismas cerebrales. (msdmanuals.com)
  • Dado que el cerebro está rodeado por nuestro hueso del cráneo, el volumen es limitado. (saludopedia.com)
  • La Hiv suele iniciarse en la matriz germinal, que es un conjunto ricamente vascularizado de células precursoras neuronales y gliales en el cerebro en desarrollo. (dnaservic.es)
  • Informamos de nuestra experiencia con las secuelas neurológicas (en un seguimiento medio de 24 meses) entre los 15 bebés supervivientes que han tenido una hemorragia intraventricular neonatal (HIV) documentada por tomografía computarizada (TC) del cerebro. (dnaservic.es)
  • La hemorragia intraventricular (HIV) es una hemorragia dentro o alrededor de los ventrículos del cerebro. (dnaservic.es)
  • Las hemorragias en el cerebro pueden ejercer presión sobre las células nerviosas y dañarlas. (dnaservic.es)
  • La hemorragia intraventricular (Hiv) del recién nacido es una hemorragia en las zonas llenas de líquido (ventrículos) del interior del cerebro. (dnaservic.es)
  • Es un sangrado en la zona comprendida entre el cerebro y los delgados tejidos que lo cubren. (medlineplus.gov)
  • Un examen del cerebro y del sistema nervioso puede mostrar signos de disminución de la función nerviosa y cerebral ( déficit neurológico focal). (medlineplus.gov)
  • Ordeñar el cordón umbilical (apretar suavemente el cordón y empujar el contenido hacia el abdomen del recién nacido antes de pinzar el cordón) podría aumentar el riesgo de hemorragia intraventricular grave o sangrado en las cavidades llenas de líquido del cerebro en bebés extremadamente prematuros, según los resultados de un estudio financiado por los Institutos Nacionales de Salud que se detuvo por razones de seguridad. (nih.gov)
  • Unas manos enguantadas sostienen un segmento cerebral afectado por la enfermedad de Alzheimer (izquierda) y un corte de un cerebro sano (derecha). (nationalgeographic.es)
  • Una lesión en la cabeza es una lesión en el cuero cabelludo, el cráneo o el cerebro. (kidshealth.org)
  • Lo más frecuente es que un desmayo en niños sanos ocurra cuando hay una disminución temporal de la circulación de sangre rica en oxígeno hacia el cerebro (presión arterial). (healthychildren.org)
  • Absceso cerebral Un absceso cerebral es una bolsa de pus localizada en el cerebro. (merckmanuals.com)
  • Un aneurisma cerebral es un punto débil o delgado en una arteria del cerebro que se hincha o se abomba y se llena de sangre. (nih.gov)
  • Todos los aneurismas cerebrales tienen la posibilidad de romperse y causar sangrado dentro del cerebro o el área circundante. (nih.gov)
  • Los aneurismas cerebrales se forman cuando las paredes de las arterias del cerebro se vuelven delgadas y se debilitan. (nih.gov)
  • El Ictus es una patología producida por la disminución o interrupción del aporte de sangre a una zona del cerebro. (aragondigital.es)
  • La hemorragia intraventricular (Hiv) - Los bebés que nacen antes de 34 semanas tienen un mayor riesgo de sangrado en el cerebro debido a los vasos sanguíneos inmaduros podrían no tolerar los cambios en la circulación que tuvieron lugar durante el parto. (americanpregnancy.org)
  • El tipo más común es el accidente cerebral isquémico, provocado por un coágulo que bloquea un vaso sanguíneo en el cerebro. (nih.gov)
  • La hemorragia intraventricular (es decir, la hemorragia en el cerebro) ocurre en el 25% de los lactantes de muy bajo peso al nacer y puede estar causada por múltiples factores. (cochrane.org)
  • La posición de la cabeza puede afectar la manera en la que la sangre circula dentro del cerebro, por lo que puede estar involucrada en el desarrollo de la hemorragia intraventricular. (cochrane.org)
  • Esta revisión de ensayos encontró muy poca evidencia que muestre los efectos positivos o negativos de la posición de la cabeza en la línea media supina (acostado sobre la espalda) para la prevención de la hemorragia intraventricular (es decir, hemorragia en el cerebro) en neonatos muy prematuros. (cochrane.org)
  • Los ACV isquémicos, o infartos cerebrales, se clasifican en función del lugar del cerebro en el que se produce la obstrucción y el lugar del cuerpo en el que se desarrolló el coágulo. (nih.gov)
  • El coágulo puede obstruir el flujo sanguíneo a una parte del cerebro, lo que provoca la muerte de tejido cerebral. (nih.gov)
  • Un ataque isquémico transitorio (AIT) se produce por una obstrucción en el cerebro, igual que un infarto cerebral. (nih.gov)
  • Esto reveló una masa de tejido indicativa de un glioma pontino, un tipo de tumor cerebral que crece en el tronco encefálico, la parte que conecta el órgano con la columna vertebral, así como una hemorragia interna dentro del propio cerebro. (clarin.com)
  • Mind Matters es una serie que explora las formas en que distintas drogas afectan tu cuerpo, tu cerebro y tu vida. (nih.gov)
  • La estimulación cerebral profunda, que implica la colocación de un neuroestimulador para transmitir señales eléctricas a las áreas del cerebro que controlan diferentes funciones, se abre paso más allá de los trastornos neurológicos como la epilepsia y el Parkinson y ya ha llegado, en Psiquiatría, a la depresión y al trastorno obsesivo-compulsivo. (psiquiatria.com)
  • Es el caso de los cuatro pacientes seleccionados en este estudio, en los que los electrodos se colocaron en áreas del cerebro diferentes (núcleo accumbens o área cingulada anterior) , según la patología, los síntomas afectivos o psicóticos y la evolución. (psiquiatria.com)
  • CADASIL es una enfermedad hereditaria de los vasos sanguíneos que se produce cuando el engrosamiento de las paredes de los vasos sanguíneos bloquea el flujo de sangre al cerebro. (nih.gov)
  • Los ataques cerebrales, que impiden que fluya sangre al cerebro o causan hemorragias en o alrededor del cerebro, afectan a casi 800,000 personas en los Estados Unidos cada año y son la cuarta causa de muerte en el país. (medlineplus.gov)
  • Es un grupo de centros médicos que busca encontrar biomarcadores sanguíneos en el cerebro que predigan quién está en riesgo de sufrir deterioro cognitivo o demencia por problemas vasculares. (medlineplus.gov)
  • Cuando los vasos sanguíneos cerebrales son débiles, anormales o soportan una presión inusual, se puede producir un accidente cerebrovascular hemorrágico (derrame cerebral o ictus hemorrágico). (msdmanuals.com)
  • María Eugenia Plascencia , hija de Carmen Salinas , aclaró que su mamá no sufrió un derrame, sino una hemorragia cerebral y reiteró que el estado de salud de la actriz es estable, pero delicado. (latigoyucatan.com)
  • La TC se puede utilizar también para obtener imágenes de la cabeza a fin de localizar lesiones, tumores, coágulos que puedan provocar un derrame cerebral, hemorragia y otras afecciones. (nih.gov)
  • lncluso puede llegar a causarte un ataque al corazón o un derrame cerebral o ponerte en estado de coma. (nih.gov)
  • Análisis recientes indican que entre 5% y 7% de los adultos mayores cognitivamente normales la padecen, pero la tasa es mucho mayor entre los que sufren hemorragia intracerebral , es decir, ictus hemorrágico. (medscape.com)
  • Cuanto más pequeño y prematuro es un bebé, mayor es el riesgo de sufrir una hemorragia intracerebral. (dnaservic.es)
  • cita requerida] En consecuencia, en los accidentes vasculocerebrales agudos conviene distinguir el ictus hemorrágico o hemorragia cerebral (hemorrhagic stroke) del ictus isquémico (isquemic stroke) o embolia cerebral. (wikipedia.org)
  • [ 2 ] De hecho, la angiopatía amiloide cerebral es la segunda causa más común de ictus hemorrágico, solo superada por la hipertensión arterial mal controlada. (medscape.com)
  • Hemos actualizado el capítulo «Ictus isquémico y hemorragia cerebral» en la app Estrategias Terapéuticas en Medicina de Urgencias . (go-space.es)
  • Hemos considerado interesante actualizar el capítulo de Ictus isquémico y hemorragia Cerebral, dada la disponibilidad actual del antídoto específico para los pacientes en tratamiento con dabigatrán: el idarucizumab . (go-space.es)
  • El ictus isquémico , que es el más frecuente (80-85%), y suele estar causado por un coágulo o un estrechamiento de un vaso sanguíneo. (aragondigital.es)
  • El ictus hemorrágico , que es menos frecuente (15%-20%), pero más grave. (aragondigital.es)
  • También es reseñable el papel del estrés emocional en el desarrollo del ictus, ya que se ha observado cómo el estrés crónico aumenta el riesgo de padecer un ictus. (aragondigital.es)
  • El ictus es una de las patologías más frecuentes en todo el mundo. (aragondigital.es)
  • Es muy importante saber detectar los síntomas de un ictus para poder actuar de inmediato. (aragondigital.es)
  • Conclusión La enfermedad de Rendu-Osler es una causa poco frecuente de ictus debido a que suele asociar fístulas arteriovenosas que pueden ser causa de embolias paradójicas. (neurologia.com)
  • Estudios han hallado infartos cerebrales en personas con COVID-19. (nih.gov)
  • Caso clínico Mujer de 83 años que ingresa con clínica de crisis epilépticas y múltiples infartos cerebrales en fase aguda. (neurologia.com)
  • Como quiera que la porción de un tejido del organismo privada de sangre por el bloqueo súbito de una arteria se conoce genéricamente como infarto, la lesión que es consecuencia de una embolia cerebral se conoce también como infarto cerebral. (wikipedia.org)
  • Es una causa común de infarto cerebral. (nih.gov)
  • Con el tiempo, puede dar lugar a un infarto cerebral. (nih.gov)
  • Para aliviar el dolor de cabeza y controlar la presión arterial se utiliza el tratamiento farmacológico y para detener la hemorragia, el tratamiento quirúrgico. (msdmanuals.com)
  • Recientemente, la Neurocritical Care Society and the Society of Critical Care Medicine han publicado unas guías prácticas de actuación para la reversión de la acción anticoagulante de pacientes que ingresan por hemorragia cerebral y están en tratamiento con fármacos antitrombóticos. (go-space.es)
  • Solamente entre el 1 al 5% de los pacientes con isquemia cerebral reciben Trombolisis cerebral, el principal riesgo del tratamiento es la hemorragia intracraneal, la cual ensombrece el pronóstico de los pacientes que reciben trombolisis cerebral. (edu.mx)
  • Es importante que los padres estén informados sobre los factores desencadenantes de desmayos comunes, tales como la deshidratación, y obtengan el tratamiento adecuado cuando sea necesario. (healthychildren.org)
  • A menudo es necesario que un oftalmólogo (un médico especializado en la evaluación y el tratamiento de los trastornos oculares) confirme el diagnóstico y ayude a determinar la causa. (merckmanuals.com)
  • Esto se llama hemorragia posparto y puede ser necesario administrar tratamiento para detener el sangrado. (cdc.gov)
  • El único tratamiento para estos ACV no detectados es recibir transfusiones de sangre con regularidad. (nih.gov)
  • El tratamiento correcto puede ayudar a una persona adicta a sentirse mejor y dejar la cocaína, pero es difícil y la recuperación de la adicción lleva muchos años. (nih.gov)
  • Tanto es así que las sesiones de terapia electroconvulsiva de mantenimiento que seguían los participantes respondedores se pudieron interrumpir en los tres casos con respuesta positiva y también se pudo les pudo reducir parte del tratamiento farmacológico que seguían. (psiquiatria.com)
  • El tratamiento solo es de apoyo y depende de los síntomas. (nih.gov)
  • El control de cualquier factor de riesgo vascular (como fumar o tener presión arterial alta) es una parte importante del tratamiento con CADASIL. (nih.gov)
  • Clinton B. Wright, M.D., M.S., director de la División de Investigación Clínica del NINDS, explicó algunas de las últimas novedades de investigación y su significado para el tratamiento de ataques cerebrales en el futuro. (medlineplus.gov)
  • Ahora, con los sistemas avanzados de escaneo cerebral, se puede recibir tratamiento dentro de las 16 horas de haber tenido un ataque cerebral. (medlineplus.gov)
  • La causa más frecuente es la ruptura de una dilatación (aneurisma) en una arteria. (msdmanuals.com)
  • Sin embargo, la hemorragia subaracnoidea debida a un traumatismo craneal causa síntomas diferentes, se diagnostica y se trata de forma diferente y no se considera un accidente cerebrovascular. (msdmanuals.com)
  • Introducción: la isquemia cerebral es la tercera causa de muerte a nivel mundial y en México. (edu.mx)
  • Si bien la experiencia puede dar miedo, por lo general la causa no es nada grave. (healthychildren.org)
  • La deshidratación es la causa más común de desmayo en los niños. (healthychildren.org)
  • El traumatismo craneoencefálico (TCE) es un motivo de consulta habitual en el servicio de urgencias, la principal causa de muerte traumática en nuestro medio y uno de los motivos más importantes de retraso mental, epilepsia e incapacidad física. (elsevier.es)
  • Es la causa más importante de morbimortalidad infantil, siendo el origen del 25 al 30% de las muertes de origen traumático en la infancia. (elsevier.es)
  • en los lactantes, aunque la causa más frecuente es la caída desde alturas menores, no podemos olvidar la posibilidad del maltrato físico, especialmente el "síndrome del niño sacudido", que constituye la causa más frecuente de TCE grave en este grupo etario. (elsevier.es)
  • Es necesario conocer la causa del traumatismo y cuándo ocurrió. (elsevier.es)
  • Qué causa un aneurisma cerebral? (nih.gov)
  • Esto, provocó la muerte a la víctima, a causa de una hemorragia y laceración cerebral. (tiempo.hn)
  • Como resultado, la mujer es más susceptible a sufrir daños en órganos como el hígado, a causa del alcohol. (nih.gov)
  • El uso de gotas para los ojos es una causa común de un cambio inofensivo del tamaño de las pupilas. (medlineplus.gov)
  • Los datos arrojados por varias comunidades llegan además sólo cuatro días antes de que se retome la vacunación de la farmacéutica AstraZeneca después de que la Agencia Europea del Medicamento (EMA) haya avalado su seguridad y su eficacia y de que en España se haya descartado que la muerte de una profesora de Marbella (Málaga) a causa de una hemorragia cerebral esté relacionada con esa vacuna. (publico.es)
  • Introducción La telangiectasia hemorrágica hereditaria o enfermedad de Rendu-Osler es una enfermedad vascular congénita que se asocia con la presencia de fístulas arteriovenosas que son causa de embolias paradójicas. (neurologia.com)
  • Asocia historia previa de múltiples hemorragias y anemia ferropénica sin clara causa etiológica. (neurologia.com)
  • Tras una exhaustiva anamnesis, se descubre historia familiar de hemorragias y una hermana diagnosticada de enfermedad de Rendu-Osler-Weber, lo que sugiere la posible existencia de una fístula arteriovenosa pulmonar como causa etiológica de su enfermedad cerebrovascular. (neurologia.com)
  • La otra categoría de hemorragia intracraneal es la de las hemorragias extra-axiales: por ejemplo, el hematoma epidural, el hematoma subdural y la hemorragia subaracnoidea, que ocurren dentro de la cabeza pero fuera del tejido cerebral. (wikipedia.org)
  • Una hemorragia subaracnoidea es una hemorragia repentina dentro del espacio (espacio subaracnoideo) comprendido entre la capa interna (piamadre) y la capa media (aracnoides) del tejido que recubre el encéfalo (meninges). (msdmanuals.com)
  • La hemorragia subaracnoidea es una enfermedad potencialmente mortal, que rápidamente da lugar a discapacidades graves y permanentes. (msdmanuals.com)
  • También puede haber hemorragia entre las capas interna y media del tejido que recubre el encéfalo (en el espacio subaracnoideo), dando lugar a una hemorragia subaracnoidea. (msdmanuals.com)
  • La hemorragia subaracnoidea se considera un accidente cerebrovascular solamente cuando se produce espontáneamente, es decir, cuando la hemorragia no es el resultado de fuerzas externas, como un accidente o una caída. (msdmanuals.com)
  • La hemorragia subaracnoidea es una emergencia y necesita atención médica inmediata. (medlineplus.gov)
  • La hemorragia subaracnoidea causada por una lesión en la cabeza en personas mayores a menudo se debe a caídas. (medlineplus.gov)
  • Entre los jóvenes, la lesión más común que lleva a una hemorragia subaracnoidea es un choque automovilístico. (medlineplus.gov)
  • La hemorragia subaracnoidea ocurre comúnmente con otros tipos de sangrado en la cabeza cuando es causada por trauma. (medlineplus.gov)
  • Si el médico piensa que usted puede tener una hemorragia subaracnoidea, se debe realizar una tomografía computarizada de la cabeza (sin medio de contraste) inmediatamente. (medlineplus.gov)
  • ResumenLa hemorragia intraventricular (HIV) es una complicación importante de la prematuridad. (dnaservic.es)
  • Los autores del estudio clasificaron los resultados en un único resultado combinado: muerte o hemorragia intraventricular grave. (nih.gov)
  • Se ha sugerido que esto se podría evitar si el paciente está posicionado en la línea media (central) supina (acostado sobre la espalda), especialmente durante los primeros dos a tres días de vida, cuando el riesgo de hemorragia intraventricular es mayor. (cochrane.org)
  • La posición de la cabeza en el cuidado del lactante puede afectar la hemodinámica cerebral y contribuir a la aparición de una hemorragia intraventricular de la matriz germinal (HIV-MG) en lactantes muy prematuros. (cochrane.org)
  • Aunque los médicos y la partera de Adriana habían descrito el embarazo como "perfecto" durante los nueve meses, Aaron nació con la mayoría de las células cerebrales muertas, como resultado de dos accidentes cerebrovasculares y una hemorragia masiva que sufrió mientras estaba en el útero. (californiahealthline.org)
  • La investigación de los accidentes cerebrovasculares es una prioridad para los Institutos Nacionales de la Salud (NIH, por sus siglas en inglés). (medlineplus.gov)
  • El Instituto Nacional de Trastornos Neurológicos y Accidentes Cerebrovasculares (NINDS, por sus siglas en inglés) lidera la investigación sobre los ataques cerebrales para los NIH. (medlineplus.gov)
  • Ahora que entendemos que la mayoría de las demencias se deben a múltiples causas, los investigadores pueden dejar de pensar en estos trastornos cerebrales (como los accidentes cerebrovasculares o la enfermedad de Alzheimer) de forma aislada. (medlineplus.gov)
  • Se reportaron 10 (23.8%) casos de hemorragia intracraneal post-trombolisis, de los cuales en 7 (70%) se produjo una muerte temprana. (edu.mx)
  • Estas placas interfieren en la actividad cerebral normal y provocan pérdida de memoria, cambios de personalidad, psicosis y, finalmente, la muerte. (nationalgeographic.es)
  • Un aneurisma roto puede causar problemas de salud graves, como un accidente cerebrovascular hemorrágico, daño cerebral, coma o incluso la muerte. (nih.gov)
  • Las autoridades de Los Ángeles han confirmado la trágica noticia de la muerte de un hombre judío a consecuencia de una lesión cerebral que sufrió tras un altercado verbal con un manifestante pro-palestino. (notife.com)
  • Es que el cine de Kurosawa siempre fue capaz de hablar de la vida y de la muerte con la misma naturalidad, con la misma sabiduría, dirigiéndose siempre a lo esencial. (pagina12.com.ar)
  • Descubrir que una afección es el resultado de una infección no es solo un ejercicio para médicos del siglo XIX. (medscape.com)
  • Y esta semana analizamos un estudio que, una vez más, empieza a proponer que una afección que se creía más o menos aleatoria -la angiopatía amiloide cerebral - puede ser en realidad el resultado de una enfermedad infecciosa. (medscape.com)
  • Trastorno de concentración Además de las consecuencias descritas anteriormente, que pueden ocurrir como resultado de una hemorragia cerebral, el desarrollo de un trastorno de concentración es probablemente una de las consecuencias a largo plazo más comunes de una hemorragia cerebral. (saludopedia.com)
  • El resultado neurológico se correlacionó con el grado de hemorragia observado en las TC cuando la Hiv se clasificó en cuatro grados. (dnaservic.es)
  • Se trata de una hemorragia intra-axial, es decir, una que se produce dentro del tejido cerebral[1]​ y no fuera de él. (wikipedia.org)
  • El aneurisma abultado puede ejercer presión sobre los nervios o el tejido cerebral. (nih.gov)
  • También puede estallar o romperse, derramando sangre (lo que se llama hemorragia) en el tejido circundante. (nih.gov)
  • Podemos identificar el tejido cerebral en riesgo y salvar muchas más vidas mucho antes. (medlineplus.gov)
  • Los bebés que nacen con más de 10 semanas de antelación corren el mayor riesgo de sufrir este tipo de hemorragia. (dnaservic.es)
  • También podría ponerlo en riesgo de sufrir hemorragias internas, problemas del corazón y dificultades respiratorias. (nih.gov)
  • Aneurismas cerebrales Un aneurisma es una protuberancia (dilatación) en la pared de una arteria. (msdmanuals.com)
  • Algunos aneurismas cerebrales, particularmente aquellos que son muy pequeños, no sangran ni causan otros problemas. (nih.gov)
  • Los aneurismas cerebrales pueden ocurrir en cualquier persona y a cualquier edad. (nih.gov)
  • Se sabe mucho menos sobre cuántas personas tienen aneurismas cerebrales, ya que no siempre causan síntomas. (nih.gov)
  • Existen escalas como NIHSS y Dragón que se asocia de forma indirecta a la Hemorragia intracraneal. (edu.mx)
  • Hemorragia intracraneal. (edu.mx)
  • Girar la cabeza a un lado puede ocluir el drenaje venoso yugular a la vez que aumente la presión intracraneal y el volumen sanguíneo cerebral. (cochrane.org)
  • Además, los fármacos son caros, pueden causar efectos secundarios adversos y, en el mejor de los casos, pueden tener beneficios modestos para preservar la función cerebral a medida que avanza la enfermedad. (nationalgeographic.es)
  • Pero las autorizaciones han reavivado el debate sobre si ésta es la mejor forma de atacar esta compleja enfermedad. (nationalgeographic.es)
  • La enfermedad de Alzheimer es una afección cerebral progresiva que provoca la formación de grumos pegajosos (placas) de una forma tóxica de la proteína beta amiloide. (nationalgeographic.es)
  • La enfermedad de Addison es poco común. (nih.gov)
  • En esta enfermedad, entre otros procesos, en situaciones avanzadas es donde aparece este patrón. (casimedicos.com)
  • Por otra parte es una enfermedad restrictiva, por lo que cabría esperar una reducción de la capacidad pulmonar total y aquí, en esta radiografía de haber algo, hay justo lo contrario: hiperinsuflación. (casimedicos.com)
  • Las pupilas de un tamaño desigual de más de 1 mm, que se presentan posteriormente en la vida y no retornan a su tamaño normal, pueden ser un signo de una enfermedad ocular, cerebral, vascular o neurológica. (medlineplus.gov)
  • escáneres cerebrales para llegar al fondo de su misteriosa enfermedad. (clarin.com)
  • La enfermedad causada por el coronavirus (COVID-19) es altamente contagiosa y afecta fundamentalmente al sistema respiratorio 1-3 . (medicinabuenosaires.com)
  • Es algo poco frecuente, por suerte. (medscape.com)
  • Es el único tipo de accidente cerebrovascular más frecuente entre las mujeres que entre los hombres. (msdmanuals.com)
  • Los vasos sanguíneos se fortalecen en las últimas 10 semanas de embarazo.La Hiv es más frecuente en los bebés prematuros con:El problema también puede darse en bebés por lo demás sanos que han nacido antes de tiempo. (dnaservic.es)
  • es más frecuente en varones que en mujeres, con una relación de 3:1. (elsevier.es)
  • El nistagmus más frecuente es el horizontal . (barraquer.com)
  • Lo que es un dato aparentemente negativo, no lo es del todo, ya que el informe atribuye este incremento al aumento de personas que reciben terapia antirretroviral , lo que ha hecho disminuir el número de individuos que mueren por causas derivadas del sida. (docsalud.com)
  • Los daños graves en las células pueden provocar lesiones cerebrales. (dnaservic.es)
  • Aquí hablan de lesiones traumáticas por golpes, pero es más probable que te lastimes en un concierto de rock alternativo. (nutritionfacts.org)
  • Los científicos analizaron 160 metanálisis que sumaban más de 1.000 estudios con animales sobre seis trastornos neurológicos -alzhéimer, párkinson, encefalomielitis autoinmune, isquemia focal, hemorragia cerebral y lesiones medulares-, con más de 4.000 comparaciones en total. (ecoticias.com)
  • Conclusiones: En nuestra población, observamos que la aplicación de la escala de Dragón y NIHSS, son un herramientas útiles para identificar de forma temprana el riego de Hemorragia cerebral y mortalidad temprana en los pacientes que recibieron terapia trombolítica. (edu.mx)
  • Y añade que la intervención neuroquirúrgica para implantarlo dura unas siete horas, no está exenta de riesgos como la hemorragia y la infección y la terapia, en conjunto, resulta cara (entre 20.000 y 25.000 euros). (psiquiatria.com)
  • El trasplante cardiaco (TC) es la mejor terapia para pacientes con insuficiencia cardiaca (IC) avanzada, en ausencia de contraindicaciones. (cardioatrio.com)
  • Peres falleció en el hospital mientras dormía a las 3H00 (0H00 GMT) debido a un accidente vascular cerebral, dijo a la AFP su médico personal y yerno, Rafi Walden. (martinoticias.com)
  • Pero más tarde, ese mismo día, sufrió un accidente vascular cerebral grave con hemorragia interna. (martinoticias.com)
  • Se analizarán los expedientes de pacientes con diagnóstico de isquemia cerebral post-trombolisis que ingresaron al servicio urgencias del Hospital General de Zona N° 33. (edu.mx)
  • Una revisión sobre musicoterapia para pacientes humanos advirtió sobre la elección de música de los pacientes, ya que la "música caótica", como el hip-hop y el metal, no curan las células humanas, incluso citando tres estudios, aunque dos de ellos no dicen nada, y el tercero es un boletín de enfermería que simplemente cita la opinión de alguien. (nutritionfacts.org)
  • En concreto, han observado, al año de seguimiento tras la intervención neuroquirúrgica para implantar el dispositivo, resultados alentadores en tres de esos pacientes (en dos la respuesta es notable y en otro moderada) y en el cuarto no se descarta que los presente más adelante (este enfermo no ha querido prescindir aún del dispositivo). (psiquiatria.com)
  • Otra novedad de este trabajo es que los pacientes de la muestra, además de un seguimiento convencional estrecho, han usado una aplicación móvil (o app) y un reloj inteligente donde han ido recogiéndose diferentes datos relacionados con su evolución en diferentes aspectos. (psiquiatria.com)
  • Ahora se han reportado nuevos datos de este dispositivo HVAD a partir del estudio ReVOLVE (Registry to Evaluate the HearWare Left Ventricular Assist System), registro promovido por investigador cuyo objetivo es recoger datos post-CE Mark Trial en pacientes que recibieron esta VAD (HVAD) en la Unión Europea y en Australia con las indicaciones aprobadas entre Feb 2009 y Nov 2011). (cardioatrio.com)
  • Hemorragia gastrointestinal: 12 pacientes (5%) (0,06 EPPY). (cardioatrio.com)
  • Todavía se necesitan más pruebas con más pacientes, pero hasta ahora lo que se ha demostrado es que la telerehabilitación no es peor que la rehabilitación en un centro. (medlineplus.gov)
  • Sabemos que un porcentaje suficiente de las personas que sufren hemorragias cerebrales espontáneas tienen angiopatía amiloide cerebral. (medscape.com)
  • Según nuevos estudios, se supone que alrededor del 10% de los afectados sufren ataques epilépticos a lo largo de su vida como consecuencia de una hemorragia cerebral. (saludopedia.com)
  • Aproximadamente 30,000 estadounidenses al año sufren una rotura de aneurisma cerebral. (nih.gov)
  • Si buscas metal pesado en la base de datos de la Biblioteca Nacional de Medicina, encontrarás, por ejemplo, mucho sobre la contaminación por metales pesados en el pescado, por lo que es difícil imaginar al pescado como parte de una dieta saludable, y quizás ayude a explicar que la incidencia de enfermedades autoinmunes como la artritis juvenil se haya quintuplicado. (nutritionfacts.org)
  • Mi nombre es Will Koehne y represento a la Actividad de Comunicación y Alcance Clínico (COCA, siglas en inglés) de la División de Comunicación de Riesgos de Emergencia en los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. (cdc.gov)
  • Pronóstico Debido a las graves complicaciones, la tasa de mortalidad por hematomas epidurales es relativamente alta. (saludopedia.com)
  • En este sentido, diversos autores afirman que la mortalidad entre consumidores de drogas es muy superior a la encontrada en la población para los mismos grupos de edad y género [3]. (isciii.es)
  • Aunque los metanálisis sugieren que la mortalidad podría reducirse, la certeza de la evidencia es muy baja y no está claro si algún efecto se debe a la inclinación de la cuna (una cointervención en un ensayo). (cochrane.org)
  • Qué es un aneurisma cerebral? (nih.gov)
  • Un aneurisma sacciforme es un saco de sangre redondeado, que se une a una arteria principal o una de sus ramas. (nih.gov)
  • También conocido como aneurisma de bayas (porque se parece a una baya que cuelga de una enredadera), esta es la forma más común de aneurisma cerebral. (nih.gov)
  • Introducción En medicina, una hemorragia cerebral en humanos es una emergencia absoluta que se asocia con riesgos potencialmente mortales. (saludopedia.com)
  • Tiene el inconveniente de que su beneficio es temporal y puede provocar visión doble y caída de párpados. (barraquer.com)
  • Ataque epiléptico Otra consecuencia a largo plazo que es posible después de una hemorragia cerebral es el ataque epiléptico. (saludopedia.com)
  • Pero, a nivel científico, ¿es posible decodificarla a partir de la actividad cerebral? (audioplayer.pe)
  • Un hematoma epidural es un hematoma que se localiza en el espacio epidural. (saludopedia.com)
  • Lo malo de estos trastornos es que afectan mucho a la confianza y a la creación de estrategias de funcionamiento ya que durante la infancia se mide con mucha importancia la capacidad de los niños para atender, obedecer y comportarse adecuadamente y es justo en estos aspectos donde tienen más dificultades. (eleapsicopedagogia.es)
  • El exarquero neerlandés Edwin Van der Sar se encuentra hospitalizado en cuidados intensivos después de haber sufrido una hemorragia cerebral , anunció el Ajax en un comunicado. (mediosrioja.com.ar)
  • Si ha tenido una úlcera o hemorragia de estómago o de duodeno o ha sufrido una perforación del aparato digestivo. (medicamento-prospecto.es)
  • Aunque el cuidado de los bebés enfermos y prematuros ha avanzado mucho, no es posible evitar que se produzca una Hiv. (dnaservic.es)
  • Olson es médica en la división de salud neonatológica y de bebés prematuros de los CDC. (cdc.gov)
  • Cómo se puede tratar una hemorragia cerebral? (saludopedia.com)
  • Ramón Laureano es un rescatista que hace un año, al tratar de recoger a un surfista, no logró huir de la ola de 15 metros que rompía detrás de ellos. (lasexta.com)
  • Ante el incremento de casos de contagios de Covid-19 es indispensable acudir a vacunarse con la vacuna bivalente para estar completamente protegidos, pero ¿tiene el mismo efecto ponerse la vacuna en el mismo hombro? (audioplayer.pe)
  • En ambos casos, el efecto es el mismo. (aragondigital.es)
  • La preocupación importante en los casos de parto prematuro es el desarrollo de los pulmones del recién nacido. (americanpregnancy.org)
  • En la mayoría de los casos, la diferencia en el diámetro es de menos de 0.5 mm, pero puede ser hasta de 1 mm. (medlineplus.gov)
  • Es más, algunos médicos describen en estas mujeres casos leves de hemofilia. (cdc.gov)
  • Si se desprende un coágulo de sangre a partir de una acumulación de placa en una arteria carótida en el cuello, el coágulo puede desplazarse hasta una arteria cerebral. (nih.gov)
  • El síntoma principal es un dolor de cabeza intenso que comienza súbitamente (a menudo llamado dolor de cabeza con estruendos). (medlineplus.gov)
  • Es peor cerca de la parte posterior de la cabeza. (medlineplus.gov)
  • Una lesión en la cabeza puede ocurrir aun con el uso de un casco, pero el casco puede proteger al niño de una fractura de cráneo y una lesión cerebral grave. (kidshealth.org)
  • Se puede solicitar un venograma por RM o un venograma por TC de la cabeza para descartar una trombosis del seno venoso cerebral. (merckmanuals.com)
  • El riesgo de sacudir la cabeza violentamente es remoto pero es muy real. (nutritionfacts.org)
  • El headbanging es una forma de danza contemporánea que consiste en movimientos bruscos de flexión-extensión de la cabeza", más común en el género heavy metal . (nutritionfacts.org)
  • Se ha sugerido que la presión venosa cerebral se reduce y el drenaje cerebral hidrostático mejora si el lactante recibe cuidados en posición supina con la cabeza en la línea media. (cochrane.org)
  • Su voluminosa cabellera esconde una cabeza cuya circunferencia es demasiado pequeña para su edad. (californiahealthline.org)
  • Eugenia señaló aclaró que el estado de salud de su mamás es grave, pero estable, además recalcó que la actriz ha sido muy fuerte y tienen fe para que salga adelante. (latigoyucatan.com)
  • Si la persona está muy grave, es posible que la cirugía tenga que esperar hasta que esté más estable. (medlineplus.gov)
  • Claro, la pérdida auditiva inducida por la música es un problema grave, pero puede deberse a cualquier música alta. (nutritionfacts.org)
  • Las madres portadoras del gen de la hemofilia tienen riesgo de presentar una hemorragia grave después del parto. (cdc.gov)
  • Resultados: Se revisaron 42 registros con isquemia cerebral post-trombolisis. (edu.mx)
  • La criatura en cuestión se llama Ona y nació fruto del afán de superación de su joven creadora, que sufrió una hemorragia en el tronco cerebral hace nueve años. (elpais.com)
  • Ocurre por la ruptura de un vaso sanguíneo, lo que provoca una hemorragia cerebral. (aragondigital.es)
  • Pero pongámonos primero al día sobre la angiopatía amiloide cerebral . (medscape.com)
  • En la mayoría de los libros de texto se sigue describiendo la angiopatía amiloide cerebral como una afección esporádica, pero ha habido algunos estudios curiosos que plantean que puede ser transmisible. (medscape.com)
  • Esta es la idea: si la angiopatía amiloide cerebral está causada por algún agente infeccioso, puede transmitirse en la sangre. (medscape.com)
  • por daño en el tronco-encéfalo cerebral y cerebelo. (barraquer.com)
  • Los cambios finalmente conducen a los síntomas conocidos de una emergencia cardíaca o cerebral. (nih.gov)
  • Se denomina nistagmus pendular , cuando las dos fases son simétricas en su velocidad, y nistagmus en resorte , cuando son asimétricas, de manera que el nistagmus hacia un lado es más rápido que al lado opuesto. (barraquer.com)